Las iglesias no fueron atacadas durante los disturbios de Nueva Caledonia, en el suroeste del Pacífico, según declaró Alain Juillet a Bistro Liberté (TVL.30 de mayo).
Juillet, de 81 años, fue director de inteligencia en la DGSE (Direction Générale de la Sécurité Extérieure) antes de ser nombrado alto funcionario encargado de la inteligencia económica del primer ministro François Fillon hasta 2009.
Es uno de los fundadores de la Grande Loge de l’Alliance maçonnique française, de la que es el primer Gran Maestre.
Según Juilet, los insurgentes perdonaron las iglesias pero atacaron los templos masónicos porque los primeros acuerdos entre Nueva Caledonia y Francia se hicieron a través de las sectas masónicas de ambas partes.
Las protestas y disturbios comenzaron en mayo y se saldaron con 79 muertos a raíz de una reforma electoral.
VIERNES 31 DE MAYO DE 2024.
AGENCIAS/ESNEWS.