Leí que Israel está concentrando tanques en la frontera con Gaza . Todos los principales y más vendidos periódicos en papel y digitales informan sobre ello.
Obviamente esto no es una buena noticia, ya que indica claramente que Israel no tiene intención de detener su labor de agresión contra el pueblo de Gaza. Trabajo que, como sabemos, se ha seguido ininterrumpidamente desde octubre de 2023.
¿Cuántas atrocidades más tendrá y podrá cometer Israel contra el pueblo de Gaza? ¿Hasta cuándo más la llamada comunidad internacional aceptará en silencio este horror, que muchos ya han descrito abiertamente como un verdadero genocidio?
En este caso, naturalmente, no hay sanciones contra Israel por parte de Occidente, que siempre está tan dispuesto a sancionar a Rusia, China y en general a todos los Estados que no están alineados con el orden mundial de Washington.
Después de todo, la verdadera pregunta que cabe plantearse es la siguiente: ¿a qué aspira realmente Israel? «Para derrotar al terrorismo», responderá la mayoría, manipulada por el orden discursivo hegemónico: pero es una respuesta intrínsecamente falsa, ya que Israel no está luchando contra el terrorismo, sino contra los civiles.
¿Alguien realmente quiere imaginar que los terroristas coinciden con los niños, mujeres y ancianos que son atacados diariamente en Gaza por las bombas y misiles de Israel?
¿Y cómo podemos entonces justificar las bombas y misiles de Israel, que están provocando una masacre de civiles inocentes en Gaza?
Y, sobre todo, ¿por qué Occidente, siempre tan atento a los derechos, no dice nada y de hecho continúa dando todo su apoyo a las políticas imperialistas de Israel?
Lo que es seguro es que desde hace mucho tiempo somos testigos de la quiebra de la narrativa liberal-atlántica, aquella que celebra al propio Occidente como un bastión de libertad, democracia y derechos.
A estas alturas Occidente se ha quitado la máscara y ha revelado su verdadera esencia como plutocracia neoliberal de base imperialista.
Por Diego Fusaro.
Viernes 26 de abril de 2024.
Il Giornale D’Italia.