En Pakistán es habitual que las familias cristianas e hindúes sufran el secuestro de sus hijas menores de edad por parte de hombres musulmanes que luego les fuerzan a «convertirse» al Islam y a casarse con ellos. Por ello habían solicitado que se impida un límite de edad para la conversión religiosa. El Ministerio de Asuntos Religiosos del país se niega.
Durante una reciente reunión de la Comisión Parlamentaria para los derechos de las minorías en el Senado, el Ministro de Asuntos Religiosos, Noorul Haq Qadri, dijo que no quería apoyar el establecimiento de un posible límite de edad mínima de 18 años para la conversión religiosa. Si alguien quiere cambiar de religión antes de los 18 años, es una elección libre, dijo, mientras que el matrimonio es una cuestión diferente.
La cuestión del límite de edad mínimo para contraer matrimonio se ha sometido al Consejo de Ideología Islámica, un órgano consultivo. Sin embargo, como señalan las organizaciones cristianas de Pakistán, la cuestión está estrechamente relacionada con la conversión religiosa.
En un mensaje enviado a la Agencia Fides, Nasir Saeed, director de la ONG «CLAAS» (Centre for Legal Aid Assistance & Settlement), explica que los casos de jóvenes cristianas e hindúes obligadas a convertirse han aumentado drásticamente en el último año. Y señala:
«Tener en cuenta el escenario general y considerar el enfoque actual de una edad mínima de 18 años para la conversión es crucial. Me he encontrado personalmente con al menos dos docenas de casos de conversión forzada de jóvenes cristianas en el Punjab, y el 90% de las niñas son menores de dieciséis años».
Según el director de CLAAS, «a menudo la policía convierte los casos de secuestro en casos de ‘conversión religiosa’ y luego, en lugar de tomar las medidas necesarias contra el secuestrador, dan un certificado de conversión a los padres de la niña secuestrada, diciendo que la niña se convirtió al Islam por su propia voluntad, por lo que no pueden hacer nada y todo es legal».
«En algunos casos, la policía llegó a decir a los padres que debían estar contentos porque su hija se había convertido al Islam. Los tribunales paquistaníes tampoco suelen hacer justicia a las víctimas y a sus familias porque, en lugar de decidir y aplicar las leyes vigentes en el país, los casos se deciden sobre la base de la declaración extraída de las niñas secuestradas. Los jueces ignoran por completo las leyes nacionales e internacionales y perjudican a todo el país».
Ante este panorama, «es oportuno y urgente que el gobierno actúe según las recomendaciones de la Comisión del Senado sobre Derechos de las Minorías, fijando en 18 años la edad mínima para la conversión religiosa», señala Nasir Saeed.
Según los líderes cristianos de la sociedad civil de Pakistán, una medida que limite la edad de conversión religiosa a los 18 años puede ser útil para frenar el fenómeno del secuestro, conversión y matrimonio de niñas cristianas e hindúes. Pero la mejor manera de resolver el problema de raíz, dicen, es frenar los matrimonios forzados garantizando la aplicación de una edad mínima de 18 años para contraer matrimonio, según la Ley de Protección de la Mujer.
Fides/InfoCatólica.