Sal de la tierra

Ruan Ángel Badillo Lagos
Ruan Ángel Badillo Lagos

La sal es uno de los elementos que se pueden encontrar en la naturaleza, en el agua del mar o en yacimientos subterráneos. También es un artículo de los más necesarios para la vida del hombre; comer sal del palacio significaba recibir del rey el salario, salarium es el nombre que se le daba a los paquetes de sal con los que se le pagaban a los funcionarios que trabajaban cuidando de la calzada romana. La sal es increíblemente versátil, es un tesoro gastronómico con múltiples usos en la preparación de los alimentos, siendo un ingrediente básico en la vida cotidiana.

En efecto, si la sal pierde su sabor, ¿con qué se la sazonaría? Las personas debemos ser sal de la tierra, es decir, que debemos conservar y hacer sabroso el mundo de los hombres, de lo contrario, no sirve para nada, por ello, nuestra palabra siempre debe ser amable, sazonada con la sal, sabiendo conducirse en la sociedad.

Hoy resulta necesario reflexionar sobre el conjunto del comportamiento humano, con el fin de recordar algunas realidades fundamentales que se viven en el contexto actual y que corren el riesgo de ser deformadas partiendo de determinadas concepciones antropológicas y éticas; somos libres y nadie debe intervenir en cuestiones que atañen a la vida de los demás. Mi intención como siempre es reflexionar y, de ser posible, exhortar a las conciencias sobre cuestiones de importancia según mi propio juicio.

¿Es posible obedecer a Dios y, por tanto, amar al prójimo sin respetar en todas circunstancias las normas de la sociedad? La fe y la vida moral son una a la vez, independiente de la condición social y cultural, sin que con ello se sufra menoscabo por tendencias actuales. Llevar una vida coherente entre la fe y la vida significa llevar una vida digna capaz de ser un referente; “sal de la tierra”, ese es el objetivo del presente texto.

Para que los hombres puedan realizarse es necesario profundizar en lo bueno y lo malo para, desde ahí, tomar decisiones; “el hombre que quiere comprenderse hasta el fondo de sí mismo” debe encontrarse con Dios y, en consecuencia, consigo mismo. Nadie es bueno, solo Dios; en efecto, preguntarse sobre el bien significa dirigirse al sumo bien y, si quieres vivir en el bien, guarda los preceptos. Así, es necesario trascender, ¿cómo? haciéndolo todo por amor.   

Nada debe ser impuesto, es propuesto, y en tu libertad decides aceptar o no. Recuerda, ¡para Dios todo es posible! proponer la fe y la vida moral es tarea confiada de mi parte. En la actualidad, ser “sal de la tierra” no se limita a hablar y exhortar, si no más bien a ser coherentes con lo que se cree y se vive. Esta dicotomía (división) condena la falta de sabor a la vida, es decir, que estoy lejos de ser sal de la tierra.

No hay duda de que la fe requiere de obras. Al tratar de concluir estas consideraciones, ningún hombre puede cancelar la misericordia de Dios ni mucho menos detener su amor, por grandes o numerosos errores que el hombre haya cometido. Debemos enfocarnos en hacer lo bueno, noble, bello y grato a los ojos de Dios, como dice san Agustín, quien quiera vivir tiene en donde vivir. Que se acerque, que crea y viva, y yo agregaría que nos esforcemos por ser sal de la tierra.

Comparte:
Originario de Papantla de Olarte, Veracruz; casado una sola vez y padre de una familia conformada por cuatro hijos. Pensador, reflexivo y analítico sobre la realidad del mundo contemporáneo; promotor del bien común, de la justicia social y de la dignidad de las personas. Creador del Método de Estilo Educativo Único (MEEU); formación como profesor de educación primaria, maestro, directivo de diferentes instituciones, fundador de la escuela Tierra y Libertad, pedagogo nato y matemático. Ha sido asesor técnico del cuerpo directivo y es miembro ejecutivo de la Asociación Civil Formando para la Vida; liturgo, laico católico comprometido, comunicador de la belleza y grandeza de la presencia real y gracia de Dios. Escritor, autor de diferentes libros: Experiencia de un alma, RUAH y Los secretos de mi alma. Actualmente, tiene un programa de radio por Internet titulado “Identidad Católica”, en RADIO Kirios El centro de la radio. También es coordinador de la comunidad “Nueva Jerusalén”, tenista y socio activo del Club Britania.
Leave a comment

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *