La sección de señoras del Regnum Christi, en la ciudad de Córdoba, en el estado mexicano de Veracruz, se reunió con el propósito de seguir la Peregrinación de Sanación de Magdala, dirigida por el P. Juan Solana, L.C., desde Tierra Santa.
Como preparación a la peregrinación, a mediados del mes de septiembre, el P. Solana invitó por redes sociales a realizar el ejercicio de “Romper la Vasija” para ir pegándola poco a poco durante la peregrinación:
A Dios se le llama el alfarero, es el que nos hace, es el que nos modela, las manos de Dios nos dan forma, nos dan el ser, nos conocen y son las que nos tejieron desde el seno materno. Si tenemos resquebrajaduras o estamos rotos, Él es el único que sabe en donde va cada pieza o cómo repararla, así puede encontrarse en la Biblia en Jer 18, 6.
“¿No puedo yo hacer con vosotros, oh casa de Israel, lo mismo que este alfarero? -dice el Señor-. Como la arcilla en mano del alfarero, así sois vosotros en mi mano, oh casa de Israel.”
Cada una de las señoras llevó su vasija y al finalizar el Encuentro con Cristo, la rompieron simbólicamente para iniciar la peregrinación de sanación tal y como fue sugerido por el P. Solana, y así, las irán pegando, como simbolismo de lo que cada quien espera y le pide al Señor que haga en su alma.
Todos necesitamos de Dios, todos necesitamos ser sanados, reparados y que nos haga como un vaso nuevo y eso solo se logra abandonándonos en sus manos amorosas.
