El 4 marzo de 2016 terroristas del ISIS asesinaron en la localidad yemení de Adén a cuatro hermanas de las Misioneras de las Caridad mientras protegían y cuidaban a ancianos y personas discapacitadas en el albergue que dirigían. En el ataque yihadista murieron también otras 12 personas entre ancianos y personal de seguridad. También fue secuestrado el sacerdote salesiano Tom Uzhunnalil, que sería liberado 18 meses más tarde.
Este terrible suceso dio rápidamente la vuelta al mundo. El Papa Francisco lo definió como “un acto de violencia insensata y diabólica” y pidió que la muerte de estas religiosas despertase “las conciencias, guíe un cambio en los corazones”.
Ahora la historia de estas mártires católicas asesinadas en territorio islámico serán llevadas al cine. The Garden of Aden será producida por un equipo de cineastas anglo-yemení y mostrará el testimonio de Anselm, Reginette, Judith y Marguerite, las misioneras de la Caridad que fallecieron aquel día.
Una de las productoras británicas que trabaja en el proyecto, Sherna Bhadresa, indicó a National Catholic Register, tal y como recoge Aciprensa, que la película “tendrá un impacto positivo” y resaltó que, “a pesar de ser una historia de martirio”, será un reflejo de “la humanidad en toda su bondad en un momento en el que el mundo necesita más que nunca que se lo recuerden”.
«Retratar el amor al prójimo»
Según indicó, este filme pretende retratar “el amor al prójimo, disposición de morir por la fe, católicos y musulmanes que se cuidan unos a otros en un país devastado por la guerra y el hambre, y el amor y respeto mostrado a las religiosas”.
Por su parte, el productor Liam Driver indicó que, por el coste de la producción y la complejidad de la realización de un proyecto de este tipo, la muerte de las misioneras de la caridad exige más que un documental una película “Ya se están haciendo documentales sobre Yemen. Para muchos es demasiado deprimente ver imágenes de guerra y hambruna, pero (la historia de Yemen) no puede restringirse a este género. Nosotros estamos contando una historia de diferentes razas y credos trabajando en unidad y respeto mutuo”, agregó.
Además, indicó que la película tiene una conexión personal con él, dado que, “cuando era niño, la Madre Teresa jugó un papel importante en mi educación, pues ella solía escribirles a mi madre y mi abuela”.
“Todavía tenemos la carta donde dijo que estaba orando por mí y por mis hermanos cuando éramos niños. Entonces me mueve pensar que, décadas después, estoy haciendo una película sobre sus hermanas que fueron martirizadas”, remarcó.
Driver señaló que “conocer realmente a las hermanas es saber que no se centran en ellas mismas, sino en Dios y su preocupación por el sufrimiento de los demás. Es por eso que el testimonio de las Misioneras de la Caridad en Yemen, y la propia gente de Yemen, nos lleva directamente al corazón” de lo que sucede en el país actualmente.
Historias que necesitan ser contadas
El guionista y director musulmán británico-yemení, Bader Ben Hirsi, señaló que en Yemen hay “literalmente cientos, si no miles, de historias desgarradoras como resultado de esta guerra inútil e innecesaria”.
«Como narrador y director, tengo que pensar en historias que necesitan ser contadas, especialmente aquellas que pueden traducirse o viajar bien a audiencias internacionales y ayudar a crear conciencia sobre las atrocidades que están ocurriendo”, indicó.
Hirsi resaltó que su atención en la historia de las mártires de Yemen se debió a la “cantidad de personas diferentes que estuvieron directamente involucradas”, entre ellos, los residentes ancianos y discapacitados, los voluntarios, el sacerdote, las religiosas “increíblemente desinteresadas y, por supuesto, el legado de la Madre Teresa”.
“El incidente involucró a personas de todas las edades y habilidades, religiones y orígenes que vivían juntas en armonía; una especie de paraíso que crearon entre cuatro paredes, con respeto y comprensión interreligiosa”, agregó.
En estos momentos se están recaudando fondos en todo el mundo para realizar esta película.
ReL.