A nombre de la iglesia católica, la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas insistió —nuevamente— al Estado mexicano a que desarme y desarticule a los grupos armados de corte paramilitar que se hallan en el municipio de Chenalhó.
Rodrigo Aguilar Martínez, obispo de San Cristóbal de Las Casas, manifestó su preocupación por los constantes ataques armados en contra de la población indígena de Aldama, provenientes de Santa Martha, Chenalhó, que hasta el día de antier dejó a una nueva persona herida, generando incertidumbre, miedo y más episodios de desplazamiento interno forzado.
“Ante el sufrimiento, el dolor, las muertes y los desplazados, por causa del enfrentamiento en las comunidades hermanas de Santa María Magdalena (Aldama) y Santa Martha (Chenalhó), sentimos que un dolor atraviesa nuestro corazón”, expuso el obispo en una misiva.
En este sentido, comentó que la Diócesis observa con mucha preocupación el por qué no se han buscado mecanismos eficaces para resolver el problema de fondo, ya que la violencia ha subido de niveles por presentarse ataques diariamente en distintos puntos y a distintas comunidades de Aldama; “ya varias veces, sea de manera privada o públicas, hemos denunciado esta situación ante las instancias del gobierno federal y estatal, así como hemos perdido el desarme de estos grupos de corte paramilitar”.
Por lo anterior, la institución religiosa reprobó los ataques que se fraguaron el 18 de noviembre en la comunidad de Tabak, en donde miembros de la organización “Cáritas” y del Fideicomiso por la Salud de Niños Indígenas de México (FISANIM), fueron recibidos a balas cuando de disponían a entregar ayuda humanitaria.
Con inforamción de Diario de Chiapas