El Gobierno de Pedro Sánchez ha hecho público que permitirá todas aquellas manifestaciones el próximo 8M que no superen las 500 personas. Como si el coronavirus ya no existiera. Como si los 90.000 muertos en España fueran sólo cifras. Como si no hubiera estado de alarma. El anuncio lo ha hecho este miércoles el delegado del Gobierno en Madrid, el socialista José Manuel Franco, y las feministas afines a PSOE y Podemos ya se están convocando a través de sus redes a celebrar la manifestación principal en la Plaza del Callao con motivo del Día Internacional de la Mujer.
El delegado del Gobierno, que llegó a estar imputado -luego se archivaron las diligencias- por un presunto delito de prevaricación por permitir el 8M (él estuvo en la pancarta del PSOE), ha declarado este miércoles en Onda Madrid que «rotundamente no habrá» una gran protesta feminista en la capital, como la ocurrida el año pasado o en años precedentes. Según Franco, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid «desaconseja las concentraciones de más de 500 personas y estamos siguiendo a rajatabla esa recomendación».
La incidencia del coronavirus en Madrid se mantiene en riesgo extremo, con 362 casos por cada 100.000 habitantes en las últimas dos semanas. El martes se notificaron 1.503 casos positivos de Covid-19 (1.152 más que el lunes) de los que 1.253 contagios fueron diagnosticados en las 24 horas previas. Y 33 defunciones por esta enfermedad.
Tras conocerse la intención del Ejecutivo socialcomunista después de la polémica del año pasado, la indignación ciudadana se ha apoderado de las redes sociales debido al doble rasero de PSOE y Podemos en aplicar las restricciones frente al virus. De hecho, actualmente en Madrid una persona no se puede sentar con seis comensales más en una terraza. Sin embargo, las feministas de Irene Montero y Carmen Calvo sí podrán congregarse para gritar sus proclamas hembristas en la céntrica Plaza del Callao en una cifra cercana a las 500 asistentes, el equivalente a 83 mesas al aire libre. Callao convertido en una macroterraza de activistas con pañuelos y guantes morados.
De hecho, según ha podido constatar OKDIARIO, uno de los colectivos de mayor peso en la Comisión 8M, el Movimiento Feminista de Madrid, ya está emplazando a sus simpatizantes a concentrarse en la Plaza del Callao el próximo lunes 8 de marzo a las 18:00 horas. Es el mismo lugar que congregó el pasado sábado 20 de febrero a centenares de radicales del Movimiento Antirrepresivo de Madrid, jaleados por Podemos, en apoyo del rapero Pablo Hasél, en prisión tras ser condenado por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona y ser reincidente. El fuerte dispositivo policial impidió que hubiera altercados.
El año pasado, en la comunicación oficial del 8M a la Delegación del Gobierno apareció el nombre de Alicia López Hernando, que fue candidata de Podemos en las municipales de 2019, como promotora de la convocatoria, junto a las feministas Edelia Álvarez, Carmen Pérez Hueros y Mercedes Isabel Bustos Tocón, «todas ellas en nombre de la Comisión 8M del Movimiento Feminista de Madrid».
«Deslocalizar»
Para esta edición, tal y como publicó OKDIARIO el pasado lunes, las feministas del 8-M han lanzado la consigna interna de no acudir masivamente a la manifestación principal, que en 2020 reunió a 120.000 personas en la capital con el virus ya desbocado, sino de «deslocalizar» la convocatoria priorizando la asistencia a las concentraciones más cercanas, aquellas previstas en distintos municipios de la Comunidad de Madrid. Todo ello con el espíritu de «tomar» las calles.
El año pasado, antes de decretar el estado de alarma, el Gobierno de PSOE-Podemos autorizó 480 manifestaciones por el Día Internacional de la Mujer, siendo Madrid la comunidad que más convocatorias acogió: 41 marchas, incluida aquí la celebrada por la Comisión 8M en el centro de la capital a la que asistieron la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, la hoy ministra de Sanidad, Carolina Darias, la de Igualdad, Irene Montero, o la esposa del presidente, Begoña Gómez, todas ellas infectadas por coronavirus. Aquella cita terminó convirtiéndose en un infectódromo, disparando los contagios un 2.000%, según los datos agregados publicados después por el Ministerio de Sanidad.
Así lo reveló el Ejecutivo socialcomunista en una respuesta parlamentaria un grupo de diputados del PP, como publicó OKDIARIO. Moncloa señaló en esta contestación al Grupo Popular que esas 41 manifestaciones en la Comunidad de Madrid congregaron a 136.430 personas, de las cuales 120.000 habrían sido asistentes a la marcha principal bajo el lema Revuelta Feminista. Con derechos, sin barreras, feministas sin fronteras, según los datos que dio entonces la Delegación del Gobierno.
«No lo voy a decir»
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ya ha animado a las feministas a movilizarse el próximo 8M («más que nunca») en respuesta a la propuesta de Vox de declarar este efeméride como Día Nacional de las Víctimas del Coronavirus. Algo que también hizo en la edición de 202o pese a reconocer en privado el 9 de marzo que la menor afluencia se había debido a la expansión del coronavirus. «¿A qué crees que se debe la bajada de cifras?», le preguntó una periodista en un off the record, a lo que Montero contestó: «Pues tía, creo que al coronavirus. O sea, no lo voy a decir pues porque no lo voy a decir». Una confesión que levantó una gran polvareda política y que la Guardia Civil incluyó en su informe a la titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Carmen Rodríguez-Medel.
Segundo Sanz.
Ok Diario.
