Tanto el INAH como la iglesia presentaron una denuncia bajo los cargos de invasión y daños por el incendio presuntamente provocado por un indigente; otro por intento de robo por parte de otro individuo al que se le sigue una carpeta de investigación.
Para el P. Salvador Barba, director de la Dimensión de Bienes Culturales de la Arquidiócesis de México, pudo haber sido un distractor el incendio por parte de un hombre, sospechoso de intentar robar obras artísticas u otro bien material de la Iglesia de la Santa Veracruz.
Agencia Católica de Noticias recogió la hipótesis del sacerdote que desde el siniestro tuvo un marcaje personal de todos los hechos y quien confirmó que era práctica común que los indigentes buscaran cobijo en la parroquia, la cual en los últimos meses luce abandonada porque su párroco, el P. Bernard Olorunfemi, se le encomendó otra rectoría y ya nadie la supervisa.
“Hay un reporte policíaco de que se les detectó desde una semana antes de incendio (indigentes), pero al ser propiedad federal no pudieron ingresar al inmueble”,
narró.
“Platicaba con las personas de seguridad y un poco con autoridades del INBA y del INBAL, coincidieron en que los rondines se los daban, pero los indigentes se les escondían”,
detalló.
Señaló que, por circunstancias del sismo del 2017, obligó a cerrar dicha Parroquia, por el peligro de desplome por un fuerte problema estructural, sobre todo en las 2 torres campanario.
Museo de la Estampa; con seguridad las 24 horas
Señaló que la supervisión es constante pero solo desde lo que visualizan los uniformados desde el Museo de la Estampa, el cual que sí tiene asignada vigilancia permanente las 24 horas; sin embargo, no tienen visión de la calle 2 de abril, esquina con Avenida Hidalgo”.
Descartó la hipótesis de que este ataque se perpetrara por consigna de grupos abortistas, o del Lobby gay que están en contra de los principios de la Iglesia católica, ya que “un anticlerical, contra los principios y valores se hubieran metido con un grupo bien organizado y con su doctrina perversa hubieran efectuado de forma más fulminante el siniestro”.
Refuerza hipótesis de que uno de los dos hombres que ingresó, intentó robar
En el incendio, se originó una detención de una persona que se escudó en que era indigente y que lo venían persiguiendo, éste brincó la reja, pero realmente la sospecha es que se metió a robar.
El probable responsable se encuentra en investigación pericial, además hay otra persona en situación de calle que tuvieron que rescatar los bomberos, de la que está la versión de que, al prender una fogata, se salió de control por los puntales de madera del campanario en donde se encontraba.
El clérigo confirmó sobre éste último sospechoso que, al tratarse de una persona en situación de calle, “no hay mucho que investigar”.
Por último, señaló que la autoridad dará seguimiento por oficio, y que en base a esta experiencia en la que resultó dañado el inmueble que se considera un monumento histórico del Siglo XVI, se está contemplando quitar escalera y asegurar accesos.
