El secretario de Estado vaticano, el cardenal italiano Pietro Parolin, recordó hoy que «el principio fundamental del derecho internacional humanitario es que hay algunos lugares que, incluso en caso de guerra, deben ser salvaguardados : en primer lugar los hospitales» al hablar de la guerra en Gaza.
La atención se centra inmediatamente en el drama que se vive en Oriente Medio: «La preocupación continúa, la inquietud es grande», dijo el cardenal, reiterando su condena a las acciones de guerra contra los hospitales. «El respeto a los hospitales y lugares de culto es un aspecto fundamental del derecho internacional humanitario. No hay ninguna razón para utilizar los hospitales para ninguna acción de guerra». Por lo tanto», dijo, «la condena es total«.
«La inhumanidad de la guerra radica también en que no tiene en cuenta nada ni a nadie , el único objetivo pasa a ser el de destruir al enemigo, destruir al adversario, anulando los derechos de las personas», dijo.
Y agregó que «estos lugares deben ser salvaguardados por todos, nadie debería utilizarlos para sus propios fines y nadie debería atacarlos».
En relación a lo que está ocurriendo en Gaza, con intervenciones del ejército israelí en los hospitales palestinos, el cardenal ha asegurado que cabe una «condena total» a dicha práctica:
«El respeto a los hospitales y lugares de culto es un aspecto fundamental del derecho internacional humanitario. No hay ninguna razón para utilizar los hospitales para ninguna acción de guerra».
Parolin también se refirió al resurgir del antisemitismo tras la intervención militar israelí en Gaza y aseguró que «el antisemitismo es un monstruo. Hemos visto qué desastres ha provocado este monstruo. Siempre es un peligro acechante del que siempre debemos tener cuidado. El problema es que nos olvidamos del pasado».
Sobre el otro frente en el que está trabajando la diplomacia vaticana, la guerra en Ucrania, recordó que sigue en pie la misión de negociación del cardenal Matteo Zuppi, y que «la visita del papa a Kiev queda en un segundo plano», pero que si se dieran las condiciones para esta visita, como la de ir también a Moscú, el «papa iría”.
El secretario de Estado comentó sobre la situación mundial que a pesar de todo «también hay algunos signos de esperanza», citando como ejemplo «el resultado de la reunión entre el presidente de Estados Unidos y el presidente de China».
CIUDAD DEL VATICANO.