Ahora un obispo alemán dice que «el amor homosexual» no es una aberración

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Un obispo alemán ha declarado que la diversidad sexual es “querida por Dios y no viola la voluntad del Creador”, y que “hacer el amor homosexual” no es una aberración sino una “variante de la sexualidad humana”. 

Helmut Dieser, obispo de la diócesis de Aachen y director del Foro para la Sexualidad y la Asociación para el Camino Sinodal, es conocido por sus puntos de vista heterodoxos sobre la sexualidad. Hizo sus últimos comentarios escandalosos en una entrevista con el medio de noticias alemán Deutsche Welle , publicada el 8 de noviembre. 

El prelado alemán dijo que “el estado actual de la enseñanza de la Iglesia no hace justicia a ciertas realidades en el área de la sexualidad humana”. Dieser calificó la enseñanza de la Iglesia sobre la sexualidad como «demasiado simplificada». 

“Esto se aplica, por ejemplo, a la cuestión de la homosexualidad”, continuó Dieser. “No podemos dar a las personas homosexuales la respuesta de que sus sentimientos no son naturales y que, por lo tanto, deben vivir vidas célibes. Como Iglesia, tenemos que responder a estas preguntas de una manera nueva”. 

El prelado alemán afirmó que “la ciencia” demostraría que la homosexualidad “no es un percance, ni una enfermedad, ni expresión de un déficit, ni, por cierto, consecuencia del pecado original”. 

“El mundo es colorido y la creación es diversa”, afirmó Dieser. “Y entonces también puedo aceptar una diversidad en el área de la sexualidad que es querida por Dios y que no viola la voluntad del Creador”. 

Esta no es la primera vez que Dieser expresa su opinión de que la homosexualidad es “querida por Dios”. Hizo la misma afirmación en una entrevista en septiembre, en la que también afirmó que la anticoncepción “fortalece la protección de la vida”. 

Cuando el entrevistador le preguntó si Dios se opone a que “un hombre ame a un hombre o una mujer ame a una mujer”, Dieser respondió que “la atracción hacia personas del mismo sexo y hacer el amor no es una aberración, sino una variante de la sexualidad humana”. 

Dieser dijo que solía pensar que la homosexualidad era una “limitación en la identidad masculina o femenina”, que los “jóvenes” han cambiado de opinión y que aprendió que sus viejos puntos de vista no son “teológicamente vinculantes”. 

Además, el prelado alemán dijo que los obispos alemanes quieren pedir al papa Francisco que cambie el catecismo sobre este asunto, como ha pedido el heterodoxo Camino Sinodal . 

Los puntos de vista de Dieser están en oposición directa a la enseñanza inmutable de la Iglesia Católica sobre la sexualidad. La Iglesia Católica ha enseñado infaliblemente desde sus inicios que los actos homosexuales son un pecado grave y que la atracción por personas del mismo sexo es desordenada. El Catecismo de la Iglesia Católica afirma lo siguiente:  

Basándose en la Sagrada Escritura, que presenta los actos homosexuales como actos de grave depravación (cf. Génesis 19,1-29; Romanos 1,24-27; 1 Corintios 6,10; 1 Timoteo 1,10), la tradición siempre ha declarado que “los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados”. (Congregación para la Doctrina de la Fe,  Persona humana , 8). Son contrarios a la ley natural. Cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una genuina complementariedad afectiva y sexual. Bajo ninguna circunstancia pueden ser aprobados. (CCC 2357)

Además, es imposible que la Iglesia cambie su enseñanza sobre los actos homosexuales ya que son “intrínsecamente desordenados” como dice el Catecismo. Por lo tanto, estos actos son siempre pecaminosos, independientemente de las circunstancias. 

Los actos homosexuales son contrarios a la ley natural, ya que el fin natural de las relaciones sexuales es la concepción de un hijo. 

El deseo sexual es la inclinación natural hacia las relaciones sexuales con el sexo opuesto para reproducirse. Los actos homosexuales no sólo excluyen la posibilidad de la procreación, sino que además son contrarios al orden de la naturaleza al apartarse de la inclinación hacia el sexo opuesto. Solo buscan gratificación sexual sin la posibilidad de concebir un hijo. 

Además, las afirmaciones de Dieser de que la homosexualidad es una “variante de la sexualidad humana” parecen depender de la afirmación de que las personas “nacen” con inclinaciones homosexuales y que, por lo tanto, son “naturales”. 

 Como demostró Pete Baklinski de LifeSite   en 2021, la suposición de que alguien puede «nacer gay» no está respaldada por ningún hecho científico válido: 

La ciencia ha dejado en claro que no existen   factores biológicos conocidos , como un «gen gay», por ejemplo, que pueda usarse para distinguir a alguien con atracción por el mismo sexo de alguien con atracción por el sexo opuesto. El Royal College of Psychiatrists británico pro-LGBT  admitió en un documento de posición de 2014  que la atracción por personas del mismo sexo no es algo con lo que uno nace, sino que está determinada por una serie de factores, incluidos los «factores ambientales posnatales». Los psicólogos han señalado que el trauma infantil,  especialmente en el área de la relación padre-hijo , es un factor clave en el desarrollo de la atracción hacia el mismo sexo.

Por Andreas Walzer.

Miércoles 9 de noviembre de 2022.

ALEMANIA.

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