“Le pido al Señor que yo persevere hasta el último momento de mi vida, que yo no lo traicione”, confesó el padre Jesús Caballero Encalada al celebrar ayer los 40 años de su ordenación.
El sacerdote, rector de Nuestra Señora de la Paz, oró asimismo para que el Señor lo mantenga contento porque “la alegría significa la paz y tranquilidad de conciencia, de corazón”.
El padre Caballero fue ordenado junto con Luis Espínola Echeverría el 24 de septiembre de 1980 en la Catedral, en ceremonia que presidió el arzobispo monseñor Manuel Castro Ruiz.
Antes de la misa de acción de gracias por su aniversario, que ofició por la noche en Nuestra Señora de la Paz, el sacerdote recordó al Diario que a los 19 años ingresó al Seminario Conciliar con el deseo de llevar a Cristo, la luz, la paz a la gente, y andar por un camino nuevo.
“Quería ser psicólogo ,pero ya desde pequeño sentía esa inquietud por el sacerdocio”, reveló.
Su decisión fue alimentada por el ejemplo de sus padres, el cariño que se profesaban el uno al otro, su vida apostólica y piedad, al igual que por el contexto social de la época, en que había mucho desenfreno entre la juventud.
“Caminar en la esperanza, como lo dice el Plan Diocesano de Pastoral”, lo ha mantenido firme en la vocación sacerdotal.
“Yo entiendo la esperanza como poner toda la fuerza de tu fe y el ímpetu de tu amor en un futuro en el que crees y amas”,
explicó.
“Como en todo ministerio y esposorio espiritual, ha habido momentos de lágrimas, difíciles por la condición en que estoy, en una sillas de ruedas”, admitió. “Pero siempre me ha motivado la confianza y la fe en el Señor que está conmigo”.
“He tenido 13 cirugías y en cada una he salido adelante. Como que me dice Cristo: aún tienes mucho que dar, que enseñar, que configurarte como Cristo sacerdote”.
Añadió que durante la pandemia ha enfrentado desafíos, como dar clases en línea y celebrar misas sin fieles, sabiendo que éstos necesitan a Cristo sacramental. “Que Dios me cuide, me dé salud y vida para reactivar mi trabajo apostólico”.
El padre Caballero Encalada consideró que en el pasado había más condiciones para que los jóvenes escucharan el llamado de Dios y optaran por el sacerdocio.
“El joven de hoy tiene miedo a todo lo que implica compromiso, hasta al matrimonio y sacerdocio”.
“En este mundo materialista no nos olvidemos que hay un Dios que nos ama. Si sientes esa inquietud, vale la pena renunciar, que no rechazar, a algo bueno por algo mejor como es la vida sacerdotal y laical comprometida”, manifestó.
“Como toda vocación es difícil, se corren riesgos, pero Dios siempre está tendiendo la mano para que lo encuentre el que lo busca”.
El sacerdote, de 69 años de edad, originario de Mérida, fue rector de Santa Lucía antes de asumir la misma responsabilidad en la comunidad de Chuburná de Hidalgo.
Sacerdote Perfil
El padre Caballero es asesor del instituto de señoritas consagradas de la Arquidiócesis de Yucatán.
Familia
Es hijo de los esposos Ramiro Caballero Barreiro y Ligia Encalada Sacramento (finados) y hermano de Jorge (finado), Ramiro y Dulce.
Formación
Cursó Filosofía en la Pontificia Universidad Gregoriana, en Roma. Fue vicario en Conkal, Abalá y, en Mérida, en El Divino Redentor (Pensiones) y el Sagrario Metropolitano de la Catedral. Durante 17 años trabajó con grupos apostólicos en misiones de Semana Santa.
En escuelas
Ha sido director espiritual de los colegios Educación y Patria y Teresiano, y capellán de las Madres de la Luz y las Siervas del Sagrado Corazón de Jesús y de los Pobres. Asimismo, ha sido profesor del Seminario durante 36 años.
Con información de: Diario de Yucatán/Claudia Sierra Medina
