La primera piedra se colocó en agosto de 2020. Los católicos devotos de la madre de Dios se reunieron en la iglesia de San Francisco Javier para orar por la paz y la prosperidad de su país y por los misioneros.
El arzobispo y nuncio papal Christophe Zakhia El-Kassis bendijo hace pocos días en Sarghoda, Punjab, una gruta dedicada a María, Madre.
«Todo esto ha sido posible gracias a la contribución de los fieles y al arduo trabajo de las personas que trabajaron incansablemente para construir esta gruta dedicada a María Madre», dijo el P. David, párroco local. «Pero sobre todo es un símbolo de nuestro respeto y nuestra devoción a la Madre de Dios”. En Pakistán, los cristianos celebran el mes del rosario con gran entusiasmo y devoción.
«Le encomendé mi padre a María cuando lo llevaban al quirófano; él no estaba solo luchando por su vida en ese momento. Nosotros también como familia lo estábamos apoyando y rezábamos a María para que le salvara la vida», contó Kashif Anthony, coordinador de la Comisión Nacional de Justicia y Paz de la arquidiócesis de Karachi. Su padre, Javed Charagh, trabajaba como catequista en la parroquia de St. James de Korangi, se salvó de milagro. Cuando sufrió un segundo infarto, los médicos y enfermeras le daban pocas horas de vida.
La primera piedra fue colocada por el P. Leonard Stager. El anciano sacerdote católico coordinó los esfuerzos para la construcción de la gruta y colocó la primera piedra en agosto de 2020. Para la inauguración, la comunidad de fieles se reunió en la iglesia de San Francisco Javier en Sargodha, donde rezaron por la paz y la prosperidad de Pakistán y recordaron especialmente la obra de los misioneros católicos.
Por Shafique Khokhar.
Sargodha, Pakistán.
AsiaNews.
