Además del uso obligatorio del uso de cubrebocas, sanitizantes, toma de temperatura y distanciamiento social de 1.5 m, la diócesis de Coatzacoalcos, Veracruz, anunció que un protocolo para toda su zona territorial para evitar contagios por el covid-19 entre fieles y personal de la Iglesia.
A la población vulnerable, recomendó participar en las celebraciones litúrgicas desde el hogar en las transmisiones por las diferentes plataformas digitales.
Informó que prescindirá de los acólitos y que basará su reincorporación en las misas con la instrucción que gire la SEP, que dependerá de su calendario de regreso a clases.
El protocolo subraya que un presbítero evaluará el número de personas que podrán ingresar, según la capacidad de cada templo e indicará el lugar donde deberá colocarse cada persona en el orden de adelante hacia atrás y acorde a señalizaciones de las bancas.
Sobre el uso de las hojitas dominicales para la santa misa, subraya que, para evitar contagios con su distribución, al finalizar la celebración se les pedirá a los fieles que la lleven consigo.
Se estableció que el sacerdote será auxiliado por los ministros extraordinarios para dar la comunión y ésta será consumida frente a quién la distribuye, todo con las medidas de higiene ya expuestas.
Se ideó también que los encargados de leer la celebración por micrófono, lo cubrirán con un pañuelo desechable.
Reitera que los sacerdotes en situación vulnerable, no distribuirán la comunión.
Entre los requerimientos durante la celebración del Sacramento de la eucaristía, se informa que se brindará información a los asistentes para que comprendan la importancia de cuidarse a sí misma y puedan evaluar su condición física antes de asistir a misa.
El documento de las medidas sanitarias, lo firma Mons. José Rutilo Muñoz Zamora, obispo de Coatzacoalcos.
PROTOCOLO PARA LA REAPERTURA DE LOS TEMPLOS PARA CELEBRACIONES RELIGIOSAS