En la localidad del Regnum Christi en Saltillo, Coahuila, México, la consagrada Rocío Caballero impartió, en el club Timón, un taller de acompañamiento dirigido a la sección señoras, con el fin de adquirir herramientas para poner en práctica las 13 claves del acompañamiento.
Actualmente, derivado de los avances tecnológicos, cada día nos encontramos en un mundo más digitalizado que, si bien ha contribuido a muchísimas bondades para llevar nuestra vida diaria, también es cierto que ha provocado en muchos de nosotros la pérdida de la sensibilidad y de la conexión con otras personas como lo es escuchar y hablar con los demás; nos hemos desconectado más de la realidad.
Es por ello que en el taller, se compartió como a través del apostolado, se puede generar una mirada de empatía hacía los demás para entender las necesidades y ofrecerles esta disposición y salir al encuentro. En concreto como aprender a conectar con los demás y concentrarnos en escuchar y entender al prójimo para apoyarles a lo más importante: construir una mejor versión de la persona bajo la conciencia de ser amados por Dios.
El P. Filiberto Cervantes, L.C., director de sección de las señoras Saltillo, compartió la importancia del acompañamiento derivado de lo que Jesucristo nos ha enseñado y orientar a esas almas que lo necesitan.
“Siempre va a ser una necesidad sentirnos acompañados. Esto es necesario en todo ser humano y las señoras pueden ejercer esto porque hay muchos apostolados en Saltillo”.
P. Filiberto Cervantes, L.C.
Algunos testimonios parten del taller, tal como Edith Martínez, que comparte como fue una experiencia muy grata porque tuvo una reflexión profunda consigo misma que le hizo pensar en cuál era su don como persona y como podría compartirlo con los demás.
“Lo que más me ha gustado es que te hace voltearte a verte a ti mismo… y de qué manera.”
Edith Martínez, sección señoras Saltillo
Finalmente, María José César, otra participante del taller, comparte lo importante que fue para ella recibir este curso, ya que aprendió “gracias del cielo”, donde el acompañamiento debe ser con calidad y viendo a las personas como una misión que tienen un propósito. Un acompañamiento del día a día con las personas que Dios ha puesto en su camino y que sin duda, éste taller le proporcionó las herramientas para hacer un buen acompañamiento.