Desde el próximo miércoles 22 de Septiembre hasta el 31 de Octubre se realizará la campaña “40 días por la vida 2021”, millones de personas alrededor del mundo estarán haciendo oración, ayuno y penitencia por el fin del aborto. Millones de personas orando por un mismo fin 40 días seguidos, no hay falla, es un modelo de éxito, es bíblico, se verán y se han visto cosas maravillosas.
Hoy en día vivimos una crisis que se llama aborto y es la principal causa de muerte en todo el mundo, aproximadamente 42 millones de niños son asesinados al año antes e nacer, y 1.2 millones de ellos pertenecen solo a E.E.U.U según cifras oficiales del 2018. Las cantidades van en grave y grande incremento. Para que podamos dimensionar, es como si se exterminara a una tercera parte de la población del territorio mexicano en un año, es decir; como si en 3 años desapareciéramos todos del territorio nacional. ¿Gravísimo no? Un país sin gente es una nación débil y en decadencia.
Vivimos en la crisis que afecta a la mujer y mata a un inocente, todo el que estudia y participa en la causa Pro Vida sabe que al estar contra el aborto es también ser Pro Mujer. Afortunadamente muchas mujeres han sido protegidas y salvadas por los miembros de 40 días por la vida antes de entrar y caer en las garras del aborto y del engaño tomando la peor decisión de su existencia.
“40 days for life” nació en 2004 en Texas ante la desesperación, pues habían aumentado a miles las muertes en una clínica abortista. “Planned Parenthood” había llegado a la comunidad de Bryan College Station años antes. Ante el desgaste y no saber qué hacer para defender la vida, pidieron a Dios que fuera su fuente de inspiración y orando llegaron los 40 días, lapso de tiempo que Él ha usado en repetidas ocasiones. Fueron 40 días de oración y ayuno por el fin del aborto, 40 días de formación a la comunidad para que todos conocieran la realidad y se sumaran, 40 días de vigilia pacífica afuera del centro de abortos local…sorprendentemente la tasa de abortos bajó en un 28% . No se esperaban que otras ciudades empezarían a hacer lo mismo, poco a poco se extendió hasta que en el 2007 se lanzó una campaña nacional por todo Estados Unidos; hoy en día se hace alrededor del mundo con grandes resultados y celebrando el cierre de cientos de clínicas de muerte, osea millones de bebés salvados. Son millones de personas las que participan e incluso muchísimos son ex trabajadores de planned parenthood, ahora líderes “pro life”. Hay infinidad de interesantes testimonios.
Es hora de activarnos, acércate a la campaña de “40 DÍAS POR LA VIDA” más cercana, agendate e invita. Debido a la situación pandémica actual, algunas campañas no serán presenciales y se llevarán a cabo desde casa, desde el Santísimo, misas y transmisiones por internet. En la mayoría ya es de manera presencial, afuera de las iglesias o frente a centros de aborto.
Como Cristianos tenemos el deber de ir contra corriente si nos imponen la muerte ya sea al final, en medio, al comienzo de la vida o en cualquier etapa, informar si vemos que engañan a la mujer disfrazando gustos y deseos por derechos, si les hacen creer contra toda ciencia que el cuerpo de otro u otra es el suyo y que pueden decidir desaparecerlo porque pudiera ser una molestia. Como Católicos debemos y tenemos que luchar siempre por la verdad, contra el mal y no ser cómplices de toda esta imposición mundial votando por candidatos que con palabras bonitas y sonrisas obedecen a un sistema satánico, si son capaces de esas atrocidades… ¿crees que les va a importar si nuestra economía va bien o mal, o que les interesará nuestra seguridad?. Las consecuencias de la crisis nos llegarán a todos. Se peca también de omisión y no podemos estar callados o decir: -Eso no es mi problema, a mí no me afecta, a mí que me importa. El mal tarde o temprano nos va a afectar si lo dejamos crecer, como decía Santo Tomás de Aquino sobre el bien común y el orden natural: «El bien particular está ordenado al bien común, como a su fin; por tanto, el bien de un pueblo es más divino que el de un hombre».
Vivimos en el mundo al revés, de anti valores, excesos, egoísmo y conveniencia; en la crisis de un mundo regido por opiniones, gustos e interpretaciones. La crisis universal porque se cree en todo lo sin sentido y estrafalario, persiguiendo a los que creen en lo que ha durado más de dos mil años. Un mundo donde ya no se toma en cuenta ni respeta a quienes hablan con lógica y de lo obvio, pues ahora eso es ofensivo. Un mundo donde una opinión se respeta aunque sea una mentira, la crisis por tener un “Dios a la medida” que es lo mismo que una vida sin Dios.
¡Únete a la campaña! No seamos indiferentes, millones y millones unidos y orando por la misma causa, veremos cosas maravillosas, es bíblico, es Dios, no hay falla.