El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) vuelve a estar inmersa en la polémica por un reciente informe que sugiere que no hay pruebas concluyentes de que los niños expuestos a la pornografía sufran daños.
El informe publicado por UNICEF aborda el modo en que las políticas gubernamentales pueden utilizarse para proteger a los niños de los contenidos nocivos, abusivos y violentos en línea. Su conclusión se basa en un estudio europeo realizado en 19 países de la UE en el que se constató que, en la mayoría de los países, la mayoría de los niños que veían imágenes pornográficas no se sentían «ni molestos ni felices», pero el informe añade que el 39% de los niños españoles se sintieron felices después de ver pornografía.
Quienes combaten la pornografía no están de acuerdo con los datos de UNICEF. «El informe de UNICEF ignora el amplio conjunto de investigaciones que demuestran los daños de la pornografía en los niños. Al ignorar los daños reales que puede tener la pornografía, UNICEF está jugando a la ruleta con la salud y la seguridad de los niños», dijo Lisa Thompson, vicepresidenta y directora del Instituto de Investigación del Centro Nacional sobre Explotación Sexual.
Dicho Instituto proporciona investigación experta para informar sobre las decisiones políticas para acabar con el abuso sexual y la explotación de mujeres y niños, y ha descubierto que la pornografía puede ser un motor central de este abuso.
«La pornografía convencional contiene horribles abusos sexuales, violaciones, incesto y racismo, todo lo cual los niños no deberían consumir», continuó Thompson, y «la evaluación de UNICEF de los impactos de la pornografía en los niños no hace nada para desafiar la narrativa política de que la pornografía es benigna, y como resultado, pone a los niños en peligro».
El estudio EU Kids Online 2020 concluyó que algunos niños y jóvenes «buscan intencionadamente contenidos sexuales» por diversas razones y que ver imágenes sexuales «también puede representar una oportunidad» para dar respuesta a preguntas sobre la pubertad y la identidad sexual. El estudio anima a «ver los matices» que llevan a los niños a buscar y ver contenidos sexuales en línea.
UNICEF afirma que cualquier esfuerzo por bloquear el acceso de los niños a la pornografía en línea podría infringir sus derechos humanos. UNICEF basa esta afirmación en una interpretación extensiva del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
UNICEF también afirma que pedir la verificación de la edad para acceder a la pornografía en línea puede negar a los niños el acceso a lo que denomina «educación sexual vital». Cabe señalar que los críticos acusan a la «educación sexual integral» de ser pornográfica y perjudicial para los niños.
C-Fam/Infocatólica.