Por segunda vez en pocos meses, las invocaciones del Santo Padre a la fraternidad humana y al diálogo entre las religiones han merecido el aplauso y el estímulo de la Masonería, después de que lo hiciera una logia española con ocasión de la firma del documento para la paz de Abu Dabi.
La Masonería vuelve a hablar para elogiar al Papa, esta vez con motivo de la entrega de los Premios a la Fraternidad por parte de Francisco y el imán de la mezquita de Al Azhar, Al Tayyeb, señalando que es la primera vez que se da un paso adelante efectivo en el diálogo interreligioso. “¿Es posible que en el siglo XXI se pueda aspirar al fin a la plena Fraternidad Humana, a la toleranza recíproca de nuestras profundas diferencias?”, se pregunta la logia española en su texto. “Seremos capaces, en todos, de construir este sueño?”. La Masonería Universal contiene el aliento ante el paso de gigante dado por la Humanidad el 4 de febrero, cuando, por primera vez en su Historia, el mundo ha celebrado la Jornada Internacional de la Fraternidad Humana. En estos días oscuros, lo que ha sucedido el 4 de febrero es un rayo de esperanza, la primera piedra para transformar el mundo en un templo del amor fraterno que pueda albergar a todos”.
El Papa y el imán de Al Azhar, hace notar la Masonería, se han vuelto a reunir, “se han llamado mutuamente hermano para escándalo de quienes aún no entienden más que el fundamentalismo y el camino del odio, han querido que el mundo escuche su apelación a la hermandad universal entre todos los seres humanos para construir juntos un futuro común”, sigue el mensaje.
Recordemos las palabras del Papa en esta ocasión, un mensaje que no contiene referencia alguna que pueda ofender los oídos del más escrupuloso maestro masón, hablando de la fraternidad como “la nueva frontera de la humanidad; o somos hermanos o nos destruimos. Es el desafío de nuestro siglo, de nuestro tiempo. Fraternidad significa mano tendida, fraternidad significa resperto. Fraternidad significa escuchar con el corazón abierto”.
Por Carlos Esteban.
Infovaticana.