La situación que se presenta en Puebla ante los casos por covid-19 es difícil; sin embargo, pese al riesgo, el Centro Histórico de la capital del estado se encuentra “abarrotado”, denunció el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa.
Al encabezar la misa dominical en la Basílica Catedral, inmueble que se mantuvo con las medidas sanitarias, Sánchez Espinosa llamó a los fieles católicos a que celebren en casa la Navidad y el Año Nuevo y anunció que la misa de Noche Buena, del 24 de diciembre, se adelanta para las 19:00 horas.
El líder de la grey católica en Puebla expresó su tristeza porque, a pesar de la complicada situación que se vive por la pandemia del covid-19, tanto en la Ciudad de México como en Puebla capital, se presentan altas concentraciones de personas.
Con una persona que no se cuide, puede llevar el coronavirus SARS-CoV-2 a sus familias y los contagios aumentarán, poniendo en riesgo la salud y la vida de sus seres queridos, explicó Sánchez Espinosa.
“Ahora resulta que los contagios se están dando en las familias. Con uno que no se cuide, pues, enferma a los demás de la familia. Ese es el reto como Iglesia porque nosotros cuidamos la vida, queremos la salud. Para nosotros, como hemos venido reflexionando en estos domingos, la vida es sagrada, la vida hay que cuidarla, la salud hay que cuidarla. La vida desde su concepción y hasta su muerte natural es sagrada, por eso, tenemos que seguirnos cuidando”, destacó.
Resaltó que la Iglesia católica está haciendo de su parte para cumplir con las medidas sanitarias y para romper con la cadena de contagios de covid-19 y lamentó que no esté sucediendo lo mismo en otros puntos.
“Nosotros lo estamos haciendo, pero tristemente, vemos que el Centro Histórico de la Ciudad de México, el Centro Histórico de la Ciudad Puebla, están abarrotados, pero como Iglesia tenemos que apreciar la vida y la salud. Entonces, cuidémonos. Nuestros retos son esta semana, el 24 y el 25. A celebrar en casita nuestro nacimiento”, cuestionó el líder de la grey católica.
El arzobispo poblano aseguró que, ante la situación que se está viviendo en México y, particularmente, en Puebla, es fundamental que los fieles católicos pongan de su parte para que, en Navidad y Año Nuevo, no haya visitas ni altas concentraciones de personas.
“La situación está cada vez más difícil. Tenemos que poner lo que está de nuestra parte. Ahora nuestro reto es el próximo jueves y viernes, nuestra Navidad, nuestra Noche Buena y el día de Navidad. Después, nuestro reto será el fin de año y, aunque esté expuesto el santísimo, voy un ratito, separados uno del otro, hago mi visita, mi acción de gracias y a casita”,
apuntó.
Con información de Milenio/Jaime Zambrano
