Sacerdotes españoles acusados ​​de abuso infantil en EU, fueron regresados a su país pero sin ser sanciondos

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Manuel Fernández es un sacerdote español que fue ordenado en 1959 y terminó en Nueva Jersey en 1979. Pero en 2002 fue acusado de abuso infantil, que ocurrió en la década de 1980, y fue destituido de su cargo.

Sin embargo, Fernández luego regresó a su diócesis en la ciudad de Ourense, en el noroeste de España. A partir de ahí siguió siendo sacerdote, viviendo tranquilamente, sin que nadie de la comunidad supiera de su pasado. La oficina del obispo no tomó ninguna medida especial, alegando que no había ningún registro sobre sus antecedentes al otro lado del océano.

Hasta ahora, este caso era totalmente desconocido en España. Pero no es el único que ha salido a la luz recientemente. Ha habido varios casos de sacerdotes españoles que han sido acusados ​​de pedofilia en los Estados Unidos, sin divulgación pública. EL PAÍS descubrió por primera vez un caso como este en 2018, relativo a Francisco Carreras. En 1984 fue enviado a Salamanca desde Miami con una advertencia sobre lo peligroso que era. Sin embargo, en el transcurso de tres décadas, pudo cometer docenas de abusos en toda la provincia española, moviéndose de pueblo en pueblo.

En algunos casos, estos clérigos regresaron a España a la fuga y lograron evadir la detección. Este diario ha identificado un total de 15 sacerdotes españoles con claras acusaciones o condenas, junto a otros cinco imputados (que no han sido incluidos en este artículo) cuyas investigaciones no han sido concluyentes.

La información ha sido recopilada a partir de datos difundidos por medios estadounidenses y de la propia Iglesia Católica.

Del mismo modo, hay clérigos de Estados Unidos y otros países -todos acusados ​​de abusos en EE.UU.- que, en algún momento, han acabado en suelo español. EL PAÍS ha registrado seis casos de este tipo, añadiendo piezas al rompecabezas de la Iglesia católica en España, que apenas ha colaborado con los investigadores para ayudar a conocer la verdad sobre estos maltratadores.

El reciente caso de Bolivia —donde en las últimas semanas seis sacerdotes jesuitas españoles han sido acusados ​​de abusos— fue resultado de una información desvelada por EL PAÍS, luego de que este periódico tuviera acceso al diario de un sacerdote pedófilo fallecido, Alfonso Pedrajas . . Las notas del perpetrador indican que, muchas veces, el traslado de un sacerdote a otro país fue precisamente por acusaciones de abuso en España.

Sin embargo, en varios casos en Estados Unidos, este fenómeno también se ha producido a la inversa, con sacerdotes escapando a España tras ser acusados, llegando al país mediterráneo con un expediente limpio. En teoría, las diócesis católicas de partida deberían informar a las diócesis de destino de lo ocurrido. Pero tampoco está claro si la Iglesia no sabía acerca de las acusaciones en los Estados Unidos contra el clero, o si la Iglesia sabía y optó por no hacer nada. De todas formas, en España se ha enfriado la pista de varios sacerdotes, al no poder determinar sus diócesis de origen para pedir explicaciones. Por supuesto, la Iglesia católica española ciertamente tiene esta información y podría divulgarla si quisiera.

El caso más antiguo involucra al sacerdote jesuita Segundo Llorente. Nacido en 1906 en un pueblo de la provincia española de León, fue destinado a una comunidad indígena de Alaska. Incluso se convirtió en un político local en la legislatura estatal. Y, a pesar de todos los delitos que cometió, su imagen en España sigue siendo impecable. Entre los jesuitas, es una figura legendaria: su entrada en Wikipedia enumera todos sus logros, sin una sola mención de las acusaciones de abuso.

Hay muchos más casos de hace décadas de sacerdotes que salieron de España desde Estados Unidos como jóvenes misioneros. Muchos vivieron el resto de sus vidas en Norteamérica, pero otros optaron por regresar a España como vía de escape. En varios de estos casos, el misterio continúa, dado el silencio de las diócesis. El sacerdote Jesús García, por ejemplo, fue acusado de abusos en 1995, en Texas. Posteriormente regresó a España, donde recaló en la diócesis de Alcalá de Henares, en Madrid, para ser destinado a distintas parroquias. La oficina del obispo se ha negado a dar detalles sobre el caso y solo ha respondido a EL PAÍS diciendo que ha informado al Defensor del Pueblo ya la Conferencia Episcopal Española sobre las acusaciones.

Un caso que ilustra el otro fenómeno —el de sacerdotes no españoles acusados ​​en Estados Unidos que luego acaban en España— es el del sacerdote peruano Edgardo Arrunategui Jiménez. Tras ser acusado en California, abandonó EE.UU., cubrió sus huellas y consiguió instalarse en parroquias de Madrid entre 2004 y 2008, cambiando en ocasiones de nombre. La Arquidiócesis Católica Romana de Madrid confirma ahora que efectivamente estuvo en la zona, pero afirma que llegó desde Perú —su diócesis de origen— sin informes negativos, al tiempo que afirma que no hay denuncias contra él en España. Actualmente se desconoce su paradero.

Todos estos casos, junto con muchos otros, se ocultaron al público, se perdieron entre las miles de acusaciones que surgieron desde 2002, cuando The Boston Globe expuso el escándalo de abuso sexual dentro de la Arquidiócesis de Boston. Desde entonces, numerosos medios de comunicación y organizaciones de víctimas han publicado enormes cantidades de información sobre casos ocultos. En los últimos años, se han creado bases de datos, como la de BishopAccountability.org , que incluye perfiles de todos los obispos, sacerdotes, monjas, hermanos y seminaristas estadounidenses acusados ​​de abuso sexual infantil.

En España, este trabajo lo lleva a cabo EL PAÍS desde 2018, ante la negativa de la Iglesia católica a revelar lo que sabe y hacer pública la información. La base de datos que mantiene este diario —inaugurada en abril de 2021, la única existente en España— reúne todos los casos que han salido a la luz, a través de los medios de comunicación y sentencias judiciales, así como los que han sido admitidos directamente por la Iglesia. Actualmente, la base de datos cuenta con 959 personas acusadas, que abusaron de un total de al menos 1.922 víctimas. Cuando este periódico inició su labor, solo se conocían 34 casos.

Hace un año, el Defensor del Pueblo, por encargo del Congreso de los Diputados de España, inició una investigación sobre la pederastia dentro de la Iglesia Católica de España. Sin embargo, este informe aún llevará tiempo, no hay fecha límite. Asimismo, la Conferencia Episcopal Española encargó una investigación interna a un despacho de abogados —dirigido por un miembro del Opus Dei— que presentó su informe en octubre. Aunque la Conferencia Episcopal asegura al público que las diócesis españolas han proporcionado toda la información que tienen, queda por ver si su grado de transparencia estará a la altura de los Estados Unidos.

En E.U., a diferencia de España, la Iglesia católica ya emprendió una gran operación de transparencia en 2004 que provocó una avalancha de datos. La Conferencia de Obispos Católicos de E.U. ordenó una investigación dirigida por un consejo de laicos, que encargó un estudio estadístico al Colegio de Justicia Criminal John Jay de la Universidad de la Ciudad de Nueva York. Los datos, del período 1950-2002, fueron proporcionados por las propias diócesis. La Conferencia también hizo públicos los archivos: las diócesis debían difundir listas con nombres y apellidos. El resultado final fue que 4.392 sacerdotes radicados en EE. UU. habían sido acusados ​​en el pasado, el 4% del clero. Habían abusado de un total de al menos 10.667 víctimas. Solo el 5% de estos casos de abuso habían sido llevados a los tribunales.

Esto era solo el principio. Las investigaciones y denuncias periodísticas continuaron sacando a la luz nombres, lo que permitió cruzar datos y seguir la pista de sacerdotes acusados ​​de abuso infantil que cambiaron de ubicación al ser descubiertos. Entre ellos, también había españoles, así como sacerdotes acusados ​​​​no españoles que partieron hacia España.

A continuación se enumeran 21 de los clérigos acusados ​​o condenados, según los registros estadounidenses: 15 españoles y seis extranjeros, todos ellos de paso por España en algún momento. Se ha solicitado información a todas las diócesis de América del Norte involucradas. Hasta ahora, muy pocos han respondido.

julian sanz

Sacerdote español de la diócesis de Tucson, Arizona, fue condenado en 2003 a cinco años de prisión por abusar de dos menores. En 2010, fue expulsado del clero.

Nacido en 1949, Julián Sanz fue ordenado sacerdote en 1977. Tres años más tarde llegó a la Diócesis de Tucson, Arizona. En 2002, un hombre acusó a Sanz de abusar sexualmente de él . Tras esa demanda, aproximadamente un año después, fue acusado de haber abusado de otra menor, allá por 1982.

Sanz fue finalmente detenido en 2003. Admitió las acusaciones y fue condenado a cinco años de prisión. En 2010, fue retirado del sacerdocio. Aparece en la lista de sacerdotes de la Diócesis de Tucson de 2019 que han sido acusados ​​de abuso de manera creíble .

Segundo Llorente

Prestigioso sacerdote jesuita, pasó 40 años ministrando en lugares remotos de Alaska. Fue elegido para la legislatura estatal. Murió en 1989. Para 2004, comenzaron a levantarse acusaciones de abuso infantil en su contra.

Llorente fue un sacerdote jesuita, filósofo y escritor español. A la edad de 13 años ingresó al seminario en León, España. Llegó a Alaska en 1935, donde pasó cuatro décadas ministrando en pueblos remotos de todo el territorio, mientras aprendía lenguas indígenas. Incluso fue elegido como representante de la legislatura estatal, convirtiéndose en el primer sacerdote católico en formar parte de una legislatura norteamericana, y se le considera cofundador del estado de Alaska, que fue admitido como el estado número 49 en 1959. .

Llorente falleció en 1989 y fue enterrado en un cementerio indio en De Smet, Idaho, donde normalmente solo los indios nativos americanos pueden ser enterrados si lo solicitan. También fue nombrado hijo predilecto de su León natal. Sin embargo, su imagen comenzó a oscurecerse en 2004, cuando fue acusado de actos de abuso sexual ocurridos entre 1956 y 1957 . Según las denuncias, Llorente invitó a un niño de seis o siete años a su casa en más de cuatro ocasiones, después de la clase de catecismo. En 2005, otra víctima acusó al sacerdote. Ambas víctimas recibieron una compensación económica de la Iglesia Católica, aunque aún están pendientes dos demandas. Llorente está incluido en una lista de sacerdotes jesuitas con acusaciones creíbles , publicada por Jesuits West Province en 2018.

jose mena

Fue acusado de tres cargos de abuso infantil en Florida: su diócesis pagó $150,000 en daños. Regresó a España en 2005, con 76 años, pero se desconoce dónde fue destinado posteriormente.

Nacido en 1929, Mena fue ordenado sacerdote en 1961. Se desconoce si tuvo lugar en España o en Estados Unidos. En 1965, mientras ministraba en Florida, fue acusado de abusar sexualmente de un niño en repetidas ocasiones. La demanda se presentó en 2005 y la Diócesis de St. Augustine llegó a un acuerdo con la víctima por una suma de $150,000. En 2008, se presentó otra demanda en su contra. Según la Red de Sobrevivientes de Maltratados por Sacerdotes (SNAP) , “Mena acarició, sodomizó y obligó reiteradamente al niño a practicarle sexo oral” durante la década de 1970. En 2009, otra víctima lo demandó.

Tras las primeras acusaciones en 2005, Meta fue destituido de su cargo. Posteriormente regresó a España, aunque se desconoce dónde fue destinado posteriormente, si se tomaron medidas contra él o si se le permitió mantener contacto con menores.

Juan Peris

En realidad, su nombre de pila es Juan, o Vicente, según el registro que se consulte. Peris era un sacerdote español destinado en el estado de Nuevo México, que fue acusado de abusar de un menor en 1995. Luego regresó a España, aunque no está claro dónde vivió exactamente el resto de sus años.

Aunque figura como “John” en los registros de EE. UU., su nombre de pila es en realidad Juan, aunque a veces aparece como Vicente. Fue ordenado en 1934, ya sea en España o en los Estados Unidos.

Fue párroco en la ciudad de Anton Chico, Nuevo México. También sirvió como misionero en pequeños pueblos de todo el estado. En 1995, un hombre de 51 años acusó a Peris de haber abusado sexualmente de él durante varios meses cuando era un niño, allá por 1957. Según informes de medios locales, el demandante tenía entonces 13 años. vivía en la parroquia Antón Chico, para poder tomar el autobús escolar, que pasaba lejos de su ciudad natal. Peris regresó a un distrito desconocido en España después de la denuncia; a estas alturas, ya habría fallecido. Aparece en una lista de sacerdotes acusados, publicada por la Arquidiócesis de Santa Fe.MÁS INFORMACIÓN

Andrés Roy

Andrew Roy es en realidad un español: Andrés Rodríguez. En 2003, un residente de Richmond, Virginia, presentó una demanda contra la diócesis estatal por $5 millones , que finalmente fue desestimada. Afirmó que los responsables sabían que Roy, un sacerdote de la ciudad de Hopewell, había abusado de él entre 1962 y 1966 y no hizo nada al respecto. En ese momento, la víctima era un monaguillo de 10 años. El demandante afirmó que el escándalo de abuso sexual en la iglesia que estalló en Boston en 2002 le trajo recuerdos del abuso que enfrentó a manos de Rodríguez, que tuvo lugar tanto en la parroquia como en la escuela primaria de la ciudad.

Los datos disponibles de Rodríguez indican que fue ordenado en 1936, en Los Ángeles. Llegó a Virginia en 1956 y siguió ejerciendo el ministerio hasta su jubilación en 1981. En 2004, tras ser acusado, ya vivía en España, pero se desconocía su lugar exacto de residencia. Cuando fue acusado, Rodríguez tenía 92 años y padecía Alzheimer, según la Diócesis de Richmond, Virginia.

gabriel salinas

Uno de los casos más antiguos, Salinas fue el primer agustino en llegar a Estados Unidos. Nacido en 1892, fue destituido y reasignado luego de ser acusado de abusar sexualmente de un menor en California, a fines de la década de 1960. Esta información salió a la luz en 2004, mucho después de su muerte.

Salinas nació en España en 1892 y se ordenó en 1909. Fue el primer agustino en ir a los Estados Unidos. Durante la mayor parte de sus 55 años de sacerdocio, fue miembro de la Orden de Agustinos Recoletos en los Estados Unidos. Pasó tres décadas en Omaha, Nebraska.

En 1957, Salinas fue trasladado a Atwater, California, donde fue acusado de abusar sexualmente de una menor entre 1958 y 1960 , según reveló un informe de 2004 de la Arquidiócesis de Los Ángeles. El informe explica que una vez fue destituido de su cargo y reasignado a una parroquia rural durante tres años. SNAP le pidió al arzobispo que divulgara la información sobre Salinas a los católicos de Nebraska : “Este depredador pasó más de 30 años en Nebraska, por lo que es una tontería pensar que agredió a niños en California, pero nunca en Omaha”. Salinas murió en 1972, luego de ser atropellado por un automóvil en Los Ángeles. Aparece en una lista de sacerdotes acusados ​​de abuso, publicada por la Arquidiócesis de Los Ángeles.

José I. Ugarte

Nacido en España y ordenado en Los Ángeles, está acusado de drogar y violar a un niño en un hotel de Ensenada, California, a fines de la década de 1970 y de abusar de un niño de 17 años en 1983. Fue expulsado de Estados Unidos en 1995 y enviado a Vitoria-Gasteiz, España, bajo la supervisión del obispo de la Diócesis Católica Romana de Vitoria.

Nacido en Delika, España, en 1941, Ugarte fue ordenado en la Arquidiócesis de Los Ángeles en 1971. Está acusado de drogar y violar a una niña en un hotel de Ensenada , California, a fines de la década de 1970 y de abusar sexualmente de una adolescente de 17 años. Y de niño de un año en 1983. Estos crímenes salieron a la luz en 2013, cuando se abrieron los archivos del arzobispado y salió a la superficie documentación oculta. En el primer caso, el niño terminó en estado de shock. El sacerdote dijo que estaba demasiado drogado para recordar lo que pasó, las autoridades no tomaron más medidas. Una de las víctimas posteriores relató que sufrieron abusos en 15 ocasiones y, después de cada una de las agresiones, Ugarte absolvió a la víctima de sus pecados.

La Arquidiócesis de Los Ángeles realizó una investigación y, en 1995, el Arzobispo Mahony ordenó a Ugarte regresar a España, a la Diócesis de Vitoria, bajo la supervisión del obispo local. A Ugarte —prohibido oficiar misas públicas— se le ordenó fijar allí su residencia y buscar un trabajo regular. También se le prohibió regresar a los Estados Unidos por un período de siete años sin el consentimiento expreso de la Iglesia.

Emilio Roure

Ordenado sacerdote en Barcelona en 1920, viajó a Estados Unidos en 1931. Allí pasó por las diócesis de Los Ángeles, Tucson y El Paso. Murió en 1964. En 2019, la Diócesis de El Paso, Texas y la Diócesis de Las Cruces, Nuevo México, lo acusaron de abuso.

Rourre fue ordenado en Barcelona, ​​en 1920. El Directorio Católico Oficial indica que pudo haber llegado a Estados Unidos en 1931. Trabajó primero en Los Ángeles, luego en Tucson, Arizona y Gallup, Nuevo México. En 1945, fue puesto a cargo de varias parroquias de la Diócesis de El Paso, Texas. En 1965, durante un viaje a Barcelona para visitar a su hermano, muere. Desde 2019, figura públicamente como un abusador que cometió actos de pedofilia mientras ministraba bajo la jurisdicción de las diócesis de El Paso y Las Cruces.

jesus garcia

Acusado de abusos en E.U. en 1995, regresó a España, a la diócesis de Alcalá de Henares, en Madrid. La denuncia finalmente fue desestimada, aunque varias diócesis norteamericanas consideran creíbles las acusaciones. Este despacho episcopal se ha negado a dar detalles sobre el caso de García, limitándose a responder a EL PAÍS que ha informado al Defensor del Pueblo ya la Conferencia Episcopal Española (CEC) al respecto.

Nacido en Burgos, España, en 1957, García estudió en el seminario de la ciudad hasta el penúltimo año, cuando se mudó a Estados Unidos, según confirmó la Arquidiócesis de Burgos, que también señala que nunca más se supo de este sacerdote.

Según información de la Iglesia Católica en los Estados Unidos, García fue ordenado en Burgos en 1984. A partir de 1983 comenzó a ministrar bajo la jurisdicción de la Diócesis de Corpus Christi, Texas. Allí fue acusado de drogar y violar a cuatro niños y un hombre entre 1991 y 1994. Por esa época viajó a España —su nombre consta en los registros de la Diócesis de Alcalá de Henares—. Sin embargo, en 1996 regresó voluntariamente a Texas y fue arrestado. Cuando terminó su juicio en 1997, se desestimaron los cargos, pero en 2019, la Diócesis de Corpus Christi lo incluyó en su lista pública de sacerdotes que habían sido acusados ​​de manera creíble de cometer abuso sexual. La institución señala que fue transferido en 2000 y expulsado en 2011.

García demandó por estar incluido en el registro de maltratadores. Sin embargo, consultada por EL PAÍS, la Diócesis de Corpus Christi reafirma la información que hizo pública allá por 2019. Sin embargo, el despacho episcopal no ha aclarado si informó o no a la Diócesis de Alcalá de Henares o a la Iglesia española sobre las acusaciones. presentado contra García en los Estados Unidos.

Tras el juicio, García regresó definitivamente a España, a la Diócesis de Alcalá de Henares en Madrid. EL PAÍS ha preguntado a la dirección de la diócesis si han recibido información sobre las acusaciones contra este sacerdote en Estados Unidos —si se han tomado medidas contra él, si se le permite seguir ejerciendo su ministerio, si se le permite tener contacto con menores de edad y si alguna vez ha sido objeto de alguna denuncia penal en España. La Diócesis de Alcalá de Henares sólo ha respondido por escrito indicando que “el Defensor del Pueblo y la CEE ya han sido informados sobre este caso”. El paradero actual de García no ha sido revelado.

manuel fernandez

Sacerdote de la diócesis de Ourense, en el noroeste de España, que se mudó a Estados Unidos, fue acusado de abuso sexual en 2002 y se retiró. Luego regresó a la región española de Galicia, donde continuó siendo sacerdote. La Diócesis de Ourense asegura a EL PAÍS que, cuando llegó, no había constancia de nada de esto.

Nacido en 1935, Fernández fue ordenado sacerdote en 1959, en la diócesis de Ourense. En los registros oficiales aparece nuevamente en 1979, en New Jersey. Pasó por varias parroquias de la Diócesis de Trenton; en 2019, fue incluido en su lista pública de sacerdotes que habían sido acusados ​​de múltiples casos de abuso . Su caso salió a la luz por primera vez en 2002, después de que una mujer lo acusara de hechos ocurridos en 1982. Posteriormente fue destituido de su cargo, pero luego regresó a Ourense y siguió siendo sacerdote.

Al ser contactada por EL PAÍS, la diócesis de Ourense asegura que, cuando llegó, “no había constancia de ninguna [acusación] ni de ningún [proceso judicial] abierto en Estados Unidos”. En cualquier caso, la institución señala que ya estaba jubilado cuando vivía en España y que nunca hubo denuncias contra él en Ourense.

Allá por 2005, un diario estadounidense localizó al sacerdote en Galicia y habló con él. Fernández dijo a los periodistas que regresó a España para vivir su retiro y negó haber sido acusado en Trenton, Nueva Jersey. Luis Quinteiro, el entonces obispo de Ourense, “se negó a responder preguntas escritas sobre monseñor Fernández”, según el periódico. Le respondió al periodista: “No sé qué derecho tiene usted para enviarme estas preguntas”. Fernández murió en 2006, a la edad de 71 años.

emilio garcia

Fue denunciado en 2000 por violar a una menor en la década de 1960. Posteriormente regresó a España, aunque nunca se ha revelado dónde se instaló exactamente.

Emilio García —ordenado sacerdote en 1957— fue acusado de violar a una menor durante la década de 1960 en Florida, en la Diócesis de Orlando. La víctima comenzó a tener recuerdos recurrentes de lo sucedido en 2002, luego de que se expusiera el abuso en la Iglesia de Boston. Según dijo a medios locales, García comenzó a abusar de ella cuando tenía 14 años. Dos semanas después de cumplir 16 años, García la invitó a su oficina a recoger un regalo de cumpleaños y la violó. García admitió las acusaciones. Fue destituido de su cargo y regresó a España, aunque nunca se ha revelado el destino exacto. Falleció en 2020, según la Oficina del Fiscal General de Florida.

José Rossell

Sacerdote de la Sagrada Familia, llegó a los Estados Unidos en 1947 y enfrentó numerosas acusaciones de abuso. Regresó a España en 1972, donde falleció.

Este sacerdote catalán —nacido en Bagà en 1907— fue ordenado sacerdote en 1930. Llegó a Estados Unidos en 1947. Durante los primeros tres años de su estancia, fue trasladado con frecuencia entre parroquias y estados. A lo largo de sus años como sacerdote, fue demandado varias veces por abusar sexualmente de niños. Recientemente, en 2010, fue acusado de haber abusado de dos niñas en la clase de catecismo .

Toda la información sobre los actos de abuso sexual de Rossell recién salió a la luz en 2007, cuando la Diócesis de San Diego hizo público su expediente. Para entonces, llevaba muerto mucho tiempo, desde 1982. Había regresado a España 10 años antes de morir. Desde 2007, ha estado en la lista de sacerdotes de la Diócesis de San Diego que enfrentan acusaciones creíbles de abuso.

Gregorio Sierra Sheridan

Agustino, fue demandado por más de nueve víctimas por abuso sexual que infligió durante la década de 1960, en el estado de Kansas. Regresó a España en 1983, con una carta de recomendación en la mano.

Sierra nació en Zaragoza, España, en 1911. Fue ordenado sacerdote con la Orden de Agustinos Recoletos en 1935, año en que comenzó su función como pastor asociado en el estado de Kansas. Pasó por varios estados antes de instalarse en California, donde fue acusado por primera vez por una mujer, quien aseguraba que Sierra había abusado de ella en 1969, cuando tenía ocho años. En 2019, otras tres mujeres lo acusaron de actos de abuso sexual que les infligió en la década de 1960. Y, en 2020, cinco hombres y mujeres presentaron otra demanda .

Una de las víctimas masculinas afirmó que Sierra lo había violado cuando tenía alrededor de 12 años. Sin embargo, Sierra regresó a España en 1983 con una carta de recomendación. Murió en 1991, en Zaragoza. Está en una lista de miembros creíblemente acusados ​​de la Diócesis de San Diego . Esta lista fue publicada en 2007 como parte del proceso de quiebra de la institución religiosa, luego de que se hicieran pagos a las víctimas que demandaron.

carmelo garcia

Miembro de la orden franciscana, el español fue enviado a Santa Bárbara, California. Fue acusado de actos de pederastia entre 1988 y 1991. Dejó la orden en 1989 y regresó a España, donde desde entonces la pista se ha enfriado.

Miembro de la orden franciscana, Carmelo García fue enviado a Santa Bárbara, California. Cometió abusos entre 1988 y 1991, según una lista de clérigos acusados ​​creíblemente, publicada por la congregación local en 2019 . El documento indica que dejó la orden en 1989 y volvió a España, pero después apenas hay datos sobre él. La orden franciscana admite que supo de sus abusos allá por 1998, aunque la información recién se hizo pública en 2019.

Francisco Carreras, el sacerdote acusado de abusos en Salamanca, en una imagen de los años noventa.

francisco carreras

Publicado en 2018, el caso Carreras fue el primero descubierto por EL PAÍS. También es uno de los más terribles. Despachado a Miami desde Salamanca, fue denunciado por malos tratos y devuelto a España. Aunque los estadounidenses advirtieron a la Diócesis de Salamanca sobre sus crímenes, posteriormente fue destinado a pueblos de toda la provincia durante un período de tres décadas, donde cometió decenas de agresiones sexuales más.

El caso de Francisco Carreras fue el primero de los sacerdotes españoles acusados ​​en Estados Unidos y reubicados en España que descubrió EL PAÍS. La historia fue publicada entre 2018 y 2019, al inicio de la investigación por abusos dentro de la Iglesia Católica de España. Carreras —ordenado en Salamanca en 1973— se mudó a Miami en 1975, donde fue acusado de abuso sexual. La Arquidiócesis de Miami lo envió de regreso a España a su diócesis de origen —la de Salamanca— y advirtió a los españoles sobre las acusaciones formuladas en su contra, según confirma este diario. Sin embargo, Carreras estuvo adscrito a localidades de la provincia de Salamanca entre 1981 y 2004, bajo el mandato de tres obispos diferentes. Fue acusado de abusar de decenas de menores. La Diócesis de Salamanca nunca ha dado una explicación. Carreras vivía en una ermita y murió durante la pandemia.

Jeremías Michael Spillane

Miembro de los Legionarios de Cristo, estudió en España entre finales de los 80 y los 90, antes de regresar a los Estados Unidos. Allí fue condenado a dos años de arresto domiciliario tras intentar coquetear con una menor por internet. Fue expulsado de la orden en 1998.

Spillane, ciudadano estadounidense y miembro de los Legionarios de Cristo, estudiaba en escuelas administradas por la orden religiosa en España a fines de los años 80 y 90, según informes de medios estadounidenses . Nacido en 1954, fue ordenado sacerdote en 1986 en la diócesis de Venice, Florida. Trabajó en diferentes países como maestro y director de escuelas católicas. En 1997 fue condenado a dos años de arresto domiciliario y dos años de libertad condicional por intentar coquetear por internet con una menor, que resultó ser un policía encubierto.

Spillane confesó, admitiendo también abusos previos en México. Spillane fue destituido por la Diócesis de Venecia en 1998. La sentencia del caso explica que Spillane había alquilado una habitación donde planeaba llevar a la niña con la intención de violarla. Está en una lista de miembros de los Legionarios de Cristo con acusaciones comprobadas de abuso sexual.

Jorge A. Costigan

Este sacerdote estadounidense fue destituido por la Diócesis de Paterson, Nueva Jersey en 1994 y enviado a un convento. Posteriormente, pasó un tiempo en un monasterio en el pueblo de Puentenansa, en el norte de España, entre 2002 y 2004.

En 1993, este sacerdote estadounidense, también conocido como “el hermano Daniel Eliseo”, fue acusado de abusar de una niña en la década de 1960 en la diócesis de Paterson, Nueva Jersey. Posteriormente fue destituido como sacerdote y enviado a un convento. Sin embargo, luego fue reubicado en España y terminó en un monasterio en el pueblo de Puentenansa, en el norte, donde vivió entre 2002 y 2004. Al parecer, eligió este lugar porque afirmó que, allá por 1991, fue donde había experimentado una curación milagrosa del cáncer.

A pesar de haber sido destituido y de tener prohibido vestirse como sacerdote y ministrar, luego se movió por varios lugares de los Estados Unidos, haciéndose pasar por sacerdote. En 2019, fue incluido en una lista de clérigos acusados ​​de pedofilia, elaborada por la Diócesis de Paterson .

Edgardo Arrunátegui Jiménez

Sacerdote peruano acusado de abuso sexual en California. Cuando el caso salió a la luz en 2004, huyó de Estados Unidos. Un diario lo localizó en Madrid, donde permaneció entre 2004 y 2008, adscrito a parroquias de la capital de España y sus alrededores. Luego, desapareció.

Este sacerdote peruano sirvió en la Diócesis de Orange, California, desde 1987 hasta 1990. La diócesis explicó que la razón de su repentina partida fue que había regresado a Perú como misionero. Sin embargo, más tarde regresó a la Diócesis de Fresno, California, entre 1997 y 2004. Fue entonces, en 2004, después de que la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos ordenara a todas las diócesis que hicieran públicos los casos de abuso ocultos, que la Diócesis de Orange reveló que Arrunategui en realidad había sido despedido en 1990, basado en acusaciones de abuso sexual. Después de que se reveló todo esto, huyó del país.

Sin embargo, en 2009, un diario local supo que el cura había pasado por Madrid , donde pasó al menos cinco años en diferentes parroquias, cambiando en ocasiones de nombre. El OC Weekly pidió una explicación a la Archidiócesis de Madrid, pero no recibió respuesta. Arrunategui luego regresó a Perú, donde fue localizado por otro periodista.

La Archidiócesis de Madrid —al ser consultada por EL PAÍS— confirma que Arrunátegui figura en sus registros como estudiante de presbítero, que vino a estudiar teología a la Universidad Eclesiástica San Dámaso de la capital española. Según la oficina del arzobispado, provenía de la diócesis peruana de Chimbote, que no comunicó ningún historial de abuso ni mención alguna de su paso por Estados Unidos.

La Archidiócesis de Madrid también señala que, como estudiante, a Arrunátegui no se le asignaron funciones pastorales. La autoridad religiosa asegura que su estancia aparentemente estuvo limitada desde 2004 hasta 2006 y que nunca se presentaron denuncias contra él en la capital española. La Diócesis de Orange, por su parte, informa a EL PAÍS que el peruano era un sacerdote externo, negándose a dar más detalles.

Michael J. Barrett

Sacerdote estadounidense perteneciente al Opus Dei, fue demandado en 2021 por abusos cometidos en la década de 1970, cuando aún era laico. Después de su ordenación en 1985, pasó algún tiempo en España, pero se desconoce dónde exactamente, ni por cuánto tiempo.

Michael J. Barrett fue denunciado en 2021, acusado de abusar de una menor entre 1974 y 1978, cuando aún era laico dentro del Opus Dei. Barrett fue ordenado en Roma en 1985 y luego se mudó a Madrid, confirma un portavoz del Opus Dei en España. Sin embargo, la organización no puede especificar dónde se quedó ni cuánto tiempo estuvo en el país, explicando que es común que los nuevos sacerdotes hagan un período de prácticas en España antes de ser enviados a una misión.

Barrett se mudó luego a Houston, luego a Los Ángeles y, en 2016, a Nueva York, donde fue demandado en 2021. El Opus Dei desconoce el resultado de ese proceso legal. La archidiócesis de Nueva York no ha respondido a la petición de comentarios de EL PAÍS. En cualquier caso, el Opus Dei asegura que no hay denuncias contra Barrett por abusos en España.

Jorge Washington Córdova Hernández

El sacerdote ecuatoriano está acusado de hasta 12 casos de abuso sexual en Estados Unidos, donde formó un grupo con rasgos de secta. Huyó del país en 2005 cuando salieron a la luz las acusaciones. Fue localizado y arrestado en Guadarrama, Madrid, en 2007. Luego, el rastro se enfría.

Este sacerdote ecuatoriano fue un predicador del movimiento de Renovación Carismática Católica. Incluso grabó canciones religiosas. Anteriormente asignado a la Diócesis de Tucson, Arizona, Córdova Hernández fue acusado de abusar de 10 menores en 2005 en Yuma, Arizona y dos más en Maricopa, Arizona, entre 1988 y 1991. Había formado una especie de secta integrada por mujeres jóvenes y niñas, llamadas Vírgenes Consagradas, las hacía vestir de azul y les hacía ceremonias de iniciación, donde les cortaba mechones del cabello. En 2019, fue incluido en la lista de abusadores acusados ​​creíblemente de la Diócesis de Tucson .

Tras las denuncias, huyó de EE. UU. en 2005. Tras una búsqueda de dos años, fue detenido en 2007, en España, a la edad de 51 años. La Policía Nacional de España lo localizó en Guadarrama, en la provincia de Madrid. cuando impartía un seminario en el Conjunto Cultural Residencial Fray Luis de León, propiedad de los agustinos. Sin embargo, según la prensa estadounidense, la extradición finalmente nunca se llevó a cabo. La Archidiócesis de Madrid afirma que no aparece en sus registros y que pudo viajar a España por su cuenta, sin el permiso de su diócesis de origen en Ecuador. Nada se sabe de sus actividades posteriores, salvo que se dio de alta como autónomo en Torrejón de Ardoz, Madrid, en el negocio de transporte de mercancías. Murió en 2018.

Patricio O’Leary

O’Leary es un sacerdote irlandés ordenado en Oviedo, en el norte de España, que luego se mudó a Estados Unidos. Acusado de malos tratos en 1992, volvió a mudarse a Oviedo, donde las autoridades le perdieron el rastro.

O’Leary es un sacerdote de origen irlandés, aunque fue ordenado en Oviedo, en el norte de España, según datos de medios estadounidenses. Fue expulsado de su parroquia en 1992 , a la edad de 33 años, porque los superiores consideraron que tenía “un patrón de conducta inapropiada” que lo convertía en un riesgo potencial para los niños. Según versiones de prensa, luego regresó a Oviedo. La Archidiócesis de Oviedo explica que “este sacerdote salió [del principado de Asturias] en 1987, pidió la excardinación [un traslado] de la diócesis… [este traslado] se concedió en 1989”. La institución religiosa asegura a EL PAÍS que no tiene documentos sobre su paradero posterior a 1987 y que no existen denuncias en su contra de ningún tipo. Aún se desconoce su ubicación actual.

Por ÍÑIGO DOMÍNGUEZ ANDREA GARCÍA BAROJA.

MADRID, ESPAÑA.

DOMINGO 28 DE MAYO DE 2023.

EL PAÍS.

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By ACN
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