* Cuba tiene más de 24.000 médicos trabajando en 56 países
Los líderes caribeños respondieron a una amenaza emitida por el gobierno de Estados Unidos de cancelar las visas para cualquiera que trabaje o apoye las instalaciones médicas cubanas, citando denuncias de trabajo forzado y afirmando que estas misiones “enriquecen al régimen cubano”.
Las misiones médicas cubanas, que proporcionan médicos, enfermeras y otro personal médico, así como instalaciones médicas, son fundamentales para los sistemas de atención de salud en el Caribe.
¿Cómo han respondido entonces las naciones del Caribe a esta amenaza y qué significaría para la atención médica allí?
¿Por qué el gobierno de Estados Unidos ataca el programa médico de Cuba?
El acoso a las misiones médicas cubanas no es nuevo para la administración del presidente estadounidense Donald Trump. Durante su primer mandato, de 2017 a 2021, impuso sanciones de visado al programa médico global de Cuba. Su gobierno afirmó que estas misiones constituían «trata de personas» porque, según él, los médicos cubanos están mal pagados.
En esta ocasión, el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, ha anunciado restricciones a las visas para funcionarios gubernamentales en Cuba y cualquier otra persona, a nivel mundial, que Estados Unidos considere cómplice de los programas médicos cubanos en el extranjero. El Departamento de Estado indicó que las restricciones se extenderían a funcionarios actuales y anteriores, así como a sus familiares directos.
Rubio calificó el programa médico cubano como una forma de “trabajo forzado” y el gobierno advirtió que las naciones caribeñas que participan en estos programas podrían enfrentar restricciones de visas, así como posibles repercusiones comerciales.
Sin embargo, no se ha aportado ninguna prueba concreta que respalde estas afirmaciones.

Estados Unidos alega que el gobierno cubano explota a sus profesionales médicos al retener gran parte de sus salarios y restringir sus libertades. Si bien algunos médicos cubanos han desertado y criticado las condiciones del programa, muchos otros afirman participar voluntariamente.
Tamarys Bahamonde, economista del Centro de Estudios Latinoamericanos y Latinos, con sede en Estados Unidos, dijo que este tema es “complejo” y debería centrar las voces de los propios médicos.
“Independientemente de si los médicos cubanos califican como trabajadores forzados, sabemos que no negocian sus propios contratos ni condiciones de trabajo”, dijo.
“Cuba retiene una parte importante de sus salarios, y hay testimonios de médicos que confirman restricciones de movimiento, confiscación de pasaportes por parte de las autoridades cubanas en los países de acogida y limitaciones para traer a sus familias”.
Al mismo tiempo, Bahamonde reiteró el papel crucial que desempeñan los profesionales médicos cubanos, especialmente cuando se trata de brindar servicios de salud a comunidades marginadas.
“Durante el tiempo que trabajé para una embajada extranjera en La Habana, vi de primera mano cuán agradecidos están muchos países con los médicos cubanos y los beneficios que aportan a zonas aisladas, lugares que antes tenían poco o ningún acceso médico”, dijo.
¿Puede la administración de Trump hacer esto legalmente?
Legalmente, Trump tiene amplia autoridad sobre la política de visas a través del Departamento de Estado. El gobierno estadounidense puede imponer restricciones sin necesidad de la aprobación del Congreso alegando motivos de seguridad nacional o política exterior.
Los países afectados pueden contraatacar a través de canales diplomáticos o legales, pero Bahamonde señaló que los ataques estadounidenses a las misiones médicas cubanas no son exclusivos de la administración Trump.
“La restricción de visas propuesta es, en realidad, una ampliación de una política iniciada por la administración Biden. En 2024, el presidente Biden firmó un proyecto de ley de gastos que incluía sanciones contra funcionarios de terceros países que contrataran servicios médicos cubanos”, declaró Bahamonde a Al Jazeera.
Ese mismo año, su administración también acusó a Cuba de lucrarse a costa de sus profesionales médicos.
Agregó que la oposición a las misiones médicas cubanas es “bipartidista”, citando una resolución de 2024 liderada por el congresista republicano Mark Green, que pide la revocación de visas a los países que contraten médicos cubanos.
La opinión sobre las misiones médicas cubanas es bastante uniforme entre los partidos. Independientemente de si el presidente Trump tiene autoridad unilateral para imponer estas restricciones de visas, no preveo una resistencia significativa a ellas, afirmó.
Esto sugiere que, independientemente de quién esté en el poder, las naciones del Caribe probablemente seguirán enfrentando presión diplomática por su dependencia de los profesionales médicos cubanos, dijo.
¿Cómo han respondido los líderes del Caribe?
Algunos líderes caribeños han declarado que renunciarán a su derecho a visas estadounidenses si eso significa mantener las misiones médicas cubanas.
Esta semana, la Primera Ministra de Barbados, Mia Mottley, pronunció un encendido discurso ante el Parlamento, calificando la postura estadounidense de “injusta e injustificada”.
“No podríamos superar la pandemia sin las enfermeras y los médicos cubanos”, dijo.
El primer ministro de Trinidad y Tobago, Keith Rowley, advirtió que la interferencia de Estados Unidos en las decisiones sanitarias del Caribe es inaceptable.
“De repente, nos han llamado traficantes de personas porque contratamos a personal técnico a quien le pagamos mucho dinero”, dijo Rowley, añadiendo que estaba dispuesto a perder su visa estadounidense.
De igual manera, el primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, destacó el efecto directo que tienen los médicos cubanos en la atención al paciente.
“Si los cubanos no están, quizá no podamos mantener el servicio”, dijo. “Preferiría perder mi visa a que mueran 60 personas pobres y trabajadoras”.
Y la semana pasada, la ministra de Asuntos Exteriores de Jamaica, Kamina Johnson Smith, dijo a los periodistas que su gobierno considera que los médicos cubanos son vitales.
“Su presencia aquí es fundamental para nuestro sistema de salud”, afirmó. 400 médicos, enfermeros y técnicos médicos cubanos trabajan actualmente en el país.
En una publicación en X, el ministro de Asuntos Exteriores de las Bahamas, Fred Mitchell, avaló el programa cubano y dijo que su gobierno “sigue todas las mejores prácticas internacionales en el reclutamiento de mano de obra”.
Hugh Todd, ministro de Relaciones Exteriores de Guyana, dijo al servicio de noticias AP el martes que 15 ministros de Relaciones Exteriores de la Comunidad del Caribe (CARICOM) se habían reunido con Mauricio Claver-Carone, enviado especial de Estados Unidos para América Latina, en Washington, DC, para expresar su oposición y exigir claridad sobre la política estadounidense.
“Estados Unidos es un socio estratégico de CARICOM, pero este asunto tan importante tiene que ser abordado a nivel de jefes de gobierno”, afirmó.

200 Palestinos estudian Medicina en La Habana, Cuba.
¿Por qué las misiones médicas cubanas son cruciales para la atención médica en el Caribe y qué sucedería si se recortaran?
Cuba tiene más de 24.000 médicos trabajando en 56 países del mundo, y las misiones impulsan particularmente la atención sanitaria en todo el Caribe, especialmente en naciones empobrecidas que enfrentan profundas crisis económicas y con servicios médicos limitados.
“El impacto en las naciones del Caribe dependerá de cuán esenciales sean los médicos cubanos para sus sistemas de salud y de cuán difícil sea reemplazarlos a corto plazo sin afectar significativamente a las comunidades que dependen de ellos”, dijo Bahamonde.
Para muchos países caribeños, las consecuencias a corto plazo podrían ser devastadoras. La formación de médicos locales lleva años, y los profesionales capacitados suelen emigrar a otros países, dejando tras de sí una escasez persistente.
Cuba ayuda a cubrir esta necesidad enviando miles de profesionales médicos que son mucho más asequibles para la población local que las opciones de atención médica privada, explicó Bahamonde. Estas misiones brindan atención primaria, equipos de respuesta a emergencias y especialistas en campos que a menudo están subrepresentados en los hospitales del Caribe.
También han desempeñado un papel destacado en la respuesta a desastres regionales, como huracanes, terremotos y emergencias de salud pública. Los médicos cubanos fueron fundamentales en la lucha contra el brote de cólera en Haití tras el devastador terremoto de 2010 y en la asistencia a las naciones caribeñas durante la pandemia de COVID-19.
¿Qué otros países dependen de las misiones médicas cubanas?
Cuba no solo envía médicos al Caribe; tiene misiones médicas en todo el mundo. Algunos ejemplos clave incluyen:
- Venezuela es uno de los mayores receptores de médicos cubanos, con miles trabajando en clínicas comunitarias.
- Brasil contaba con un importante programa médico cubano hasta 2018, cuando Cuba retiró a 8.000 médicos debido a una disputa diplomática.
- Italia recibió médicos cubanos durante la pandemia de COVID-19 para ayudar a los hospitales abrumados en algunas de sus regiones más afectadas.
- Sudáfrica acoge a profesionales médicos cubanos en zonas rurales donde hay escasez de médicos.


Por FARAH NAJJAR.
Al Jazeera