El error lo cometieron no en el “qué” sino en el “cómo”. Es una batalla más de las que vienen.
El testarudo interés internacional que mantiene condicionado al ejecutivo federal en los últimos sexenios, donde perversamente quieren legalizar el asesinato de los hijos en el vientre materno, se ha recrudecido en Veracruz desde que en 2016 mediante LA INICIATIVA POPULAR ”Sí Vida” protegió la VIDA en su Constitución Política.
Es el punto en el que se encuentran avocados los promotores de la cultura de la muerte y la causa ProVida en México.
El reciente acontecimiento dirimido en la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, debo resumirlo como es:
“4 de 5 ministros tutelaron
a. el orden constitucional,
b. el respeto a la división de poderes, y
c. la preservación del estado de derecho.
Y como consecuencia, se benefició la Vida Humana en Veracruz”.
Es decir, celebramos el triunfo de la Vida por el error de un ministro voraz y perverso, que con graves deficiencias técnicas presentó un proyecto de sentencia para obligar al poder legislativo de Veracruz modificar su Código Penal y darle paso al aborto. Es así, se precipitó y puso en jaque a la República. Es un caso para “ripley”, aunque usted no lo crea.
Si el caso lo hubieran trasladado al “pleno” de la corte, hubiese sido igual, y “el resto”, no tan solo cuatro de los ministros, hubiesen votado de la misma manera contra el proyecto de sentencia de González Alcántara Carrancá.
Es “el cómo” lo hizo, lo que le llevó a la Secretaría de Gobernación perder esta batalla en su agenda anti vida y que sentenció horas antes en micrófonos del Presidente de la República en su conferencia de prensa matutina.
Pierden ésta, pero ganan tiempo para mejorar “el cómo”. Ese es el desafío que tenemos frente a todos. Es en la misma dimensión «del cómo” con el que la causa ProVida debe desplazar sus estrategias, pues los resultados, sobretodo en la tierra donde tuvo lugar las apariciones de nuestra virgen de Guadalupe, han sido desastrosos para la Vida y la Familia Natural.
La estrategia que desplazan los mercenarios de la muerte es de una guerra de trincheras y de asedio. Van dinamitando trinchera por trinchera. Hoy es el Código Penal, mañana el Código Civil, después la educación sexual, luego la libertad de culto y religiosa y, así sucesivamente. De asedio, porque a través de la anarquía, la ridiculización y las descalificaciones mañaneras, buscan intimidar la institución de la familia y, en este caso, a quienes procuran el don de la Vida.
No hay que desenfocar el objetivo. El caso se cierra en unas semanas, después de que voten el proyecto de sentencia por improcedencia. Sigue manteniéndose la decisión popular que resiste hasta ahora, protegiendo en su artículo 4o la Vida desde la Concepción hasta su desenlace natural: La Constitución Política del Estado de Veracruz.