Mientras algunos compartían el pan en el momento más difícil de la pandemia, otros buscaron sacar ventaja económica a costa del dolor del pueblo.
Con esta comparación, monseñor Joaquín Robledo, obispo de la Diócesis de San Lorenzo, destacó la solidaridad de los ciudadanos con las ollas populares y lamentó las sombras, haciendo referencia a los escándalos de sobrefacturación de equipos e insumos médicos para la lucha contra el coronavirus.
Esto fue expuesto durante la homilía virtual en el cuarto día del novenario de la Virgen de Caacupé, que se desarrolló bajo el tema: “La eucaristía edifica a la Iglesia”.
“En este tiempo de pandemia, hemos visto muchos gestos de compartir el pan, son luces en este tiempo, pero también hubo sombras a causa de la ambición de algunos’’,
señaló.
Durante la conferencia de prensa tras la homilía, el obispo se refirió a las denuncias de corrupción que salpican al Gobierno y a empresas proveedoras como una actitud negativa que no va con la ética, la honradez. ‘‘(…) me chocó bastante la indiferencia, la insensibilidad, la ambición, la avaricia de algunas personas que hasta con el dolor del pueblo piensan sacar ventajas económicas’’.
Resaltó que estos actos contradicen la actitud del Evangelio. ‘‘En el Evangelio no está la palabra mbarete, la prepotencia y, por lo tanto, la autoridad está para servir, la misión de las autoridades es servir al bien común’’.
VIOLENCIA
En otro momento de su prédica, Robledo habló sobre la defensa a la vida y a las mujeres, lamentó que actualmente se las menosprecie. Insistió en que Jesús es el centro de nuestra fe y nuestra vida, y confesar esa fe significa comprometernos con la vida, con los derechos humanos.
“El papa Francisco nos dice de las mujeres, que son doblemente pobres por el maltrato y la violencia, mujeres forzadas a abortar y se refiere también a la trata de personas. Señalando una forma de esclavitud mundial. La vida es un bien supremo que debemos defender y respetar”, sostuvo en su prédica.
En su conferencia de prensa, el obispo lamentó que casi todos los días sean noticias los crímenes donde las víctimas son las mujeres en distintos lugares del país. ‘’Las autoridades hacen lo que pueden, pero hay que redoblar los esfuerzos para ir poniendo una solución de raíz a esos males del desprecio a la vida’’, enfatizó.
RENEGOCIACIÓN
Consultado sobre la renegociación de Itaipú, monseñor Robledo manifestó que todos queremos que el Paraguay se desarrolle y no excluya ni discrimine a nadie. ‘’Esta es una oportunidad para eso y se debe hacer con un espíritu patriótico y no pensando en intereses (particulares). Es el desarrollo global integral del Paraguay. Pienso, deseo y rezo para que esto se pueda ver y tratar con ese espíritu del bien del Paraguay, su desarrollo’’.
Además, el religioso insistió en que todos los paraguayos y las autoridades del Gobierno deben trabajar para que se realice un diálogo justo y honesto en las negociaciones sobre Itaipú, que miren al Paraguay y, sobre todo, a los más pobres, los hermanos indígenas. Señaló que de ellos es la tierra, el agua y su cultura riquísima y, sin embargo, están sin tierra, enfermos, arrinconados como muchos paraguayos que están excluidos de los bienes del país.
Con información de Ultima Hora