La fiscal distrital de Tarija, Sandra Gutiérrez, informó que en los últimos días recibió una nueva denuncia de pederastia cometida en 1988 por un párroco identificado como Otto S. de la comunidad de Camargo.
“Pese a los años y después de haber vivido un calvario por el trauma que aún sigue teniendo este señor, porque ahora ya es mayor de edad, decidió presentar su denuncia correspondiente”, indicó Gutiérrez en declaraciones difundidas por BTV.
Después de 35 años, la víctima relató ante la Fiscalía que sufrió las agresiones del religioso de manera reiterada cuando solo tenía 15 años, señaló que cuando denunció en su momento ante algunas monjas de la parroquia, fue “acusado de mentiroso” y expulsado cuando quería hacer su primera comunión.
Ante esta situación, Gutiérrez aseveró que se activó la investigación y se recolectaron los indicios dando con el paradero del monseñor Otto, quien será sometido a una audiencia cautelar en las próximas horas, porque se hallaron elementos que lo señalan como autor del delito de abuso deshonesto.
“Realizadas todas las investigaciones, se hace una recolección de todas las evidencias, testimonios y lo demás. Analizando todo esto vemos que hay suficientes indicios de que este sacerdote es, con probabilidad, autor del delito de abuso deshonesto, en este sentido se ha presentado la imputación formal”, explicó la fiscal.
Este sería el segundo religioso involucrado en estos vejámenes contra menores de edad que son investigados y son puestos ante un juez cautelar en Tarija.
El primero fue el párroco de la iglesia de San Roque, Milton Murillo, quien ahora está con detención preventiva en la cárcel de Morros Blancos.
LA PAZ, BOLIVIA.