Este primer minuto del jueves 30 de mayo, inició la veda electoral que pone fin a las campañas de los miles de candidatos a cargos de elección. Con esta etapa se pretende la reflexión de los millones de electores para emitir el voto responsable y libre, aun los riesgos de regiones del país desestabilizado por la incesante violencia.
Fue también un período de campaña marcado por los 34 asesinatos de candidatos y las diversas acciones de grupos del crimen organizado que amenazaron integridad y seguridad.
Consciente de que esta realidad es amenazante y podría restringir la libertad del sufragio, desde el inicio de estos 90 días de campaña, la Iglesia comprometió su acción pastoral con la promoción de la paz y de una jornada electoral pacífica con base en la responsabilidad ciudadana. El pasado 26 de mayo, la jornada nacional de oración por la paz en el proceso electoral se marcó con la consagración de diversas diócesis y regiones por los obispos de México.
La diócesis de Cuernavaca, cuyo pastor, el obispo Ramón Castro Castro, desde el 2 de marzo, emprendió las veladas de oración en diversas comunidades, templos y lugares de culto, pidiendo por el fin de la violencia, la paz y de tantas situaciones difíciles que viven millones de mexicanos. La diócesis de Cuernavaca se convirtió en centro donde irradió espiritualidad y oración que tuvo por bandera la paz protegida por las armas de la oración y de la piedad.
En víspera del proceso electoral del 2 de junio, la 16 velada de oración, última de esta gran iniciativa coordinada por Erika Guadarrama, iniciará este sábado 1 de junio a las 8 pm en la catedral de Cuernavaca para concluir el 2 de junio a las 8 am, justo al iniciar la jornada electoral con la apertura de las casillas de votación que, desde esa hora y hasta las 6pm, recibirán los votos de los más de 90 millones de electores registrados en padrón.
Como señaló Erika Guadarrama en entrevista, las veladas de oración fueron la suplica de rodillas ante Nuestro Señor sacramentado para “que las elecciones sean transparentes, honestas y se lleven a cabo en un clima de paz, ya que la violencia, que de por sí vemos todos los días, parece exacerbarse en tiempo de elecciones. También oraremos para que los ciudadanos, primeramente, ejerzamos nuestro derecho y obligación al voto y que dicho voto sea reflexivo y consciente a fin de que México viva en una democracia que garantice las libertades fundamentales de los ciudadanos, la libre expresión, la libertad de culto, la protección de la vida, etcétera; es decir, todos los derechos que tenemos como ciudadanos y como hijos de Dios”.
Las veladas de la diócesis de Cuernavaca comenzaron con las elecciones presidenciales del 2018. En las intermedias del 2021 se hicieron de forma diurna debido a la reciente pandemia de la cual salíamos.
A través de un video, el obispo Ramón Castro Castro, plantea la necesidad de “hacer algo” ante la urgente realidad de Morelos y del país entero. “Nuestra preocupación puede tomar otro rumbo”, se ve en el video mientras el prelado enuncia las principales preocupaciones: Violencia, inseguridad, asesinatos, corrupción, derecho de piso, “¡Cuántas situaciones que verdaderamente nos preocupan!” exclama el obispo de Cuernavaca.
Las 15 jornadas de oración en comunidades y templos de la diócesis de Cuernavaca han abierto sus puertas a todos, hombres y mujeres de buena voluntad, quienes han pedido por la paz y otras necesidades.
