Por: Caterina Appendini
La semana pasada dos notcias muy importantes sacudieron a México, una de ellas nos llenó de tristeza, preocupación e indignación a los defensores de la vida, la otra no+cia nos dio esperanza.
¿Pero es que no son sagrados los niños mexicanos?
El pasado miércoles 6 de septiembre la SCJN (Suprema Corte de Jus+cia de la Nación) concedió un amparo al Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE) contra los arIculos del Código Penal Federal que sancionan el delito de aborto a nivel federal. Esto quiere decir que cualquier mujer que desee abortar basta que se afilie a GIRE y puede hacerlo sin ningún problema.
En la red social X (antes TwiTer) la SCJN escribió «La Primera Sala de #LaCorte resolvió que es incons8tucional el sistema jurídico que penaliza el aborto en el Código Penal Federal, ya que viola los derechos humanos de las mujeres y personas con capacidad de gestar”. Es tremendo considerar derecho el asesinato intrauterino (aborto), precisamente el asesinato intrauterino (aborto) viola el derecho fundamental a la vida del ser humano que se encuentra dentro del vientre materno. También hay una demostración de lo ideologizada que se encuentra la SCJN al usar el término “personas con capacidad de gestar”, las mujeres somos las únicas que tenemos capacidad de gestar, eso lo dice la biología.
Con este amparo los seres humanos inocentes más vulnerables, aquellos que se encuentran en el vientre materno, quedan totalmente desprotegidos y pueden eliminarlos sin ninguna consecuencia legal.
Algunas personas reconocieron como algo “bueno” y festejaron el poder asesinar impunemente a los seres humanos que se encuentran en el vientre de sus madres. Esto dice mucho de cómo se encuentra la sociedad mexicana en estos momentos.
Una sociedad que considere bueno el aborto es una sociedad que no ama, que no busca el bien común, que es violenta, que no es civilizada. Como decía la Madre Teresa de Calcuta “al abortar, la madre no ha aprendido a amar; ha tratado de solucionar sus problemas matando a su propio hijo. Y a través del aborto, se le envía un mensaje al padre de que no 8ene que asumir la responsabilidad por el hijo engendrado. Un padre así es capaz de poner a otras mujeres en esa misma situación. De ese modo un aborto puede llevar a otros abortos. El país que acepta el aborto no está enseñando a su pueblo a amar sino a aplicar la violencia para conseguir lo que se quiere. Es por eso que el mayor destructor del amor y de la paz es el aborto”.
¿Quién defenderá a nuestros niños?
Esta resolución de la SCJN me hizo ver un futuro para México marcado por la violencia y la barbarie, pero justo al día siguiente (7 de septiembre) Eduardo Verástegui registró ante el INE su intención como aspirante a candidato independiente a la presidencia de la República Mexicana, para las elecciones del 2 de junio de 2024. Esta notcia me llenó de esperanza, le dio esperanza a México, ya que, como él mismo asegura en una publicación en Facebook “Su lucha es por la vida. Su lucha es por la libertad”.
Así como la SCJN desprotegió a los seres humanos más inocentes, Eduardo Verástegui quiere luchar por ellos y por protegerlos.
Eduardo Verástegui lleva años demostrando con su tes+monio que la causa a favor de la vida, la familia y la libertad es su prioridad. Con su constancia de aspirante a la candidatura independiente a la Presidencia de México que el INE le entregó el 8 de sep+embre surge una luz, una esperanza para México, tenemos la maravillosa oportunidad de tener un presidente que se preocupará por todos los ciudadanos, tanto que protegerá su vida desde la concepción hasta la muerte natural, también está firmemente comprome+do por defender nuestras libertades tan pisoteadas en la actualidad.
Ahora más que nunca urge que seamos valientes y busquemos defender y proteger a todos los seres humanos desde su concepción hasta su muerte natural. Tenemos la estupenda oportunidad de tener un presidente pro vida, pro familia y pro libertad ¿serás congruente con tus principios y convicciones y lo apoyaras para llegar a la presidencia? ¿o serás un cobarde vencido por el miedo y el interés y le darás la espalda? ¿Harás que la luz de la esperanza que surgió con su candidatura crezca o la apagaras?
De nosotros depende el curso de la historia, pero yo te invito a la verdadera defensa de la vida, la familia y la libertad, pero con hechos, ya basta de quejas y palabras, es momento de actuar, de ser valientes y congruentes.
