Este 1 de septiembre, la apertura de sesiones del Congreso de la Unión coincide con la entrega del Quinto Informe de gobierno de López Obrador. En la publicidad oficial, el presidente presume los supuestos logros en estos cinco años de gestión, retomando el lema de campaña que le dio la victoria en 2018: “Por el bien de todos, primero los pobres”.
Según AMLO, la pobreza en México se ha reducido en más del cinco por ciento; sin embargo, no todos coinciden con las cifras alegres y los supuestos éxitos de un gobierno cada vez más cuestionado donde diversos sectores sociales enfrentan una evidente crisis.
En su reciente análisis, el Observatorio de Ciudadanía y Análisis Social realiza una crítica acerca de la pobreza en México. De acuerdo con el documento: “La aparente disminución de la pobreza en México”, el organismo integrado a la Conferencia del Episcopado Mexicano, en base a los datos del informe sobre la pobreza del Consejo Nacional para la Evaluación de la Política Social -CONEVAL- el cual, dice el Observatorio, “observó muy buenas noticias para el país, pues la pobreza disminuyó en México de manera significativa en su última medición, pues pasó de 55.7 millones de pobres en 2020 a 46.8 millones en 2022. La disminución no es menor, pues 8.9 millones de personas abandonaron su condición de pobreza en tan sólo dos años” y en el que, afirma, la pobreza extrema tuvo una reducción “espectacular”, cifras que han dejado muy satisfecho al presidente de la República.
No obstante, a pesar de las cifras positivas, el Observatorio puntualiza las discrepancias como la de “una economía que no ha crecido nada en este sexenio. Al cierre del pasado año 2022, el Producto Interno Bruto no había crecido en lo absoluto. En términos muy sencillos, México, en la última medición por año, no había incrementado su riqueza como país en nada”.
Aunque exista un aumento a los salarios y de empleos, el “dato curioso o raro a considerar es que al cierre de 2021 la población ocupada en México era menor al cierre del sexenio anterior: En 2018 había 52.3 millones de personas ocupadas y tres años después, al cierre de 2021, la ocupación había disminuido a los mencionados 51.8 millones”, mientras que la mayor carga de creación de empleos está en las pequeñas y medianas empresas, las que son creadas por los particulares y que el presente gobierno han sufrido serios descalabros y muchas se perdieron definitivamente entre 2020 y 2022. “El INEGI informó que en 2019 había un universo de 4.9 millones de este tipo de empresas y se perdieron con la pandemia 1.6 millones”. El Observatorio indica que en 2021 se habían recuperado 1.2 millones, pero más pequeñas y con menos empleados. En total la pérdida de empresas PYME fue de 400 mil.
Critica igualmente la falta de inversión extranjera y aunque la masa salarial se incrementó, este crecimiento no fue proporcional al de la inflación acumulada en el sexenio que supera el 24 por ciento, a pesar del dinero en subsidios de programas sociales a adultos mayores, un sector de discapacitados, algunas becas a jóvenes, además de los apoyos a los estudiantes de primaria y secundaria, los mismos “no son suficientes al no propiciar el crecimiento ni la solidez económica”.
El Observatorio concluye en decir que “no se aprecia consistencia en datos sobre disminución de la pobreza que puedan ser correlacionados con el mejoramiento y crecimiento de la economía, con la creación de empresas y crecimiento del empleo, tampoco existe un incremento significativo de la inversión pública o privada, y los datos sobre la masa salarial y el ingreso per cápita de los mexicanos tampoco son consistentes con el anuncio de una reducción significativa de la pobreza”, en resumen, la economía no crece en absolutamente nada y es menor a la de 2018, afirma el documento.
La aparente disminución de la pobreza en México puede leerse aquí.
