Tras la larga reunión en la que 39 obispos de México, coordinados por Ramón Castro Castro, secretario general del CEM, algunos prelados expresaron el carácter fraternal que se dio en la reunión. Según reportaron medios vaticanos, Óscar Támez Villarreal, obispo de Ciudad Victoria; Eugenio Lira Rugarcía, obispo de Matamoros y el arzobispo de Durango, Faustino Armendáriz, describieron algunos de los pormenores del encuentro con el Santo Padre Francisco al que calificaron “de mucha iluminación”.
Según el arzobispo de Durango, el Papa animó a los obispos a procurar cuatro cercanías: Con Dios a través de la oración, entre los obispos mismos para hacer Colegio, viviendo y trabajando “en sinodalidad”, hacia los sacerdotes a la manera de padres con particular cercanía a su trabajo pastoral, inquietudes “e incluso a sus enfermedades” y con cercanía al pueblo bajo la consabida figura del pastor con olor a oveja. Faustino Armendáriz expresó su anhelo para hacer que la iluminación del Papa aterrice en las diócesis que representan.
En su turno, Eugenio Lira Rugarcía indicó que las reuniones en los dicasterios vaticanos han tenido por característica las cercanías descritas:“Hemos encontrado a los prefectos y sus equipos de trabajo muy cercanos, muy dispuestos a la escucha, al diálogo y al discernimiento para que podamos vivir esa sinodalidad que no es un invento nuevo sino que está en la esencia de la Iglesia y así podamos caminar juntos con la tarea que Dios nos ha confiado…”
El obispo de Ciudad Victoria, Óscar Támez, dijo que el mensaje específico del Papa a México es que los prelados sean portadores de esperanza y «cercanos al pueblo porque esa es la esencia de Dios. La cercanía es la esencia de Dios”.
La entrevista completa puede ser escuchada aquí.
