El sábado 10, la presidenta de Eslovaquia, Zuzana Čaputová, estuvo en el Vaticano con el Papa Bergoglio. El motivo de su reunión no está claro, pero por el comportamiento y las declaraciones está claro que pertenecen al Estado Profundo y la Iglesia Profunda.
Desafortunadamente, Zuzana Čaputová es exvicepresidenta del partido político ultraliberal Progressive Slovakia, promueve la ideología LGBT y está haciendo todo lo posible para introducirla en la sociedad eslovaca. Su máxima: «Me gustaría que Eslovaquia fuera un país donde la gente no tenga miedo de morir» ( https://www.youtube.com/watch?v=VnG2jUOlGCg) es parte de su comportamiento antieslovaco y antihumano.
La presidenta Čaputová está divorciada, vive en concubinato y ocasionalmente cambia de pareja. A su actual compañero, recientemente (en Londres durante el funeral de la reina Isabel II), los británicos le otorgaron el título de presidente de la República Eslovaca. ( https://ee.linkedin.com/posts/tomasbella_thinks-and-prayers-for-getty-images-editor-activity-6977611980484284417-5LjN , https://ne-np.facebook.com/photo/?fbid= 545384287587322&set=ecnf.100063472655453 )
LSin embargo, la presidenta en el Vaticano tiene un fuerte y significativo potencial para fortalecer y legitimar a sus aliados políticos progresistas precisamente en el momento en que se encuentra Eslovaquia: la crisis del gobierno, por lo que el gobierno corre el riesgo de caer el próximo martes 13 de diciembre.
Desafortunadamente, la Sra. Čaputová representa los intereses de los Estados Unidos más que los de los ciudadanos de la República Eslovaca, a pesar de que fue elegida directamente por este último (incluso si las elecciones fueron amañadas).
Recientemente, dos jóvenes de la comunidad LGBT fueron asesinados en Bratislava (una tercera víctima, herida en esa ocasión) se encontraba en la delegación oficial con el Presidente al encuentro con el Papa. Nuestros obispos y todos los cristianos condenaron este acto, pero un agresivo parte de la comunidad LGBT ha acusado públicamente a la Iglesia Católica de ser culpable de este asesinato y a su marcha de protesta también asistió el presidente Čaputová.
Zuzana Čaputová es políticamente cercana a Paolo Demes (el administrador del German Marshall Fund, https://www.gmfus.org/find-experts/pavol-demes ). Este hombre es muy fuerte, tiene acceso a casi todas las cancillerías del mundo, incluida la Casa Blanca y es parte del Estado Profundo ( https://www.cairn.info/revue-herodote-2008-2-page-69. htm ).
En los próximos días sabremos cómo la presidenta Čaputová abusó de su poder durante su reunión con el Papa Bergoglio el sábado 10 de diciembre para presionar por la solicitud de Paolo Demes de la destitución del arzobispo de Trnava Jan Orosch y el regreso del arzobispo Róbert Bezák a Trnava. . ( https://www.aktuality.sk/clanok/tr1H0TX/dozvie-sa-o-vyjadreniach-oroscha-papez-kritici-chcu-kontaktovat-vatikan/ )
Precisamente por eso no es de extrañar que ahora en la delegación eslovaca al Vaticano estuviera también el ex político František Mikloško, gran partidario de Robert Bezak. Después de su destitución, hace ya diez años, organizó varias manifestaciones también bajo las ventanas de la Nunciatura Apostólica en Bratislava ( https://domov.sme.sk/c/6843789/veriaci-sa-budu-pred-nunciaturou-modlit – za-bezaka.html ).
Así que con su comportamiento, actuando contra la unidad de la Iglesia, protestando contra la Iglesia, contra el Papa ante la Nunciatura Apostólica, Mikloško cayó en la excomunión latae sententiae reservada a la Sede Apostólica. Ahora resulta que, con su actual visita al Vaticano, él, Mikloško, fue al Vaticano para pedir que se lo quitaran.
Desafortunadamente, Mikloško después de 1989 (cuando era presidente del Consejo Nacional Eslovaco) escribió varias cartas al Vaticano pidiendo la destitución del arzobispo metropolitano de Trnava Jan Sokol. Qué vergüenza. Mikloško hasta el día de hoy no ha escuchado la voz del pueblo de la noble nación eslovaca que quería que su estado fuera independiente. Sin embargo, sucedió incluso en contra de su voluntad, y Eslovaquia recuperó su propio estado el 1 de enero de 1993. Treinta años se cumplen el 1 de enero próximo. Si esto no hubiera sucedido, no habría podido organizar la protesta frente a la Nunciatura Apostólica, porque esta no sería en Bratislava, sino en Praga.
Si la misión del presidente Čaputová y el Dr. Mikloško será una Iglesia pobre y exitosa en Eslovaquia: todavía perderá muchos de sus fieles y miembros. ¡Oh tempora, oh mores!
pablo pedro.
Ciudad del Vaticano.
Lunes 12 de diciembre de 2022.
stilumcuriae.
