Feligreses de la Iglesia Católica en Orán juntan firmas para solicitarle al arzobispo Mario Cargnello que el obispo emérito Gustavo Zanchetta sea retirado del Monasterio Nuestra Señora del Valle al fue trasladado para que cumpla en modalidad domiciliaria la condena por abuso sexual contra dos exseminaristas.
La juntada de firmas se decidió ante la falta de respuestas del obispo de Orán, Luis Scozzina. Hoy y mañana, de 10.30 hasta las 12, lxs feligresxs convocan a la Plazoleta de los Jóvenes para manifestarse y firmar el petitorio.
Una de las fieles católicas de Orán, Stella Maris Corbacho, había tomado la iniciativa de escribirle a Scozzina la semana pasada. Sin embargo, aunque se manifestaron junto a otrxs feligreses en el obispado, no obtuvieron ninguna respuesta. Por ello ahora Corbacho escribió otra carta para Cargnello y será enviada junto a las firmas que colecten hasta el miércoles.
Consultada por Salta/12, Corbacho dijo que le escribirán a Cargnello siguiendo «la jerarquía eclesial». «El lunes, martes y miércoles juntamos firmas y le adjuntamos para que tenga más fuerza», explicó. También dijo que esperarán una respuesta del arzobispo o seguirán con misivas al cardenal Mario Aurelio Poli y al Papa Francisco.
La misiva a Cargnello es «a los fines de expresarle el sentir de los ciudadanos de la Provincia de Salta, especialmente de San Ramón de la Nueva Oran», ante lo que definen como «la triste realidad» de que Scozzina «en forma intempestiva, arbitraria, inconsulta y con una manifiesta falta de consideración con los seminaristas y la feligresía» diera alojamiento al obispo Zanchetta en una residencia para sacerdotes jubilados en el Monasterio Nuestra Señora del Valle.
«Creemos que por su intermedio podemos resolver esta situación por la memoria del Padre Diego (Calvisi)» que falleció siendo considerado un santo en «esa residencia hoy habitada por Zanchetta, y además por respeto a las víctimas y sus familiares que se sienten burlados con esta decisión de la prisión domiciliaria, estos jóvenes víctimas de Zanchetta hoy no pueden iniciar un camino de sanación, esta pesadilla continúa donde el único beneficiado es el exobispo un ser manipulador, con rasgos psicopáticos, insensible, abusador, que lo único que hizo es gozar de privilegios», sostiene la carta.
La Sala II del Tribunal de Juicio de Orán, integrada por la jueza María Laura Toledo Zamora y los jueces Héctor Fabián Fayos y Aldo Primucci, concedió la detención domiciliaria a Zanchetta, quien fue trasladado al Monasterio el pasado viernes 8 de julio.
El obispo emérito fue condenado el 4 de marzo pasado por abuso sexual simple, agravado por ser cometido por ministro de culto religioso reconocido en perjuicio de dos jóvenes exseminaristas y con la pena de 4 años 6 meses de prisión efectiva. Además de la domiciliaria, el Tribunal dispuso el uso de la pulsera electrónica y el control por parte de la Unidad de Arresto Domiciliario por Monitoreo Electrónico dependiente del Servicio Penitenciario.
El Tribunal justificó la concesión de la prisión domiciliaria en «los distintos informes médicos de Zanchetta, que estuvo internado en una clínica de la ciudad de Orán, presentando un cuadro de evolución aguda, asociada a hipertensión arterial severa, con afectación del estado general. Siendo una persona condenada sin sentencia firme, con patologías de carácter grave y con riesgo de muerte».
Según informó el Poder Judicial, la fiscala de la causa, María Soledad Filtrín Cuezzo, estuvo de acuerdo con la concesión de la domiciliaria y dio un dictamen positivo considerando que se encuentran cumplidos los requisitos para otorgarle el beneficio.
La sentencia a Zanchetta aún no se encuentra firme, ya que la causa tiene un trámite de casación en la Sala I del Tribunal de Impugnación desde junio pasado. Los abogados del religioso, Darío Palmier y Juan José Valdez Aguilar, pidieron la absolución de la condena argumentando que es inocente de los delitos que se le acusan.
«Sentimos impotencia y vergüenza ante esta triste realidad, viendo como la Iglesia de San Ramón de la Nueva Orán no ha tomado conciencia sobre la gravedad de esta decisión inconsulta como lo es la de abrir las puertas de un lugar santo para que pueda residir cómodamente allí Zanchetta, que con sus atributos máximos en la jerarquía eclesiástica, con pecados, equivocaciones y decisiones totalmente repudiables para su investidura de consagrado goza de la estadía en el mencionado lugar«, sostiene la misiva dirigida a Cargnello.
En la carta, se destaca que «ya juzgado y condenado Gustavo Oscar Zanchetta no es digno de este privilegio, por su conducta aberrante, su condena, los perjuicios económicos, materiales, espirituales ocasionados a la diócesis por el daño psíquico y espiritual causado a los ciudadanos que creyeron en él y en la Iglesia».
«Apelamos a la Arquidiócesis de Salta continuando con la Jerarquía Eclesial, rogamos a su persona para que este pedido sea escuchado, que el clamor del Pueblo sea escuchado para que Zanchetta sea retirado del Convento de las Hermanas Concepcionistas, Monasterio Nuestra Señora del Valle, ya que en el Obispado de Oran no recibimos respuestas», dice la carta dirigida al arzobispo.
Consultada sobre el hecho de que Cargnello se encuentra denunciado por las monjas del Convento San Bernardo de Carmelitas Descalzas por violencia de género, Corbacho dijo que se dirigen a él porque es quien sigue en la jerarquía de la Iglesia, además opinó que «es una situación que se empieza a visibilizar con esta denuncia, la violencia y el sometimiento, que hubo en la Iglesia esta asimetría de poder sacerdote- monja«.
Por Claudia Alvarez Ferreyra.
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