El brillo de la verdad y de la realidad que estamos viviendo sólo se puede lograr cuando nos reunimos, cada uno según sus responsabilidades, para buscar éticamente una meta común, que nos permita trascender nuestra indiferencia y pasividad ante las circunstancias adversas que estamos atravesando en todo México: Dinámicas de violencia y de destrucción del tejido social.
Algunos obispos mexicanos, reunidos este 21, 22 y 23 de septiembre de 2023 en Puebla, nos están proponiendo una ruta sencilla y eficaz para hacer frente común ante las dinámicas de violencia y de destrucción del tejido social. Ellos nos señalan que la tarea no es fácil ni imposible, si todos nos comprometemos en la tarea por la paz. Claramente nos indican que: “La paz es un trabajo conjunto en distintos niveles y con todos los sectores sociales. Implica la suma de voluntades, la coordinación de esfuerzos y la generosidad de todos para vencer el miedo que nos afecta ante la indolencia y la ineficacia de las autoridades, que no se han ocupado de su principal tarea de procurar la unidad, la seguridad, la justicia y la paz del país. Este diagnóstico, que hacemos propio por su contenido de verdad, es compartido por los análisis que han nutrido nuestro discernimiento”. Es tiempo de buscar unirnos a este trabajo común por la paz.
Hoy es el tiempo de actuar juntos bajo el signo de la esperanza en Cristo, para ejercitar nuestra responsabilidad ciudadana. Dios transciende nuestro actuar, pero no lo ignora para sacarnos delante de todo lo que nos hiere y humilla. Hoy es nuestro tiempo para unirnos en la fe, la esperanza y la caridad.
Pbro. Juan Beristain de los Santos