* Israel ignora el ultimátum de Biden de entregar ayuda humanitaria a Gaza. Y se está preparando para actuar en concierto con la nueva administración Trump.
* Los nombramientos de Trump son una señal de apoyo incondicional al Estado judío. No por el deseo de detener la guerra.
El pasado miércoles 13 de noviembre expiró el ultimátum de Estados Unidos al gobierno israelí ordenando la apertura de los cruces con la Franja de Gaza para permitir el paso de los camiones de ayuda humanitaria. La carta fue enviada al gobierno israelí y firmada tanto por el Secretario de Estado como por el Ministerio de Defensa, Antony Blinken y Lloyd Austin respectivamente. Ambos, con la aprobación del presidente Joe Biden, pidieron al primer ministro Benjamín Netanyahu que elimine todos los obstáculos que se interponen en el camino de la entrega de ayuda humanitaria a la población de Gaza. Había un plazo: treinta días, bajo pena de bloquear los suministros militares.
- Pero ni Netanyahu cumplió
- Ni el gobierno de Estados cumplió.
Simple y llanamente, Israel sigue bombardeando…y Estados Unidos le sigue surtiendo de armas.
No es la primera vez, desde que la situación en la Franja se ha vuelto dramática y corre el riesgo de convertirse en la mayor tragedia de las últimas décadas, que la Administración estadounidense pide a los israelíes que abran los cruces y levanten el asedio que priva a los civiles de sus derechos esenciales. medios para la supervivencia y la atención de la salud.
El ultimátum destacó que Israel negaría o impediría la transferencia de casi el 90% de la ayuda humanitaria, mientras que las leyes estadounidenses le impiden brindar asistencia militar a países que obstaculicen la entrega de ayuda.
De 2019 a 2023, Israel habría importado el 69% del armamento a su disposición de Estados Unidos. Los datos fueron publicados por el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo , un organismo que monitorea el comercio mundial de armas.
Pero también esta vez Netanyahu ignoró la petición y Estados Unidos no cumplió con el ultimátum : seguirá transfiriendo armas y equipos militares, a pesar de que ocho grupos de ayuda internacionales afirman que Israel no ha cumplido las exigencias de permitir un mayor acceso humanitario a la zona.
Que la situación en la Franja de Gaza está empeorando trágicamente a medida que pasa el tiempo, está claro para todos.
- La población, además de sucumbir a los bombardeos masivos, está muriendo por falta de alimentos, consumo de agua no potable y la propagación de enfermedades infecciosas que no tienen cura por falta de medicamentos.
- Toda la ciudadanía se ha visto obligada a abandonar sus hogares y vive en campos de refugiados superpoblados, en condiciones higiénicas desastrosas, mientras que el 80% de los edificios y estructuras urbanas han sido destruidos, impidiendo así un posible regreso de quienes allí vivían.
El asedio de Gaza, los bloqueos de la ayuda humanitaria, los asesinatos de civiles y trabajadores humanitarios, e ignorando los repetidos llamamientos de las Naciones Unidas, las disposiciones de la Corte Internacional de Justicia y las resoluciones del Consejo de Seguridad, Israel está provocando intencionadamente muerte, hambre y lesiones graves«, se lee en un comunicado emitido por el Comité Especial de las Naciones Unidas cuyo informe se hará público el 18 de noviembre durante la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Todo esto está sucediendo, especialmente en las últimas semanas, en el silencio más ensordecedor de los medios de comunicación.
Pero la pregunta que se hacen:
- los palestinos,
- los de Gaza por la devastación sufrida,
- los de Cisjordania por la guerra silenciosa librada por los colonos apoyados por el ejército, es …
cómo reaccionará la nueva administración liderada por Donald Trump.
Los primeros signos, aunque indirectos, no son alentadores:
- El abandono de la mesa de negociaciones para el alto el fuego en Gaza por parte de Qatar, estrecho aliado de Estados Unidos,
- y el nombramiento de Yechiel Leiter como nuevo embajador de Israel en Estados Unidos. , un hombre cercano a Netanyahu, además de un colono de extrema derecha, que en el pasado formó parte del movimiento kahanista , prohibido en Estados Unidos. Leiter vivía en Nablus, una ciudad de Palestina, donde viven los colonos ultraortodoxos israelíes más radicales y violentos.
¿Pura coincidencia? Parecería que no.
- Leiter, de hecho, es la expresión de una política de expansión de las colonias hasta la anexión de Cisjordania y el rechazo categórico de la solución de dos Estados.
- También apoya esta posición el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, líder del partido «Sionismo Religioso» y ministro de Finanzas del gobierno de Netanyahu, quien recientemente anunció que para 2025 toda Cisjordania será anexada a Israel.
En sus discursos también recordó que Trump, durante su primer mandato, había trasladado la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén y había reconocido los Altos del Golán sirio, anexados tras la Guerra de los Seis Días de 1967, como parte de Israel.
- Además de Smotrich, el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, también apoya el proyecto del Gran Israel.
Los acuerdos de Oslo abrieron, en su momento, el camino hacia una autonomía palestina parcial, limitada sin embargo a algunas zonas, que hasta el día de hoy es sólo teórica. Pero hay tres millones de palestinos viviendo en Cisjordania.
Si Netanyahu guarda silencio sobre estas cuestiones, Trump, en cambio, toma medidas.
- Así, el martes pasado Trump anunció su decisión de nombrar embajador en Israel al ex gobernador de Arkansas Mike Huckabee, uno de los más acérrimos partidarios de Israel en la comunidad cristiana evangélica y opositor del nacionalismo palestino.
En diciembre del año pasado visitó el kibutz Kfar Aza, una de las comunidades cercanas a la frontera con Gaza y devastada durante el ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023. Pero ese no es el único mensaje.
- El nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha nombrado enviado especial para Oriente Medio a Steven Witkoff, un inversor inmobiliario que actuó como intermediario con las empresas judías estadounidenses durante la campaña electoral de Trump.
Son señales que no hacen prever una distensión en un tiempo razonable.
Mientras tanto, las hostilidades continúan , la fuerza aérea israelí, independientemente de la comunidad internacional, continúa bombardeando Gaza, el Líbano y Siria, teniendo como objetivo edificios residenciales.
El saldo es de quince muertos, aunque, según declaró el ministro de Energía israelí, Eli Cohen, un posible acuerdo con Hezbolá parece más cerca de lo que parece. Irán, por su parte, declara su voluntad de reanudar las conversaciones nucleares.
Por NICOLA SCOPELLITI.
VIERNES 15 DE NOVIEMBRE DE 2024.
ROMA, ITALIA.
LANUOVABQ.
