Una treintena de religiosos y sacerdotes nicaragüenses enviaron una carta abierta al cardenal Leopoldo Brenes, en la que le señalan que su “silencio” ante la persecución del régimen “grita conformismo e indiferencia”. Además, lo exhortan a dejar “de ser un panfletario que actúa como político ‘al son que le tocan’”.
La carta, fechada este 13 de diciembre de 2022, fue firmada por “religiosas, sacerdotes y religiosos de Nicaragua, bajo clandestinidad debido al acoso y vulnerabilidad en el que nos sentimos junto al pueblo santo de Dios”.
Los religiosos piden disculpas al prelado por tener que comunicarse con él de esa manera, aunque aclaran que la “situación” de Nicaragua “hace difícil otra manera de comunicación”.
“Simplemente queremos comunicarle a usted algunas impresiones que nosotras y nosotros en la resistencia a la dictadura hemos captado de su manera de responder a la coyuntura actual”, subrayan.
Los religiosos y sacerdotes señalan: “Vemos en usted, desgraciadamente, una falta de solidaridad no solamente con sus hermanos obispos y sacerdotes encarcelados y exiliados, sino con toda la comunidad nicaragüense sufriendo la opresión de esta dictadura”.
“Mientras —prosiguen— los obispos Silvio Báez y Rolando Álvarez están pagando un alto precio por su postura profética frente a la dictadura, su silencio grita conformismo e indiferencia”.
“Actúa como político ‘al son que le tocan’”
El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo mantiene secuestrados al obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando José Álvarez, ocho sacerdotes y dos seminaristas, como parte de una escalada represiva en contra de la Iglesia católica en Nicaragua. Además, el pasado 6 de marzo el Gobierno expulsó del país al nuncio apostólico Waldemar Sommertag, y también echó del territorio nacional a 18 misioneras de la Caridad, congregación que fundó la Madre Teresa de Calcuta.
La dictadura ha clausurado también una decena de radios y canales de televisión que pertenecían a la Iglesia católica, y desde 2018 los templos y sacerdotes católicos han sido víctimas de 190 ataques.
La carta indica que “mientras cientos de miles de nicaragüenses están sufriendo el drama de la pobreza, el desempleo, una migración forzada, encarcelamientos injustos, o exilio doloroso, o la pérdida de miembros queridos de sus familias, usted hace todo lo posible para evitar conflicto con la dictadura sangrienta”.
Los sacerdotes reclaman a Brenes que “deje de ser un panfletario que actúa como político ‘al son que le tocan’ y no como pastor frente a una de las peores crisis de derechos humanos que el pueblo nicaragüense está viviendo”.
“¿Hasta cuándo callará? ¿Qué le impide ser un profeta tal cual lo prometió al ordenarse sacerdote y asumir su rol como pastor?”, lo interpelan.
A continuación la carta íntegra a la que tuvo acceso CONFIDENCIAL
CONFIDENCIAL.