Con sorpresa y dolor, dijo el arzobispo Francisco Moreno Barrón, fue recibida la noticia del cese de actividades de la Iglesia católica debido a la indicación de la Secretaría de Salud de Baja California por motivo del cambio de color a rojo en el semáforo de vigilancia epidemiológica.
A pesar de ser respetuoso de la decisión de las autoridades de Gobierno, monseñor Moreno Barrón, mencionó este domingo previo a la misa de las 10:00 horas que, la Arquidiócesis buscará entablar diálogo con la Secretaría de Salud de Baja California para proponer una acción diferente a la información ya indicada.
“Hemos estado haciendo las cosas bien, las mismas autoridades nos han elogiado, por eso nos sorprendió la decisión de las autoridades”, dijo el arzobispo, sobre todo porque, aseguró que, se había mencionado que si Baja California regresaba al color rojo, no se suspenderían las actividades de culto, de manera total.
De continuar la decisión de la dependencia de Salud, esta sería la primera vez que los templos de la Iglesia católica no estarían realizando misas presenciales en las celebraciones decembrinas.