Xalapa, Ver.— En medio de una de las crisis sociales más graves que ha enfrentado Veracruz, el Congreso estatal —presidido por la diputada Tanya Carola Viveros Cházaro— ha vuelto a dejar en claro cuáles son sus verdaderas prioridades: foros ideológicos y agendas ajenas a las necesidades reales de los veracruzanos. Así lo denunció públicamente Eduardo Segovia, presidente estatal de +Vida+Familia Veracruz, en un comunicado que expone el profundo vacío de oficio político y de empatía social que impera entre los actuales representantes.
Improvisación, incompetencia y sumisión ideológica
El comunicado es directo: los principales actores de la LXVII Legislatura y sus aliados estatales no sólo carecen de logros en materia de seguridad, salud, bienestar social y familia, sino que exhiben un historial de improvisación, incapacidad y sumisión absoluta a intereses ideológicos y del Ejecutivo.
— Tanya Carola Viveros Cházaro, presidenta de la Mesa Directiva, ocupa el cargo más alto del Poder Legislativo sin estudios profesionales concluidos, sin iniciativas relevantes y sin resultados que la respalden más allá de su afinidad política.
— Astrid Sánchez Moguel, presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género, ocupa su curul gracias a la plurinominalidad, sin respaldo ciudadano y sin capacidad para representar a las mujeres y familias.
— Valentín Herrera Alarcón, titular de Salud, más visible en eventos ideológicos que resolviendo las verdaderas urgencias sanitarias.
— Zaira Fabiola del Toro Olivares, directora del IVM, sin programas ni políticas que enfrenten la violencia y desigualdad persistentes.
— Roberto Ramos Alor, reciclado de administraciones pasadas y señalado por irregularidades en el manejo de medicamentos, evadió su responsabilidad como secretario de Salud.
— Clara Mora Juárez, directora del DIF estatal, sin avances ni logros reales en protección a la infancia.
— Edith Jiménez Martínez y Alejandro Moreno Hernández, personajes sin experiencia ni resultados relevantes para la sociedad.
Los datos son contundentes: de las 94 iniciativas presentadas, solo 27 han sido sometidas a votación —de las cuales 10 son de la gobernadora— y las diputadas Viveros y Sánchez apenas han presentado cuatro, todas enfocadas en agendas ideológicas y derechos LGBT, siempre en conjunto, ignorando con dolo las problemáticas centrales del Estado.
Atentado a la objeción de conciencia y a las libertades fundamentales
De especial gravedad resulta la intención expresada por la diputada Viveros de avanzar hacia la eliminación de la objeción de conciencia, derecho humano fundamental, en el contexto del aborto legal. Minimizar sus raíces sociales y religiosas y reducirlo a un simple “obstáculo institucional” es una afrenta directa a la libertad, las convicciones y la dignidad de la sociedad veracruzana.
El pronunciamiento de +Vida+Familia es tajante: esta legislatura ha traicionado su función histórica, actuando como simple brazo operador del Ejecutivo y abandonando la defensa real de las prioridades ciudadanas. Los foros ideológicos y la imposición de agendas desconectadas de la realidad no sólo evidencian incapacidad, sino también desprecio por el pueblo y la vida.
Finalmente, Segovia remata: “El amor del pueblo bueno y sabio por los representantes de cuarta ya tiene fecha de caducidad”. La paciencia social se agota y el reclamo ciudadano por vida, familia y justicia social está más vigente que nunca.
Aquí el comunicado íntegro:
