Haití sigue haciendo balance del terremoto del pasado 14 de agosto. A los 2.207 muertos, 344 desaparecidos y 12.268 heridos se une la destrucción de todo tipo de edificios. En el caso de la diócesis católica más afectada, Jérémie, el 60% de los templos se ha venido abajo.
«Gracias por su cercanía espiritual, su solidaridad y su apoyo moral y espiritual», es el mensaje enviado a Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) por Mons. Joseph Gontrand Decoste, obispo de la diócesis de Jérémie, en el sur de Haití. La Iglesia en esta región hace balance de las consecuencias del terremoto, que ha asolado el país con más de 2.000 muertos y unos 10.000 heridos, dando a conocer la catastrófica situación en la que se encuentra.
Mons. Decoste ha asegurado a ACN que, solo en su diócesis, 6 de cada 10 iglesias se encuentran destruidas, algunas de las cuales ya estaban gravamente dañadas antes del terremoto, debido al paso del huracán Mathew en 2016. El prelado ha informado de que 26 templos han sufrido grandes daños y al menos 11 capillas se han derrumbado por completo y deben ser reconstruidas: «Cualquier ayuda es muy necesaria para hacer frente a esta situación catastrófica, de tanta angustia y sufrimiento». Una de las iglesias más afectadas es la Catedral de San Luis, y templo central de la diócesis.
Los trabajos de reconstrucción y la llegada de ayuda humanitaria se está viendo afectada por la falta de conexión telefónica y la destrucción de las infraestructuras. La diócesis de Les Cayes, epicentro del terremoto, está también muy afectada. Su obispo y cardenal Chibly Langlois resultó herido tras el derrumbe del edificio del obispado.
Mons. Langlois también ha recibido el mensaje de apoyo de ACN. La fundación está en conversación con los obispos locales para definir las necesidades más urgentes y hacer efectivo el envío de la ayuda. Ayuda a la Iglesia Necesitada también ha ofrecido apoyo para el sostenimiento del clero local a través de estipendios de Misas y ayuda de primera necesidad.
Otra ayuda fundamental para sostener la pastoral de la Iglesia haitiana en estos momentos es recuperar y sostener los medios de comunicación diocesanos, como las radios católicas locales, para permitir a los fieles seguir unidos y recibir los mensajes de apoyo de sus obispos.
ACN/InfoCatólica