La lluvia torrencial que cayó sobre Kinshasa la noche del 29 al 30 de enero provocó algunos daños materiales en la ciudad.
No librado de esta situación, el podio papal del estadio de los Mártires de Pentecostés se derrumbó pocas horas antes de la llegada del Papa Francisco a la República Democrática del Congo.
Incidente significativo porque los trabajadores ya están trabajando para reparar este podio para recibir al Papa.
Más de veinte horas antes de que RD-Congo viva su encuentro histórico de inicio del año 2023: la visita del Papa Francisco, del 31 de enero al 3 de febrero. En Kinshasa, los trabajadores trabajan día y noche para preparar a tiempo esta visita, a pesar de las lluvias torrenciales.
Por Gedeón ATIBU.