Pedro Sánchez es fácil de entender. Basta con aplicarle el coeficiente inverso. La realidad es exactamente lo inverso de lo que verbaliza. Dice ahora que quiere luchar por una “política limpia”. ¿Por qué no empieza en casa?, ¿que hará para depurar las responsabilidades históricas del EREgate? Más allá del reproche judicial, ¿qué consecuencias internas tendrá sobre Chaves y Griñán?
Y más actual, ¿qué sanción tendrán los ministros que participaron en la trama Koldo?, ¿cree que con el sacrificio de Ábalos el cortafuegos está asegurado? Y sobre todo, ¿ayudará a la Justicia a esclarecer los negocios de su mujer y el al menos aparente tráfico de influencias?
Porque dice que quiere luchar contra la máquina del fango y los creadores de bulos. ¿De verdad que se quiere suicidar? ¡Si la gran industria del bulo y de las ‘fake news’ reside en Moncloa? Acusó a la mujer de Feijóo por una información que luego fue rectificada. Ni una disculpa. Acusó al hermano de Ayuso de corrupción cuado el tema ya había sido archivado. Denunció que Feijóo supuestamente había pretendido que su mujer no trabajara fuera de casa cuando lo que dijo es que la mujer del presidente no puede tener clientes que contratan con el gobierno. Y así todo.
Ahora pretende endurecer el control de los medios y repite una y mil veces lo de “la máquina del fango, los bulos y las mentiras de los psesudomedios y páginas webs”. Quizás crea que una mentira repetida mil veces se convierte en verdad. ¡Falso! Es mil veces una mentira. Ni El Confidencial, The Objetive, El Debate, OK Diario o Vozpopuli son pseudomedios. Si algo es mentira que pida rectificación y si se niegan que se querelle. Porque el único límite que debe tener la libertad de expresión es el Código Penal.
Nada de esto hace el ‘puto amo’. En cambio pretende secuestrar la libertad de expresión con ‘sobrecogedores’ profesionales de la información o estómagos agradecidos. Desde la UE ya se advierte que el incremento de la publicidad institucional tiene el riesgo de recompensar a los medios afines. De hecho España esta bajando puntos en el ranking mundial de libertad de prensa. Muy peligroso. Porque no hay democracia sin una prensa libre, un contrapoder que ponga luz y taquígrafos a los poderosos. Esa es la luz que el iluminado presidente pretende apagar en su deriva bolivariana.
La respuesta de Feijóo es advertirle que es mortal… Y además de mortal, don Alberto, enemigo. De la libertad y de la convivencia. Su discurso es conmigo o contra mi. Obliga a elegir. Y hay que elegir sin negociación posible ya. O democracia o sanchismo.
El anzuelo del pescador
Illa, disponible para Puigdemont. Illa dice que hablará con quien Puigdemont le diga para formar un gobierno “transversal”. Con razón lanzan un manifiesto por un constuitucionalismo “sin engaños”…
Cordón sanitario. Illa se presenta como la alternativa entre el vecile independentista y el escepticismo constitucionalista, pero elige el vacile. Porque hablará con todos menos con PP y Vox. El cordón sanitario que pactó ETA con ERC…
Fusión bancaria. Sumar se posiciona contra la fusión BBVA/Sabadell mientras que el PSOE dice estar analizando la operación. ¿Quién les pidió opinión para una operación de particulares? La patronal catalana observa con recelo y Oliú exige ahora una prima del 50% frente al 30% ofertado por el BBVA. ¿Farol?
