La reforma que despenalizó el aborto en Veracruz ya fue publicada este martes en la Gaceta Oficial del estado, por lo que ya es ley. Este mismo martes, el Congreso de Veracruz votó en favor de despenalizar el aborto hasta la semana 12 de gestación. El dictamen fue aprobado en el Pleno con 25 votos a favor, tres en contra y una abstención.
El aborto se interpone en el camino, en el plan natural que se ha ordenado para las familias de las naciones sobre la tierra. Este ataque a la familia es central en la guerra contra la humanidad, es una guerra global transgeneracional en su intento por borrar el conocimiento de la vida de una generación a la otra. El aborto ataca la institución formativa: la familia. Estos ataques van en aumento cada día. Se requiere una respuesta.
¿Qué hacer quienes estamos a favor de la vida? La familia es un aspecto central del propósito de la sociedad en la historia de la humanidad, aunque han querido que cambie su concepto, hay que ser consciente de esto. Existen grupos opuestos que quieren destruir a las familias porque son un conducto importante para la preservación de la vida de muchas generaciones. Las personas nacen en una familia y, tú mismo —¿cómo llegaste al mundo?, llegaste a este mundo del vientre de tu madre.
Los ataques de los que están en contra de la vida y la familia siempre tienen implicaciones más amplias que trascienden más allá de una sola generación. Han estado en guerra contra la “simiente de la mujer” que es como el grano contenido en el interior del fruto como sí ella misma fuera una planta que puesto en las condiciones adecuadas, germina para dar origen a una de la misma especie, cosa que es causa u origen de otra.
Esto sucede cuando se rechaza el sentido de responsabilidad, provocados por un régimen, por una elite o un líder con ideologías que atentan contra la vida, así como el rechazo del consejo de los mayores acerca del peligro de la muerte, porque ese mal se alberga en sus mentes, en sus pensamientos homicidas hacia sus propios hijos en su vientre. Abrir las puertas a las ideologías, en favor del aborto desde que nos dejamos al descubierto.
¡Oh, señores legisladores! ¿No han fallado ustedes ya bastante, sino que tienen que acarrear sobre ustedes la culpa de los no nacidos? Son ustedes los que hacen que los tiempos sean malos y provocan juicios sobre la nación. ¿Prefieren ver las angustias de los hijos y oírlos gritar en medio de tormentos infernales que estar abiertos a la vida? Hay que hablar una palabra para su instrucción, escuchar el grito del pueblo que suplica por la vida ¡Oh crueles padres, autoridades irresponsables! Tal vez imaginan que ustedes están haciendo bien; sin embargo, a mi juicio, un hombre que no promueve la vida y la familia en cualquier ámbito comenzando desde el hogar no es digno de ser un participante adecuado de ella. Merece amonestación y censura por este mal, así como por los escandalosos silencios de omisión; y es que traiciona su vil hipocresía al pretender ser un buen padre o madre de familia, cuando es una mala persona en su casa porque un hombre o mujer bien nacidos, es decir, de buenas maneras y refinado, respeta la vida y la familia. Es de los que son justos delante de su propia conciencia “andan irreprensibles en todo”.
Trabajemos en el interior de nuestras familias, con nuestros hijos sin desfallecer. Las leyes no siempre son justas ni mucho menos buenas, tú eres parte de la vida.
RUAN ANGEL BADILLO LAGOS.