Revés al pastor acólito de AMLO. Iglesia Católica y Confraternidad Evangélica se unen por la paz

Guillermo Gazanini Espinoza
Guillermo Gazanini Espinoza

Inédita y estratégica jugada que desactiva la controversia desatada por el representante de las Confraternidad Nacional de Iglesias Evangélicas, de Arturo Farela, el pastor acólito favorito de AMLO.

El miércoles 11 de agosto, a través de un mensaje conjunto, el obispo de Cuernavaca y secretario general de la CEM, Ramón Castro Castro y representantes de las Confraternidad  Evangélica de México, que aglutina a diversas denominaciones cristianas evangélicas, firmaron una declaración conjunta en la que coinciden en un llamado a las autoridades para implementar mejores políticas públicas para garantizar la paz y seguridad.

“Nos hemos encontrado y abrazado” inicia el mensaje conjunto en una referencia que indicó que la mayoría de las iglesias evangélicas no estarían de acuerdo con las declaraciones de Arturo Farela quien declaró que las peticiones y oraciones de la Iglesia católica son incendiarias para el país.

En el mensaje “Paz y Bien para México”, el representante de la CEM y quienes firmaron en nombre de las iglesias evangélicas, presbiterianas, bautistas y del ministerio de las Casas de Dios y el Centro Familiar Cristiano coincidieron en el cargar igualmente con el dolor de miles de familias de muertos y desaparecidos manifestándose en que nadie debe vivir en un clima de violencia.

A la vez, acordaron algunas acciones por la paz destacando el llamado por la oración, despertar la conciencia de que la paz es un don de Dios, el fomento del diálogo y de la colaboración “afirmando el valor de toda vida humana como sagrada. A nadie le es lícito privar de la vida y de la libertad a un semejante”. Además de comprometerse a la búsqueda de la justicia, solidaridad y amor al prójimo, los firmantes hicieron un “incendiario” llamado a las autoridades a fin de “encontrar mejores y más eficaces estrategias de seguridad ciudadana que garanticen la paz social, los derechos y las libertades fundamentales.

Sin llamarlas por su nombre, obispos y pastores están en sintonía con “muchas otras iniciativas que exigen el fin de tanta violencia en el país”, manifestando un signo de esperanza para cambiar esta realidad como fruto de la reconciliación recordando, además, la responsabilidad de las autoridades para garantizar la paz y seguridad en México.

Cabe recordar que el 10 de junio de 2021, en el templo expiatorio a Cristo Rey, Antigua Basílica de Guadalupe, convocados por el nuncio apostólico Franco Coppola, representantes de comunidades religiosas realizaron una jornada de oración ofreciendo veladoras como signo de la solicitud por la paz. Asistieron las iglesias ortodoxas, anglicana y luterana, además de las comunidades evangélicas sin Arturo Farela.

Firmaron la declaración “Paz y Bien para México”, Ramón Castro Castro, secretario de la Conferencia del Episcopado Mexicano; elpastor Cirilo Cruz Lázaro, presidente de la Confraternidad Evangélica de México; el doctor Benjamín Rivera Leos del Centro Familiar Cristiano de México, AR; doctor Juan Ramírez Mayer del Ministerio Casas de Dios México, AR; pastor Pedro Ramírez Pérez, presidente de la Convención Regional Bautista Central, AR; el presbítero José Obed López Bandera de Iglesia Nacional Presbiteriana y  el pastor Rubén Sánchez Vázquez Iglesia Evangélica Independiente en la República Mexicana.

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