«No siga este camino de apoyar el aborto. Son una secta de la muerte, odian a Dios, odian a Estados Unidos y están a favor de matar bebés»: le advirtió Alex Stone advirtió al candidato presidencial republicano.
Donald Trump declaró en Truth Social que su esperanzadora próxima administración presidencial “ será excelente para las mujeres y sus derechos reproductivos” en lo que parece ser una de sus más fuertes afirmaciones de apoyo al aborto hasta la fecha.
El término “derechos reproductivos” se utiliza abrumadoramente para referirse al llamado “derecho” a matar niños no nacidos a través del aborto y podría hipotéticamente referirse también a un “derecho” a la fertilización in vitro (FIV), que en la práctica mata incluso más seres humanos que el aborto porque elimina el exceso de bebés embrionarios que crea.
Algunos conservadores han denunciado, explícita o implícitamente, los comentarios del ex presidente como un aparente acto de homenaje al lobby del aborto.
“No existe ningún ‘derecho reproductivo’ a matar a un niño”, comentó la activista pro vida Lila Rose en X.
Alex Stone, sobrino del operador político estadounidense Roger Stone, ha instado a Trump:
No sigas ese camino de apoyar el aborto… Son un culto a la muerte, odian a Dios, odian a Estados Unidos y están a favor de matar bebés”.
Si sigues ese camino, alejarás a muchos votantes”, dijo Stone.
El profesor de filosofía Edward Feser consideró que estas declaraciones eran indicativas de un “unipartidismo”.
Las concesiones de Trump al letal movimiento pro-aborto se han vuelto cada vez más claras en los últimos dos años.
Recientemente declaró de manera definitiva que si regresa a la Casa Blanca, no usará la ley federal existente para bloquear la distribución por correo de píldoras abortivas.
También ha dado señales de su deseo de cerrar la puerta a la prohibición del aborto a nivel nacional en favor de relegar futuras batallas por el aborto a los estados, al tiempo que expresa indiferencia ante las políticas que estos adopten en última instancia, salvo para reprender ocasionalmente las acciones pro-vida que considera demasiado “duras”.
El mes pasado, en su convención de nominación de 2024, el Partido Republicano adoptó una plataforma drásticamente acortada, redactada y promovida por los representantes de Trump, que, entre otros cambios, recortó el antiguo apoyo del partido a una enmienda constitucional para prohibir el aborto y una ley federal que extiende la protección igualitaria a los bebés no nacidos a favor de dejar la política del aborto a los estados individuales; también respaldó el control de la natalidad (muchos de los cuales funcionan como abortivos ) y la fertilización in vitro que destruye embriones .
En junio, Trump reiteró su oposición a una prohibición federal del aborto y una vez más enfatizó que cualquier prohibición a nivel estatal debería, en su opinión, contener excepciones para casos de violación, incesto y emergencias médicas.
Por EMILY MANGIARACINA.
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