* Aunque decenas de miles de judíos rechazan por completo el sionismo, los rabinos fundamentalistas que llaman abiertamente al genocidio de los palestinos, incluidos los niños, no son tan raros como uno desearía, como tampoco lo es su influencia.
Detrás de los horribles informes sobre miles de niños que son blanco de asesinatos, inanición y muerte por parte del ejército israelí durante su ataque genocida contra más de dos millones de palestinos en Gaza, se encuentra una ideología que la mayoría de los occidentales pueden encontrar difícil de creer: rabinos de sectas judías sionistas extremistas que aconsejan e incluso exigen que los soldados israelíes ataquen y maten a todos los niños, mujeres y hombres de la Franja de Gaza.
“La ley fundamental en una guerra religiosa, y en este caso en Gaza, es ‘no perdonar a nadie’”, instruyó el rabino Eliyahu Mali en marzo del año pasado. “La lógica es muy clara: si no los matas, intentarán matarte”.
Mali impartía una conferencia a un grupo de estudiantes matriculados en su academia de Jaffa, que combina el estudio de textos religiosos con el servicio militar israelí. «Los terroristas de hoy son los hijos de la operación [militar] anterior que los dejó con vida. Las mujeres son, esencialmente, quienes están produciendo a los terroristas», propuso.
“Eres tú o ellos. Y en realidad, ‘no perdones a nadie’ se basa en la doctrina que dice: ‘Si alguien viene a matarte por la tarde, mátalo por la mañana’” (Talmud de Babilonia), continuó. “Y quien ‘viene a matarte’ aquí, en sentido amplio, no es la persona de 18, 16, 20 o 30 años, quien te apuntó con su arma, sino también la siguiente generación, y también quienes dan a luz a la siguiente generación, porque en realidad no hay diferencia”.
En respuesta a la pregunta de un estudiante sobre cómo relaciona esta directiva con las personas mayores, Mali dijo: «Por cierto, no existe la inocencia; el anciano es capaz de portar un rifle y disparar. Por lo tanto, el concepto de la Torá es muy claro en la sentencia».
Cuando le preguntaron: «¿También hay que matar a los niños?», el rabino respondió: «Lo mismo, y eso es porque no se puede ser astuto con la Torá. Cuando la Torá dice: ‘No perdones a nadie’, entonces no debes perdonar a nadie».
“Hoy es un joven y mañana es un combatiente. Los combatientes, o aquellos a quienes llamamos saboteadores, que hoy tienen 18 años, tenían ocho en la guerra anterior”, dijo. “Por lo tanto, no deben dejar de matar”.
Rabino: “No existe ninguna prohibición moral contra el asesinato indiscriminado de civiles”
Aunque muchas decenas de miles de judíos rechazan el sionismo en su conjunto, y al menos algunos incluso califican de “ satánico ” al movimiento religioso militante , y muchos miles más rechazan también por completo el actual genocidio “ sádico ” de Israel , esas opiniones fundamentalistas —como las expresadas por Mali— no son tan raras como uno esperaría, ni tampoco su influencia.
De hecho, como lo expresó el historiador israelí Benny Morris, la noción de expulsar a todos los palestinos de su tierra “es tan antigua como el sionismo moderno y ha acompañado su evolución y praxis durante el siglo pasado”.
Y a finales de la década de 1930, David Ben-Gurion, que se convirtió en el primer primer ministro de Israel, declaró que tales expulsiones de la población nativa requerirían una “compulsión brutal”, que se ejerció por primera vez durante la Nakba de 1948 , cuando el ejército israelí obligó a más de 700.000 palestinos a huir para salvar sus vidas, abandonando sus hogares, tierras y medios de vida, al tiempo que les impedía el regreso.
Para formar los tipos de soldados que puedan estar dispuestos a ejecutar tales objetivos, que violan la moralidad fundamental del sentido común, se ha empleado durante algún tiempo un imprimatur “rabínico” de ciertas corrientes violentas del sionismo religioso.
Ya sea la exigencia obscenamente injusta de un rabino de que una ciudad de Cisjordania fuera “borrada de la faz de la tierra” en 1988, o un ex rabino jefe de alto rango que aconsejó al primer ministro de la nación que “no había absolutamente ninguna prohibición moral contra el asesinato indiscriminado de civiles” durante una posible ofensiva militar sobre Gaza en 2007, ese extremismo violento ha fomentado atrocidades inadmisibles en la región durante 77 años.
El método judío: destruir sus lugares sagrados. Matar a hombres, mujeres y niños.
En 2009, el rabino de Jabad-Lubavitch, Manis Friedman, articuló los mismos principios que Mali cuando se le preguntó cómo los judíos en Israel deberían tratar a sus vecinos árabes.
No creo en la moral occidental”, escribió.
La única manera de librar una guerra moral es a la manera judía: destruir sus lugares sagrados. Matar a hombres, mujeres y niños (y ganado)”.
Después de recibir importantes críticas, Friedman, un destacado autor de best-sellers de Minnesota, se retractó de su declaración afirmando que tales medidas sólo podrían tomarse en «defensa propia».
Sin embargo, al menos una crítica judía del movimiento Jabad, Shmarya Rosenberg, dijo en ese momento: “Lo que está diciendo es la visión normal y estándar de un Jabadnik… Simplemente no lo dicen en público”.
En 2018, a puerta cerrada, mientras instruía a jóvenes futuros soldados israelíes, otro rabino llamado Ophir Wallas instruyó que, como judíos, se les permitía exterminar al pueblo palestino, a «todos», para arrebatarles su territorio. Y solo el temor a una represalia internacional masiva impidió tal acción, hasta que, aparentemente, llegó un momento más oportuno.
El rabino «Gobernante de Israel» promueve el genocidio y la limpieza étnica: «Maten a todos sus hijos».
En 2010, rabinos sionistas religiosos extremistas asociados con el movimiento Kach , fundado por el difunto rabino Meir Kahane , publicaron un libro titulado La Torá del Rey que buscaba proporcionar un tipo de justificación religiosa para las atrocidades genocidas contra los civiles palestinos, incluidos los niños.
En el texto, que un tabloide israelí describió como un manual para el «terrorismo judío», los rabinos coautores Yitzhak Shapira y Yosef Elitzur escribieron que el quinto mandamiento , «No matarás», se aplica solo «a un judío que mata a otro judío». El libro también sanciona el asesinato de no judíos, incluidos los niños y bebés de los enemigos de Israel, ya que «es evidente que con el tiempo nos harán daño».
Sin describir cómo conoce el futuro de los niños no judíos, el rabino Yosef Mizrachi, del estado de Nueva York, explica esta idea: «No tengan piedad de los niños. Maten también a todos sus hijos. ¿Por qué? No hay diferencia entre ellos y sus hijos. Dentro de diez años, estos niños los atacarán en el camino».
El destacado colono israelí, el rabino Dov Lior, descrito por Middle East Eye como el líder espiritual de toda la coalición política del sionismo religioso extremista de Israel que se convirtió en parte del actual gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu en 2022, brindó apoyo por escrito a La Torá del Rey en 2011.
Uno de los discípulos de Lior, Baruch Goldstein, también asesinó a 29 palestinos inocentes en una mezquita de Hebrón en 1994. El rabino de alto rango, cuya influencia es tan prominente que ha sido apodado el » Gobernante de Israel «, elogió después a Goldstein como «más santo que todos los mártires del Holocausto».
Durante la invasión israelí de Gaza en 2014, Lior emitió una sentencia religiosa que parece profética. El pronunciamiento del rabino afirmó que era moralmente permisible para Israel destruir toda la Franja de Gaza, incluido el exterminio de la población civil.
Israel tiene «permiso para castigar a la población enemiga con las medidas que considere adecuadas, como bloquear el suministro o la electricidad. Puede bombardear toda la zona», escribió , añadiendo que se permitían «medidas disuasorias para exterminar al enemigo».
Tras las declaraciones de indignación de los líderes más moderados de la época, Lior redobló sus esfuerzos más tarde ese mismo año reafirmando el objetivo sionista previamente declarado por Ben-Gurion de limpiar étnicamente a todos los palestinos de la tierra y diciendo que la región debe estar «limpia de árabes».
Tras una crítica a Lior por parte de un miembro de la Knéset en 2013, apareció un anuncio en el periódico israelí Haaretz con una declaración elogiosa de apoyo al «gran rabino Lior», llamándolo «maestro de decenas de miles» y atacando a sus críticos en la Knéset. La declaración estaba firmada por «105 rabinos importantes».
Los sionistas religiosos radicales comienzan a tomar el poder en Israel
Así, el movimiento racista extremista Kach, que aboga por la expulsión violenta del pueblo palestino de sus tierras reconocidas internacionalmente, ha ido mostrando un crecimiento político constante desde sus inicios, cuando era considerado marginal e incluso designado organización terrorista por el Estado de Israel en 1994.
A medida que más colonos sionistas radicales han emigrado a Israel, los sentimientos de esta ideología han cobrado cada vez mayor relevancia entre los líderes políticos, incluyendo a los miembros de la Knéset. En 2014, la ministra de justicia israelí, Ayelet Shaked, acaparó titulares al describir a toda la población palestina como «el enemigo» y llamar a una guerra genocida total contra ellos.
En 2018, durante una manifestación no violenta de los habitantes de Gaza, en la que francotiradores israelíes dispararon y mataron a 183 personas, incluidos niños , hiriendo al menos a 1.600 palestinos más, el ministro de Defensa israelí, Avigdor Lieberman, defendió las acciones de su ejército afirmando que no hay «personas inocentes en Gaza», relegando a toda la población civil a objetivos militares legítimos.
Rabino: Los cristianos son ‘vampiros chupadores de sangre’, las iglesias deberían ser incendiadas
En 2022, el movimiento Kach pareció cruzar un nuevo umbral de poder cuando uno de sus antiguos participantes, el miembro del Knesset Itamar Ben-Gvir , se unió al gobierno de coalición de Netanyahu y asumió el cargo de Ministro de Seguridad Nacional de la nación, a pesar de haber sido condenado en el pasado por al menos ocho cargos, incluido el apoyo a una organización terrorista que inicia violentos ataques racistas contra los palestinos.
Aunque su inspiración espiritual, el rabino Meir Kahane, se refería a los palestinos como «perros» que «deben quedarse quietos o largarse», Ben-Gvir también exhibió un retrato del terrorista judío asesino en masa Goldstein en su casa hasta que se involucró en la política. También se le cita considerando a Kahane un «santo».
En un servicio conmemorativo de 2022 para Kahane, el entonces futuro Ministro de Seguridad Nacional compartió un podio con el rabino Lior y otros, incluido el rabino Bentzi Gopstein, quien ha llamado a los cristianos » vampiros chupadores de sangre «, exigió su expulsión de Tierra Santa y abogó por la quema de iglesias
A la coalición de Netanyahu también se unió otro residente de un asentamiento ilegal en Cisjordania, el líder del partido Sionismo Religioso, Bezalel Smotrich , quien asumió el cargo de ministro de Finanzas. Ha proclamado que su misión en la vida es desafiar la voluntad de la abrumadora mayoría de los gobiernos nacionales del mundo frustrando la solución de dos Estados, ofreciendo a los palestinos tres opciones: residencia sin derecho a voto, migración o muerte.
Se confirma la influencia rabínica radical sobre políticos israelíes tras el ataque del 7 de octubre
Tras el ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023 contra territorio controlado por Israel fuera de la Franja de Gaza, el aparente trasfondo de estas opiniones genocidas emergió rápidamente entre diversos líderes políticos israelíes. En una ocasión, Smotrich afirmó en voz alta que sería «correcto y moral» dejar morir de hambre a los dos millones de palestinos (un millón de niños) en Gaza.
De hecho, desde el inicio de esta campaña genocida, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, cometió un crimen de guerra internacional al ordenar «un asedio total a Gaza… No habrá electricidad, ni comida, ni agua, ni combustible. Todo estará cerrado. Luchamos contra animales humanos y actuamos en consecuencia».
Un mes después, proponiendo una justificación para este genocidio, el rabino Meir Maroz reafirmó esta deshumanización diciendo: “Si ellos [la gente de Gaza] fueran humanos, les habríamos enviado ayuda humanitaria… pero esto es sobre animales”.
Netanyahu también evocó infamemente una analogía bíblica sobre los enemigos de los hebreos, que fue ampliamente interpretada como un llamado genocida a destruir al pueblo palestino en Gaza. «Deben recordar lo que Amalec les ha hecho —dice nuestra Santa Biblia—; nosotros sí lo recordamos», declaró durante una declaración oficial en video.
El presidente israelí, Isaac Herzog, afirmó: «No hay civiles inocentes en Gaza… Es toda una nación la responsable». El miembro de la Knéset, Tally Goltiv, exigió:
«¡Derriben los edificios! ¡Bombardeen sin distinción! ¡Sin piedad!».
“Son animales, no tienen derecho a existir”, declaró el ministro de educación israelí, Yoav Kisch. “No debe haber límites a la respuesta. Lo he dicho un millón de veces: hasta que veamos a cientos de miles de personas huyendo de Gaza, las Fuerzas de Defensa de Israel no habremos cumplido nuestra misión”.
“Eliminen Gaza. Nada más nos satisfará”, dijo el vicepresidente de la Knéset, Nissim Vaturi. “No dejen a ningún niño allí, expulsen a cualquiera que permanezca allí cuando termine, para que no se restablezcan”.
Numerosas declaraciones genocidas de líderes israelíes fueron documentadas en numerosos informes oficiales , demostrando la intención de la nación de cometer genocidio, el peor de los crímenes internacionales. Este crimen fue definido por la Convención sobre el Genocidio de 1948, de la cual Israel sigue siendo signatario .
Soldados formados por rabinos radicales, miles de niños ‘atacados por francotiradores’, ‘incinerados’, ‘destrozados’, ‘aplastados por edificios’
La influencia de esta interpretación rabínica radical y violenta de la Torá también ha tenido naturalmente su impacto tanto en el ejército israelí como en la población nacional más amplia.
Debido en parte al establecimiento de academias premilitares (mechinot) como la de Mali, donde los estudiantes asisten a ciertos cursos de religión utilizando la Torá y el Talmud (programa Hesder), un número desproporcionado de tropas de combate y oficiales del ejército israelí se identifican como sionistas religiosos.
A pesar de representar solo entre el 12% y el 14% de la población judía israelí en general, los sionistas religiosos constituyen alrededor del 40% de los graduados de las escuelas de infantería del ejército israelí. Esto representa un aumento de aproximadamente 15 veces desde principios de la década de 1990, cuando esta cifra era de tan solo el 2,5%, muy inferior a la de los israelíes judíos de origen secular. Además, se informa que el 88% de los graduados de Hesder prestan servicio en combate, en comparación con el promedio nacional del 30%.
Dado el tipo de entrenamiento que evidentemente recibían en estos programas Hesder, que establecía que los soldados no debían “perdonar a nadie” y “matar a hombres, mujeres y niños”, quizá no debería sorprender que, en julio pasado, cuarenta y cinco médicos, cirujanos y enfermeros estadounidenses —que habían sido voluntarios en Gaza desde octubre de 2023— escribieran en una carta dirigida a Joe Biden que “cada uno de nosotros trataba a diario a niños preadolescentes que recibían disparos en la cabeza y el pecho”.
“Ningún niño pequeño recibe dos disparos por error del ‘mejor francotirador del mundo’”, comentó uno de los firmantes de la carta, el Dr. Mark Perlmutter. En su testimonio, afirmó que todos los desastres que había presenciado a lo largo de treinta años y cuarenta misiones médicas, en conjunto, no alcanzaban el nivel de matanza que presenció contra civiles en tan solo mi primera semana en Gaza.
El médico residente en Carolina del Norte afirmó además que las víctimas de tal masacre son «casi exclusivamente niños». Su testimonio incluye haber visto a decenas de niños «incinerados», «destrozados», «con partes del cuerpo desprendidas» y «aplastados por edificios», junto con otros relatos que confirman muertes por inanición .
Informes fiables sobre muertes palestinas desde el 7 de octubre de 2023 indican al menos 48.388 muertos en Gaza, aproximadamente 14.564 niños, 111.803 heridos y más de 10.000 niños que han perdido al menos una pierna . Estas cifras no incluyen a las aproximadamente 11.000 personas desaparecidas y presuntamente muertas bajo los escombros.
Según un fundamento presentado en un estudio de Lancet en julio pasado, se puede estimar de manera conservadora que el total de muertes, incluyendo las muertes indirectas debidas a causas como el hambre, la falta de medicamentos o atención médica adecuada, es de 241.940 (106.453 niños).
La población judía israelí en general está de acuerdo con la agenda de los rabinos radicales
Con los colonos sionistas religiosos y sus hijos participando directamente en el bloqueo de la ayuda humanitaria a Gaza como un intento de matar de hambre a sus 2 millones de habitantes, las encuestas han demostrado durante este período que la población israelí en general está de acuerdo con ellos en su deseo de exterminar a la población de Gaza, el 70% de la cual es considerada como refugiada según la ONU, habiendo sobrevivido a desplazamientos violentos previos por parte de los israelíes en 1948 y 1967.
A pesar de los horrendos bombardeos de Israel en la Franja de Gaza, con el mundo inundado de imágenes de barrios enteros destruidos, hombres levantando los cadáveres de sus hijos ensangrentados y destrozados de los escombros y hospitales sucios y frenéticos tratando a pacientes con miembros faltantes, una encuesta de la Universidad de Tel Aviv de finales de octubre de 2023 encontró que el 58 por ciento de los judíos israelíes dijo que el ejército estaba usando muy poca potencia de fuego en su asalto a Gaza, y menos del 2 por ciento dijo que era demasiada.
Otra encuesta realizada en diciembre de 2023 preguntó: «¿Hasta qué punto debería Israel tener en cuenta el sufrimiento de la población civil en Gaza al planificar la continuación de los combates allí?». Más del 80 % de los israelíes judíos respondió: «En muy poca medida» o «Bastante poca» (40 % y 41 %, respectivamente).
Además, en enero de 2024, una encuesta del Canal 12 israelí encontró que el 72% de los israelíes cree que la ayuda humanitaria a los 2 millones de civiles de Gaza, incluido 1 millón de niños, “debe detenerse hasta que Hamás libere a los prisioneros israelíes”.
El equivalente a cinco bombas atómicas lanzadas sobre Gaza con la aprobación ciudadana, Israel es un «estado satánico»
Para abril, Israel había lanzado más de 70.000 toneladas de explosivos sobre Gaza, superando el tonelaje lanzado durante la Segunda Guerra Mundial sobre Dresde, Hamburgo y Londres juntas. Se estima que estos ataques han dañado o destruido el 69% de las estructuras de Gaza, incluyendo al menos 245.000 viviendas .
Además, la capacidad explosiva de las bombas atómicas lanzadas sobre Hiroshima y Nagasaki equivalía a unas 15.000 toneladas de TNT cada una, lo que significa que Israel ya había lanzado el equivalente a casi cinco bombas atómicas en Gaza en ese momento.
Sin embargo, aun cuando esta destrucción masiva y el número astronómico de muertos se agravaban cada día, una encuesta de Pew Research de mayo de 2024 arrojó números comparables a encuestas anteriores: un 34% de los encuestados israelíes seguían diciendo que la respuesta militar de Israel contra los palestinos en Gaza no había ido lo suficientemente lejos , un 39% decía que había sido adecuada y solo un 19% creía que había ido demasiado lejos.
Finalmente, el mes pasado, el presidente Donald Trump sorprendió al mundo cuando, durante una conferencia de prensa con Netanyahu, anunció su plan para que Estados Unidos se apodere de la Franja de Gaza y la convierta en un gran balneario. Este plan incluía la intención del presidente de realizar una limpieza étnica permanente de dos millones de palestinos de su territorio natal reconocido internacionalmente, cumpliendo así el objetivo sionista de larga data de expulsión masiva, un grave crimen de guerra.
A pesar del rechazo abrumador al plan por parte de prácticamente todo el resto del mundo, una encuesta realizada en febrero entre adultos israelíes por el Canal 12 local encontró que un 68% de los encuestados apoyaba el criminal plan de limpieza étnica de Trump, mientras que el 20% se oponía y el 12% decía no estar seguro.
Al reflexionar no sólo sobre las declaraciones de los dirigentes israelíes en apoyo a fines genocidas en Gaza y las operaciones del ejército israelí para ejecutar tales objetivos, sino también sobre los altos niveles de apoyo al genocidio entre los ciudadanos de esa nación, el erudito judío sobre Oriente Medio Norman Finkelstein concluyó a regañadientes hace más de un año que Israel es “un estado satánico”.
¿Son las opiniones de las sectas sionistas radicales normativas para importantes sectores de la diáspora judía?
Si bien los desvaríos de rabinos extremistas como Mali, Friedman, Wallace y Lior a menudo se han desestimado como perspectivas marginales con poca influencia, el impacto resultante de estas sectas judías sionistas fundamentalistas no puede subestimarse. Estos horrendos efectos sobre la población general, el ejército y los líderes políticos de Israel han cobrado gran relevancia desde el 7 de octubre de 2023, ante la mirada del mundo entero.
Y estas ideas generalizadas parecen prevalecer también en la diáspora judía. Por ejemplo, un destacado rabino jefe de San Luis, Misuri, llamado Jeffrey Abraham, fue criticado a principios de mes por una publicación en redes sociales en la que afirmaba que «no hay civiles inocentes en Gaza», que «todos los habitantes de Gaza son Hamás» y coincidía con la deshumanizante afirmación de que los gazatíes son «animales. Punto. Punto».
“Es este tipo de retórica deshumanizante la que usaron los nazis para justificar el asesinato en masa de judíos europeos en la década de 1940 y las milicias hutus para justificar el asesinato en masa de tutsis en Ruanda en la década de 1990”, escribió el residente local Michael Berg. “Y ahora, en St. Louis, se usa este mismo lenguaje para justificar el asesinato en masa de palestinos”.
Berg criticó a varias organizaciones judías que se abstuvieron de discrepar con Abraham, afirmando además que ningún rabino de San Luis emitió una declaración en su contra. «Solo se puede concluir que quienes se consideran líderes de la comunidad judía establecida apoyan las ideas genocidas de Abraham, o al menos las consideran parte del espectro aceptable de las opiniones judías oficiales», concluyó.
Doble rasero de los medios: caracterizan a los palestinos con una frase obsoleta mientras ignoran simultáneamente una plétora de directivas genocidas de los líderes israelíes.
Si bien en la carta original de Hamás de 1988 se incluyó una referencia severamente antisemita , llamando a los musulmanes a “luchar contra los judíos (matar a los judíos)”, la revisión de la Carta de 2017 de la organización efectivamente rechazó este lenguaje y más bien aclaró :
Hamás afirma que su conflicto es con el proyecto sionista, no con los judíos por su religión. Hamás no lucha contra los judíos por ser judíos, sino contra los sionistas que ocupan Palestina. Sin embargo, son los sionistas quienes constantemente identifican al judaísmo y a los judíos con su propio proyecto colonial y su entidad ilegal.
Aunque las estrategias de relaciones públicas sionistas enfatizan el uso de un único pasaje obsoleto de la carta anterior como “oro” de propaganda, repitiéndolo “ una y otra vez ” en los medios occidentales para generar simpatía en sus audiencias occidentales, puede ser útil considerar el contraste y plantear una pregunta.
Mientras que el ejército israelí aparentemente tiene en la mira a niños , mujeres y ancianos para matarlos en la Franja de Gaza, con el celoso apoyo de su población judía sionista, las enfáticas voces de sus líderes políticos y el estímulo específico -con sanción espiritual- de un gran número de sus líderes rabínicos, los medios de comunicación tradicionales tal vez deseen considerar si tales llamados a la muerte genocida de decenas de miles de niños pueden ser dignos de un poco más de cobertura mediática, especialmente para los contribuyentes estadounidenses que se han visto obligados a financiar estos crímenes.
Mientras tanto, Israel reanudó su bloqueo total de la ayuda humanitaria a Gaza el 5 de marzo y el martes reinició sus bombardeos a gran escala contra familias desplazadas, matando al menos a 404 palestinos, incluidos 174 niños, 89 mujeres y 32 ancianos.
Por PATRICK DELANEY.
MIÉRCOLES 19 DE MARZO DE 2025.
LIFESITENEWS.
