Ante los problemas de salud, económicos y de seguridad que se presentan en la sociedad en el marco de la emergencia sanitaria por el coronavirus, la deuda que tienen los seres humanos es la del amor, aseguró el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa.
Al encabezar la misa dominical en la Catedral de Puebla, edificio religioso que permaneció con hasta 30 por ciento de su afluencia, Sánchez Espinosa resaltó la importancia de generar cadenas de apoyo entre las personas en tiempos complicados.
“Nos hacen la invitación a cada uno de nosotros a mantenernos fieles. La única deuda que tenemos para con nuestros hermanos, es la del amor. Es fácil pagar esta deuda porque el amor es un don gratuito que debe formar parte de la identidad. No tengas con nadie otra deuda que la del amor mutuo”, apuntó.
Ante los tiempos difíciles que enfrentan las familias en los temas de la salud, la economía y la seguridad, la alternativa se encuentra en la unidad y en el amor para superar las complicaciones, explicó el líder de la grey católica.
Los principios y valores que deben seguir los seres humanos como el respeto a los demás, así como los mandamientos relacionados con no matar, no robar y no codiciar, se resumen en el amor, comentó el arzobispo poblano.
“No cometerás adulterio, no robarás, no matarás, no darás falso testimonio, no codiciarás y todos los demás mandamientos que conocemos, se resumen en el amor”, apuntó.
Para Sánchez Espinosa es fundamental impulsar el principio del amor entre las personas para salir de momentos complicados como los que se presentan ante la emergencia de coronavirus.
Por otra parte, al aumentar al 50 por ciento el numero de parroquias que abrieron sus puertas en Tehuacán este domingo después de casi cuatro meses de estar cerradas, las medidas sanitarias se mantienen y se cuida que los asistentes a las misas sean el 30 por ciento de la capacidad de los templos y todos cumplan con las indicaciones giradas por las autoridades de salud, informo el portavoz de la diócesis, José Santos Méndez.
Con información de Milenio/Jaime Zambrano y Apolonia Amayo
