* Monseñor Shomali: «Va en contra de la libertad de conciencia».
Dos influyentes diputados de la derecha religiosa y supremacista israelí han propuesto una ley que criminaliza cualquier intento de dar testimonio de la vida de Jesús y de sus enseñanzas, y por tanto del Evangelio, condenando a los transgresores a penas de uno a dos años.
Israel ya prohíbe a los cristianos hacer proselitismo con menores, pero este nuevo proyecto de ley irá aún más lejos y «prohibirá cualquier intento de hablarle a la gente sobre Jesús» en la tierra donde Jesús nació y donde el cristianismo tiene sus raíces.
Los dos parlamentarios son Moshe Gafni, presidente del Comité de Finanzas de la Knesset, miembro del Comité de Asuntos Exteriores y Defensa y del Comité Conjunto de Presupuesto de Defensa, y Yaakov Asher encabeza el Comité de Interior y Medio Ambiente. Ambos están cerca del ala judía ultraortodoxa.
Se trata de una norma que » va contra la libertad de conciencia » incluso antes que la libertad de religión y es » contraria al artículo 18 » de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, comentó mons. William Shomali , vicario general del Patriarcado Latino de Jerusalén.
Un texto – subraya el prelado – que va en contra de la libertad de conciencia » en un sentido, porque en el pasado » ha habido muchos casos de cristianos, sobre todo procedentes de naciones de la antigua Unión Soviética, que se convirtieron en judíos » por convicción o por conveniencia y a nadie se le ha ocurrido proponer un texto reglamentario para impedirlo.
La semana antepasada, dos miembros de la Knesset, el Parlamento israelí, presentaron un proyecto de ley que prohíbe expresamente la evangelización. Para los infractores, si se aprueba, existen penas de prisión de hasta un año.
El texto habla de «grupos de misioneros, principalmente cristianos» que son los primeros afectados por el dispositivo; excluye la posibilidad incluso de «hablar pacíficamente» para intentar «persuadir o convertir» a una persona «de otra fe» mediante «conversaciones cara a cara», pero también mediante «correo o vídeos en línea».
En el código israelí ya existía una especie de ley » antimisionera » que » castigaba a un cristiano considerado culpable de proselitismo «, subraya mons. Shomalí .
Estaba dirigida – continúa – a quienes pretendían bautizar a un judío, especialmente si este último tenía intereses económicos o laborales dentro de la institución en la que se produjo la conversión. El ejemplo es el de un empleado judío de un hospital católico, que se convierte «.
“ Ahora – añade – la ley se consolidaría, reforzaría y castigaría cualquier actividad aunque no existan vínculos, además de duplicar la pena y aplicarse no sólo a los cristianos ”.
Entre las voces más críticas del proyecto de ley se encuentran los cristianos evangélicos estadounidenses, uno de los grupos más fuertes e influyentes que apoyan a Israel en Estados Unidos. Esta es también la razón por la que el primer ministro Benjamín Netanyahu se apresuró a publicar ayer por la tarde un comunicado en Twitter en el que aseguraba que la ley no será aprobada, a pesar de provenir de un destacado aliado del gobierno. El riesgo de antagonizar una nueva porción del consenso en Estados Unidos, donde las relaciones con la Casa Blanca no son espléndidas, es demasiado alto.
Según All Israel News, el primer objetivo es «hacer ilegal» que los seguidores de Jesús expliquen por qué se le considera «el Mesías y Dios» con la «esperanza» de que «los israelíes consideren seguirlo». El texto, titulado «Prohibición de solicitar la conversión religiosa», modificaría la legislación penal israelí desde 1977 previendo hasta «un año de prisión» en caso de intento de «conversión», pena que se eleva a dos años». si la persona es menor de edad.»
La ley impide efectivamente cualquier forma de evangelización en Tierra Santa, partiendo «de una simple conversación que tenga a Jesús como objeto» hasta, ampliando el campo, la producción y publicación de vídeos, artículos u otros medios de comunicación que expliquen el Evangelio.
Lo que es preocupante – continúa Mons. Shomali – es el clima general » que se siente en Tierra Santa en las últimas semanas.
La violencia, las muertes, ya son 14 en el frente israelí y más de 85 entre los palestinos, una cifra que va en aumento. La violencia engendra violencia, un círculo vicioso que provoca represalias en ambas partes. La esperanza – advierte – es que no veamos una nueva escalada durante el Ramadán , el mes sagrado del ayuno y la oración.
Vamos – afirma el vicario patriarcal – hacia tiempos difíciles, pero rezamos y esperamos ”. El primer paso es » una solución justa » para la cuestión palestina y para Jerusalén, luego la esperanza » es que los peregrinos sigan llegando, porque son un elemento esencial para nuestra vida». Perder este flujo – concluye – sería negativo para todos, no sólo para los cristianos «.
CIUDAD DEL VATICANO.
MIL.
