* Desde que la política de los muy cristianos reyes franceses viró decididamente hacia la excomunión de la Masonería, ha sido toda una Revolución.
* Una observación parece imponerse: el intento de erradicar su alma católica de Francia ha dado a luz a una nación sin alma que, a veces, se estremece.
Desde que la política de los muy cristianos reyes franceses viró decididamente hacia la masonería excomulgada (ver ese mueble parlante que es el «escritorio del rey» hecho para Luis XV), desde entonces, a partir de la revolución de 1989 hecha en nombre del trinomio Liberté, fraternité, égalité masónica , siguiendo con Napoleón, la revolución de julio del ’30, la legendaria del ’48, la Comuna del ’70, hasta la ley de separación Estado-Iglesia promulgada por la tercera república en 1905, Francia ha sido, es, toda una Revolución .
En Vehementer nos, del 11 de febrero de 1906, Pío X habla del «odio» contra la Iglesia propio de las «sectas impías que inclinan la cabeza bajo su yugo» con la intención declarada de «descatolizar a Francia». Las conclusiones del Papa Sarto son proféticas:
«Además del daño que ocasiona a los intereses de la Iglesia, la nueva ley será también muy dañina para vuestro país. De hecho, no hay duda de que arruina dolorosamente la unión y armonía de las almas sin la cual unión y armonía ninguna nación puede vivir y prosperar. En mayo de 1940, Hitler llegó a Bayona en 21 días.
En la segunda posguerra, a partir del legendario 68 , de salto en salto, llegamos a la devastación de estos días.
La luz de las logias está siempre en el poder. El presidente Hollande visita el Grand Orient de France tanto antes de su elección como al final de su mandato. En enero de 2012 afirmaba:
«Si crees, como en mi caso, en la República, en un momento determinado tienes que pasar por la masonería»
El 27 de febrero de 2017 establece una correspondencia uno a uno entre las logias y la república:
«La República sabe cuánto os debe y vosotros estaréis siempre dispuestos a defenderla […] Quien quisiera atacar a la Masonería atacaría La Republica«.
En el 500 aniversario de la Reforma, el 22 de septiembre de 2017 , el actual presidente Macron se dirigió a una asamblea de protestantes así:
«Necesitamos que sigan velando por nuestra República, siendo siempre su vanguardia filosófica, moral y política».
«El espíritu crítico que caracterizó a la República y el espíritu de la Ilustración son gemelos de la hermenéutica permanente a la que se refieren los protestantes».
«Francia se ha nutrido del liberalismo político que está en el corazón de vuestra doctrina».
«Usted sabe bien que las leyes de 1905 fueron promovidas en gran parte por los protestantes».
Una observación parece imponerse: el intento de erradicar de Francia su alma católica, ha dado a luz a una nación sin alma que, a veces, se estremece.
Por Ángela Pellicciari.
Martes 4 de julio de 2023.
lanuovabq.
