La defensa del exobispo de Orán, Gustavo Zanchetta, pidió la prisión domiciliaria para el religioso, que permanece detenido en la cárcel de Orán por abuso sexual a dos jóvenes que se formaban para ser sacerdotes.
El requerimiento aún no tuvo resolución en el juzgado a cargo de la causa y trascendió que propusieron dos posibles domicilios para alojarlo pero que, por ahora, sigue en el penal.
Zancheta fue condenado en marzo a la pena de cuatro años y seis meses de prisión efectiva por ser autor del delito de abuso sexual simple continuado agravado por ser cometido por un ministro de culto religioso reconocido, en perjuicio de G.G. y de M.C..
Inicialmente lo habían alojado en una dependencia policial del barrio Taranto hasta que hubiera lugar en la unidad carcelaria número tres de Orán, donde permanece actualmente. Ahora su defensa intenta que lo dejen cumplir con su pena en una vivienda particular y se espera conocer si la Justicia la concede este beneficio.
Zanchetta fue condenado por la Sala II del Tribunal de Juicio. Durante el debate, varios testigos complicaron la situación del religioso, ya que de sus testimonios surgió que tenía tratos inapropiados con algunos seminaristas que se estaban preparando para ser sacerdotes cuando él estaba a cargo de la diócesis del norte provincial.
La denuncia en su contra se originó luego de que le encontraron fotos con contenido pornográfico en su teléfono celular. Es el primer religioso de su jerarquía en ir a la cárcel por abuso sexual.
EL TRIBUNO.
BUENOS AIRES, Argentina.