La peregrinación anual en rito romano a la Ciudad Eterna a finales de octubre fue «un verdadero milagro», con más fieles de nuevo, declaró Christian Marquant a PaixLiturgique.com (6 de noviembre).
Está convencido de que, pase lo que pase, el antiguo rito romano seguirá vivo.
Durante la peregrinación de este año, se canceló la misa del sábado por la mañana (26 de octubre) en la basílica de los santos Celso y Juliano. La razón aducida fue que las obras habían comenzado inesperadamente. Los fieles rezaron el rosario ante las puertas cerradas (foto de arriba).
En 2025, si las obras continúan, los organizadores buscarán otra iglesia. Este año, se sentían obligados por el programa aprobado por la Prefectura de Roma.
El 26 de octubre, la procesión partió de esta iglesia en dirección al Vaticano, portando más de 100 banderas diferentes que representaban a sus países. La policía contó 1.500 fieles cuando llegaron a la plaza de San Pedro.
En la calle, los católicos no encontraron ninguna oposición, señala Marquant: «Detrás de las ventanas de la Congregación… no lo sé».
En la basílica de San Pedro, las oraciones presididas por el cardenal Müller tuvieron lugar como se había acordado.
El domingo 27 de octubre, la misa celebrada por el obispo auxiliar suizo Marian Eleganti en la parroquia de Trinità dei Pellegrini (FSSP) estaba tan abarrotada que más de 200 (¡!) fieles no pudieron entrar en la iglesia.
JUEVES 7 DE NOVIEMBRE DE 2024.
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