* Francisco es famoso por cambiar siempre de secretarios, ahora parece haber elegido a uno «poderoso«: Juan Cruz Villalón. Algunos dicen que es el hombre que decidió el último consistorio del Papa y buena parte de la elección de los nombramientos cardenalicios.
A pesar de la tenaz rotación que Francisco quiso en los últimos años para evitar una concentración de poder en manos de sus secretarios privados, al final hubo un colaborador que logró destacarse más que otros y que, según fuentes bien informadas, tuvo un papel protagónico durante la hospitalización del Papa.
Se trata de Juan Cruz Villalón, quien se incorporó a la secretaría privada en 2023.
Bergoglio, quien lo ordenó sacerdote en 2011 en Buenos Aires, demostró su predilección en uno de los momentos más importantes de su pontificado: el pasado 24 de diciembre, de hecho, fue Juan Cruz quien lo acompañó al cruzar la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro en silla de ruedas. Francisco también lo quiso en el dicasterio estratégico para el clero, pero en los últimos días la atención del sacerdote argentino se ha centrado únicamente en el apartamento del décimo piso del Gemelli.

Juan Cruz es señalado por varias fuentes vaticanas como uno de los pocos que siempre permaneció informado del estado real de salud del Papa, además de poder opinar sobre la gestión de las noticias.
Quienes frecuentan los Sagrados Palacios tienen pocas dudas de que ahora que el Papa regresará a Santa Marta, el peso del último secretario argentino está destinado a crecer junto con la confianza que el enfermo Pontífice tiene en él.
Una situación similar a la de Stanisław Dziwisz, mano derecha de Juan Pablo II, quien durante y después de su última hospitalización en el Gemelli en 2005 jugó cada vez más un papel de filtro con el mundo exterior.
La figura de Juan Cruz hizo cambiar de opinión al Papa argentino, quien, a diferencia de sus predecesores, había realizado numerosos cambios y eliminado cualquier jerarquía dentro de su secretaría.
Bergoglio había sido categórico en cuanto a que sus colaboradores sólo debían tratar con él a tiempo parcial y no de manera exclusiva.
La intención papal era evitar que cualquier persona acumulara demasiado poder en la Curia en virtud de controlar su agenda.
- En 2013 Bergoglio llegó a Roma si secretaria y en los primeros días de su pontificado dejó a todos boquiabiertos al abrir personalmente el correo. Un asombro que indujo a Benedicto XVI a «prestarle» a Monseñor Alfred Xuereb, el número dos de los más famosos Gänswein.
- El prelado maltés fue sustituido en 2014 por el ya de confianza argentino Fabián Pedacchio, apoyado por el egipcio Yoannis Lahzi Gaid.
- Un equipo que se mantuvo hasta 2020, cuando Francis llamó al italiano Fabio Salerno y al uruguayo Gonzalo Aemilius a Santa Marta.
- El último fue reemplazado en 2023 por el argentino Daniel Pellizon mientras que Salerno permaneció en su lugar.
El papel del secretario personal es siempre crucial, pero lo es aún más cuando el Papa está enfermo. En el hospital y especialmente fuera de él.
Por NICO SPUNTONI.
DOMINGO 23 DE MARZO DE 2025.
IL TEMPO.