En opinión a medios de comunicación, Ramón Castro Castro, obispo de Cuernavaca, pidió al auditorio orar por México ante los tiempos urgentes que vive la nación. Violencia, endeudamiento e irreflexivas reformas, son algunos hechos que son preocupantes.
“La gravísima violencia en tantas ciudades y en tantos estados de nuestro querido México, como lo hemos dicho alguna vez, salpica la sangre de nuestros paisanos, de nuestros hermanos”, afirma Castro Castro además el grave y grande endeudamiento del gobierno federal es algo para preocuparnos”.
Estimó también que las reformas y el proceso de elección de jueces y magistrados es un “enredo jurídico y político al que se ha sometido al Poder Judicial”, a la vez que las minorías no tienen el lugar que les corresponde frente a las mayorías que “están destruyendo pilares de nuestra democracia, de nuestra República, de nuestro estado de derecho, de la constitucionalidad, de los valores cívicos elementales como el hecho de que los gobernantes están exigidos hablar siempre con la verdad y no poniendo solamente elementos que apoyan sus opiniones o su manera de actuar”.
Llamó a los oyentes a orar por México y suplicar a Dios por los gobernantes para que “tengan verdadero amor por el pueblo, sabiduría y prudencia para tomar decisiones”.
Castro Castro aprovechó esta ocasión para agradecer a los titulares del medio que difunde sus opiniones al despedirse, “por un tiempo razonable” de su espacio semanal debido a las ocupaciones como obispo de Cuernavaca y presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano: “Debo medir mis fuerzas y, por esta razón, quiero agradecer infinitamente a don Rafael y a Tere y a todos los que trabajan en Radio Fórmula por este tiempo tan extraordinario en el que he podido compartir con ustedes algunos puntos de vista de su servidor, algunas reflexiones y algunas invitaciones y acción para trabajar por nuestro querido México. Por un tiempo, y les pido su comprensión, no podré compartir estas reflexiones y estos encuentros de los lunes por la tarde, pero con la gracia de Dios, creo que podremos hacerlo después de un tiempo razonable…”