*. Se trata del dominico promotor de la ideología de género escogido por Francisco para predicar los «retiros» a los asistentes al Sínodo: Timothy Radcliffe.
En un artículo publicado en la edición diaria italiana del periódico del Vaticano, el cardenal electo Timothy Radcliffe, OP, uno de los dos asistentes espirituales de la sesión sinodal, cuestionó repetidamente las declaraciones hechas por el cardenal Fridolin Ambongo Besungu, OFM Cap., el cardenal que dirige el Simposio de las Conferencias Episcopales de África y Madagascar.
El cardenal electo Radcliffe también vinculó las dudas de los obispos africanos sobre la homosexualidad con la “intensa” presión de los evangélicos estadounidenses, de Moscú y de los musulmanes.
El informe de síntesis de la sesión sinodal de octubre de 2023, escribió el cardenal electo Radcliffe, “parecía dar marcha atrás con respecto al documento preparatorio sobre la apertura a las personas LGBT. La palabra ni siquiera se menciona. Muchos lo vieron como un fracaso”.
“El Sínodo anticipó este malentendido”, continuó. “Cuando las semillas caen en la tierra, no parece que ocurra gran cosa. Germinan tranquilamente hasta la primavera”.
Al analizar las formas en que ve al Espíritu Santo trabajando en el sínodo, Radcliffe escribió que “el Espíritu Santo nos invita a abandonar nuestra zona de confort como occidentales”.
“Cuando cayó el Muro de Berlín en 1989, muchos dijeron que habíamos entrado en una nueva era, el triunfo de la democracia liberal occidental”, explicó. “Cada nación estaba destinada a ‘evolucionar’ hacia nuestro modo de vida. Si algunos países, especialmente en el Sur, no estaban de acuerdo con nosotros, por ejemplo, en la acogida de los homosexuales, tarde o temprano tendrían que adaptarse. Nos equivocamos. Estamos entrando en un mundo multipolar”.
Refiriéndose a Fiducia Supplicans , la declaración de diciembre de 2023 del Dicasterio para la Doctrina de la Fe sobre el significado pastoral de las bendiciones, Radcliffe continuó:
El Papa Francisco también nos pide que abramos la Iglesia a todos, sean quienes sean. Todos, todos, todos: divorciados vueltos a casar, gays, transexuales.
Pero en algunas partes del mundo, acoger a los gays se considera un escándalo. Muchos obispos católicos de África lo ven como un intento de imponer una ideología occidental decadente al resto del mundo. El cardenal Fridolin Ambongo de Kinshasa, presidente de la organización que representa a todos los obispos católicos de África, lo ve como un síntoma de una cultura occidental decadente. Hace unas semanas declaró: “Poco a poco, ellos [los occidentales] desaparecerán. Les deseamos una feliz desaparición”.
¿Cómo conciliar los dos imperativos del papado de Francisco: abrirse a llevar el Evangelio hasta los confines de la tierra, a todas las culturas, y abrirse a todos los seres humanos, cualquiera que sea su condición y quien sea? El dilema estalló con la Fiducia supplicans , la declaración del Dicasterio para la Doctrina de la Fe que concede a los sacerdotes el permiso, sobre todo en situaciones muy específicas, para bendecir a las parejas en relaciones “irregulares”, incluidas las parejas del mismo sexo.
El cardenal Ambongo viajó a Roma para presentar el firme rechazo de los obispos africanos a la propuesta. Nunca antes todos los obispos de un continente habían repudiado un documento del Vaticano. Se hizo todo lo posible para calmar la crisis. El Papa había aprobado la declaración. El cardenal Ambongo confirmó que el excepcionalismo africano es un ejemplo de sinodalidad. Y señaló que la unidad no significa uniformidad. El Evangelio se incultura de manera diferente en las distintas partes del mundo.
El cardenal electo Radcliffe repitió luego su afirmación , hecha en un discurso en mayo, de que el Evangelio desafía a la Iglesia en África a acoger la homosexualidad.
“Es cierto que el Evangelio siempre se incultura en diferentes culturas, pero también desafía a todas las culturas”, escribió Radcliffe en el periódico del Vaticano. “Jesús era judío, pero desafió la religión de sus antepasados. ¿El rechazo a bendecir a los homosexuales en África es un ejemplo de inculturación o un rechazo a ser inconformista? La inculturación para una persona es el rechazo del Evangelio inconformista para otra”.
El cardenal electo Radcliffe luego relacionó las dudas de los obispos africanos sobre la homosexualidad con presiones externas “intensas”:
Otra preocupación que plantea Fiducia supplicans es que no parece haber habido ninguna consulta –ni siquiera con obispos u otras oficinas del Vaticano– antes de su publicación; tal vez no sea exactamente un buen ejemplo de sinodalidad. Los obispos africanos están bajo una intensa presión de los evangélicos, con dinero estadounidense; de los ortodoxos rusos, con dinero ruso; y de los musulmanes, con dinero de los países ricos del Golfo. Debería haber habido una discusión con ellos antes, no después, de la publicación de la declaración. Independientemente de lo que pensemos sobre la declaración, cuando nos enfrentamos a tensiones y para superarlas, todos necesitamos pensar y relacionarnos unos con otros a un nivel profundo.
El periódico del Vaticano publicó el artículo de Radcliffe sin ninguna explicación. En la página 10 de su edición diaria , el artículo apareció bajo el título “El Sínodo de los Obispos”; en un recuadro, los editores del periódico presentaron el artículo con estas palabras:
Abrirse a nuevas e inesperadas amistades, salir del clericalismo y de la propia zona de confort y abrirse a todas las culturas en nombre del universalismo cristiano. Son las formas en que el Espíritu Santo actúa en el Sínodo, «y cada una de ellas nos invita a una especie de muerte para poder vivir». Son las reflexiones del biblista y teólogo dominico Timothy Peter Joseph Radcliffe –a quien el Papa Francisco creará cardenal en el próximo consistorio– sobre el trienio del Sínodo sobre la sinodalidad, expresadas durante una conferencia celebrada el pasado Viernes Santo en el Stonyhurst College, en el Reino Unido…
El texto, adaptado, apareció en la revista inglesa The Tablet en abril de 2024 y fue reimpreso por Vita e Pensiero, revista bimestral de la Universidad Católica del Sagrado Corazón, en el número 4 de julio/agosto en una traducción italiana – editada por Simona Plessi – que publicamos en nuestras páginas.
Las expresiones de Radcliffe constituyen un insulto para los obispos no solo de África sino del resto del mundo que en base a los textos bíblicos, han rechazado bendecir el pecado, la sodomía.
Aducir que lo hacen «por dinero», dinero ruso, musulmán o estadounidense, constituye una absoluta falta de respeto y menosprecio a las enseñanzas evangélicas.
¿Dirá lo mismo de los miembros de las Iglesias Ortodoxas que incluso han roto el diálogo con el Vaticano por la misma razón? ¿Cómo es posible que alguien con esa mentalidad puede ser Cardenal de la Iglesia?.
MIÉRCOLES 16 DE OCTUBRE DE 2024.
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